EXTRA #3

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- Entonces el idiota de Mclaggen, trata de atrapar la Quaffle, se cae de su escoba y yo anoto.- Ambos comenzaron a reír.

Hermione, una tanto perturbada por tales carcajadas, cerró la puerta y se adentró completamente en casa. Dejó sus cosas y se acercó al salón.

- Draco, ya llegue... Oh, Blaise.- Saludó emocionada, acercándose a Blaise y siendo envuelta en un gran abrazo.

- Vaya que la vida de casada si te asienta bien Granger.- Murmuró el moreno, al alejarse de ella y observándola.- En cambio veo a Draco más viejo.

- Calla Zabini.- Refunfuñó el otro.

- En realidad todos nos estamos haciendo viejos, por eso... ¿Cuándo piensan darme sobrinos?- Comentó Blaise mirándolos a ambos.

La chica enrojeció como si tuviera mucha fiebre y Draco miró a otro lado, con nerviosismo. Hasta que se aclaró la garganta.

- Tanto volar, te está afectando. Mejor cuéntame cuando piensas casarte con Pansy.- Y contrario al pensamiento que tuvo el rubio con aquel comentario, Blaise sonrió.

- A eso vine.- Los tres tomaron asiento.- ¿Hermione recuerdas cuando me dijiste que serías la primera a la que le presentaría a la chica que me quisiera y arriesgue por mí?- Ella asintió.- Pues es el momento, quiero pedirle a Pansy que se case conmigo y quiero que seas tú quien me ayude.- Sonrió y todo su rostro se iluminó.

En los siguientes días Hermione comenzó a reunirse con Blaise, luego del trabajo e incluso el moreno se había sumado a sus citas con Draco, pues la pareja acostumbraba cenar fuera de casa dos días a la semana para romper la rutina.

Blaise se sorprendía al ver la dinámica relación entre el joven matrimonio, aspiraba que el suyo fuera igual. Miraba a sus dos amigos cuando el uno hablaba del otro, la comprensión que tenían y el amor que se profesaban incluso en el silencio.

Llevaban casi 3 años de casados, y luego de que su relación se hiciera pública, el mundo mágico estalló en críticas. Todos quedaron atónitos al saber que una heroína de guerra se había casado con el descendiente de una de las familias  involucradas al lado oscuro durante la guerra mágica. Acusaron a Draco de farsante y manipulador, lo culparon de haberla hechizado y no fue hasta que vieron cuán real fuera su relación, que los dejaron en paz. Pasaron de ser juzgados a ser amados, a ser el romance de ensueño, el amor prohibido que muchos deseaban experimentar.

Se decidió que Blaise le pediría matrimonio a Pansy, en una cena luego de su próximo partido de Quidditch con su equipo, que sería en Londres. Hermione ya había escogido el restaurante y había hecho la reservación para ellos además de encargarse de otros detalles, Blaise ya había elegido el anillo de compromiso y Draco lo había ayudado a escoger la ropa que utilizaría aquel día.

Y aquella noche, todo salió a perfecto. Tras la pregunta y la ansiada respuesta, Blaise y Pansy derramaron varias lágrimas. Lloraron por lo felices que fueron durante su noviazgo, por lo felices que se encontraban en ese momento y por la felicidad que los esperaba.

Desde que habían salido del colegio, Pansy se había acostumbrado a la vida de Blaise, en ocasiones viajaba junto a él, se establecían en una ciudad para meses después moverse a otra, en otras ocasiones, ella lo esperaba mientras él viajaba con su equipo. A diferencia de otros de sus amigos, ella no estaba estudiando para ser auror, medimago o funcionaria del ministerio, sin embargo era accionista de marcas de moda en el mundo mágico. Era buena en ello, era su mundo.

Su boda, fue maravillosa. Se realizó un día de primavera. 

El vestido de Pansy fue bellísimo, hecho por unos prestigiosos diseñadores, Blaise se enamoró más de ella en cada paso que daba hacia él en el camino al altar. La recepción también fue extraordinaria, al aire libre y con arreglos florales en cada mesa. Fue, como lo denominó la revista "Corazón de Bruja", la boda del siglo.

Ginevra Weasley, quién para ese entonces ya era Ginny Potter, los envidió pues aunque el moreno solo fuera un amor pasado para ella, deseó muy secretamente tomar el lugar de Pansy. Su corazón ya estaba curado, amaba a Harry tan profundamente que se odió al pensar tal cosa. Dejar ir por completo a Blaise fue difícil para ella pues no solo era cuestión de cerrarle su corazón, era cuestión de comprender que él era feliz, Pansy Parkinson lo hacía feliz y asumir la forma en que las cosas se habían dado. 

Y después de algún tiempo, lo hizo. Cuando los veía juntos en los partidos o torneos en los que coincidían e incluso en revistas de sociales, entendía que estaban hechos el uno para el otro. 

Si lo suyo no se había dado fue para que ella fuera feliz al lado de Harry y Blaise fuera feliz al lado de Pansy. 

Para que ambos pudieran encontrar a alguien que los quiera y arriesgue por ellos, ese tipo de amor que todos merecemos.

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Y aquí vengo con otro extra!!!!

Espero que lo hayan disfrutado. 

Gracias a todos por continuar siguiendo la historia.

Aún faltan algunos extras pero no son muchos.   

Voten y comenten. 

TRAVESURA REALIZADA 

Behind the walls of Hogwarts (En edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora