Miriam
Ni siquiera yo entendía lo que me estaba pasando en aquél momento. Lo único que tenía en mente era que me apetecía muchísimo besar a Mimi con poca tela de por medio. No tenía muy claro hasta donde quería llegar, pero la necesitaba cerca.
Escuché sus pasos sobre el suelo mojado del pasillo y me di cuenta de que la tenía ya detrás. Me giré lentamente, y tengo que reconocer, que no esperaba lo que vi.
La mirada de Mimi sobre mi cuerpo no era lo que me intimidaba, era el verla a ella, desnuda. Literalmente todas las chicas de la clase nos duchábamos con un bikini puesto, dada la poca intimidad que había en aquellas duchas. Todas excepto las Doblas, claro estaba. Y en algún momento, había olvidado aquél detalle.
Tragué saliva sonoramente, intentando que mis ojos no se apartaran del rostro de Mimi. Solo por un segundo me atreví a mirar sus senos, su abdomen plano y sensual. Sus largas piernas. Y cuando volví a sus ojos, estaban más cerca. Mimi acababa de entrar en la ducha, e inconscientemente, yo di un paso hacia atrás.
—¿Quieres que me vaya? —preguntó, casi en un susurro.
—No —respondí, con un hilo de voz.
Porque no quería.
—De acuerdo —asintió ella, dando otro paso.
Las duchas no eran muy amplias, por lo que en aquél punto, nos separaban unos pocos centímetros. Me costaba respirar, y notaba mi pecho subir y bajar nerviosamente. Lo peor era que, a través del bikini deportivo que llevaba puesto, aquél movimiento era fácilmente detectable. Aunque, ¿qué más daba? Si ella ya sabía de sobras lo que su presencia me producía.
Mimi sonrió a la vez que pasaba su mano por mi cuello, acariciándolo, hasta llegar a mi clavícula. Aquél contacto me estremeció, noté mi piel erizarse con una simple caricia. La chica acercó su rostro al mío, pegando nuestras frentes mientras que una de sus manos se aferraba a mi costado, acariciándolo primero y masajeándolo con fuerza luego.
—Las que os ducháis con el bikini puesto sois unas cutres —susurró, casi encima de mis labios.
—Ya... Pero te gusto igual —rebatí con la voz temblorosa, intentando sin mucho éxito, vencer el nerviosismo que me invadía.
Mimi sonrió socarronamente, y luego inclinó su cabeza suavemente, con la clara intención de besarme. Recibí sus labios con ganas, pero no con desespero. Mimi me besaba con suavidad, con mimo.
Sus manos se desplazaron por mi espalda, haciendo presión en algunas zonas. Yo, con las manos temblorosas, me atreví a hacer lo mismo por su cuerpo: hice que mis manos vagaran por su espalda, bajando hasta que llegué a su trasero y lo empujé un poco contra mí. Noté a Mimi soltar un pequeño jadeo en medio del beso, lo cual me excitó más de lo que pensaba.
Su lengua volvió a atacar sin tregua, ahora con más ganas; mientras que sus manos jugueteaban con la parte posterior del top de mi bikini. Su boca se separó de la mía, a la vez que dejaba un reguero de besos húmedos desde mi mejilla a mi mandíbula, recorriéndola luego desde arriba hacia abajo, empezando a mordisquear mi cuello cuando sus labios se encontraron con aquella parte de mi cuerpo.
Cerré los ojos y eché la cabeza hacia atrás, sintiendo un intenso cosquilleo en mi cuerpo.
—Déjame quitarte esto... —pidió Mimi, con la voz ronca.
—Hazlo... —le concedí, temblorosa.
Y la acción no se hizo esperar: no tardó nada en pasarme por la cabeza la prenda hasta quitarla y colgarla casi por casualidad en uno de los salientes de la pared creados para dejar los champús. La vergüenza me invadió nuevamente cuando noté como se tomaba un tiempo para observarme sin reparos. Me sentí expuesta, pero a la vez, tranquila al saber que estaba bajo su mirada. La rubia negó con la cabeza.
![](https://img.wattpad.com/cover/185824089-288-k244150.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Game Over 🌙 || MIRIAM²
ФанфикLas gemelas Doblas han crecido compartiéndolo todo y siendo confundidas constantemente. Eso nunca ha supuesto un problema para ellas, sino que siempre le han sacado el máximo provecho y se han reído a costa de ello. ¿Pero, qué pasa cuando a través d...