Capítulo 28

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Nunca me importó el origen de la vida, para mí un animal, un humano...un demonio, eran seres que ya están, que ya existen.

Así que nunca me imaginé que los íncubos no tuvieran ni tantita madre. Literal.

Los incubos, son una raza híbrida entre humanos y demonios. Cuando una súcubo queda embarazada de un humano antes de consumirlo (cosa muy común entre las súcubos más jóvenes e inexpertas) dejan al bebé en brazos de los demás incubos.

Al no tener padre ni madre, los íncubos dependen los unos de los otros, se organizan en familias sin una jerarquía clara donde, desde los más ancianos hasta los mas jóvenes, todos son hermanos de todos.

Ese fue el caso de Gil, Cass y Jon. Ambos son de madres diferentes, todas habían perdido toda visión de la vida excepto la de alimentarse, siendo capaces de consumir a varios hombres y mujeres en una sola noche sin sentirse satisfechas. Al final, ese tipo de seres eran ejecutados por las hadas, ya que ponían en riesgo la armonía de todos los faeries al quedar expuestos al mundo humano.

-Yo los encontré primero a ambos. Se estaban alimentando de un hada. Hermosa y sensual, a la que habían hechizado para alimentarse de ella, sin embargo, eran tan jóvenes que no supieron suprimir su hambre y la asesinaron. Cuándo se dieron cuenta se quedaron en shock como imbéciles, entonces intervine y desaparecí el cuerpo del delito. ¿Sabes que tan peligroso es meterte con un hada? Si no los hubiera ayudado, serían condenados a morir de hambre lentamente frente a la gente, a ser torturados, despedazados y ejecutados cuando no quede más que su tronco. En si, me deben la vida.

Un escalofrío me recorrió la espina dorsal. Gil sería capaz de asesinarme...
Cass pareció notar el terror en mi rostro, así que rápidamente añadió con nerviosismo;

-Pero tranquila, eran muy jóvenes para controlarse, ahora no saldrás lastimada.

Si, como no, díselo a mi corazón ultrajado.

-¿Tengo garantía? Porque creo que quiero devolver la mercancía.

-No, no, si te vas harías muy infeliz a Gil. Sé de sobra que te adora, está arriesgando mucho por ti, Ren. - tomó mis manos frías entre las suyas. Sus ojos brillaban con sinceridad.

-Además, En su alimentación, los íncubos difieren mucho nosotras. En vez de salir a buscar una presa al azar, los incubos la eligen cuidadosamente, siempre es una mujer joven, bella y culta. - comentó emocionada mientras pasaba un mechón de pelo detrás de mi oreja con afecto.

Fruncí el ceño contrariada. Aquí Gil debió de haber cometido un error o tenía gustos muy peculiares. Lo de joven se lo acepto, ¿Pero Bella y culta? Debería de conocer las calificaciones de la universidad. Yo era más bien como el pollito pio, sin gracia.

-No la devoran de inmediato, la cortejan de a poco y se alimentan despacio, cuidándose de no quitarle demasiada energía vital. - ésto me quito el aire. Dijo "no de inmediato", así que tarde o temprano seré un plato vacío ante él. Luego añadió ilusionada. -De hecho, se conocen casos de íncubos que contrajeron matrimonio con sus presas y pasaron el resto de su vida a su lado.

Oh, si... Dudo que ese sea nuestro caso. No si ambos desconfiamos del otro. Los secretos entre nosotros era los que nos unían.

-Tú aceptaste ser... Mmm, su alimento, ¿Por qué lo quieres, no? Confías en qué no te hará daño. - Cass no sabía cómo definir nuestra relación. Parecía ilusionada de que fuera así, pero la realidad era otra.

Más bien...

-No me importa salir lastimada, estoy con él porque sabe satisfacerme y tiene secretos sobre mi. Fuera de eso...no hay nada romántico.

Me atraía. El deseo sexual entre ambos era evidente. Él sabía hacerme olvidar la soledad y yo le daba energía. Estábamos en una balanza.

-Oh, es una lastima. -suspiró tristemente. -La verdad yo creí que Gil era correspondido.

Negué.

-Es correspondido, pero no de la manera que tú crees, Cass.

-Mmm, no me convences. Tus reacciones cuando estás con él son de alguien enamorada. Mira.

Antes de que pudiera objetar, la súcubo se envolvió en una neblina alucinante. ¿Qué es lo que estaba pasando?

-Cass... - estiré mi brazo dentro de la neblina preocupada de que le estuviera pasando algo, cuando una mano grande y áspera todo mi mano y me jaló hacia un pecho amplio y fuerte.

-Nat... -ronroneó contra mi oído, mis terminaciones nerviosas se alteraron de inmediato. Ese efecto solo él lograba causarme.

-Gil...

Frente a mi, mi íncubo me acunaba contra su pecho, envolviendo mi cintura entre su fuerte brazo y manteniéndome cautiva cerca de su cuerpo. Soltó mi mano y llevó la suya a mi rostro, acariciando la tersura de mis labios con extrema ternura.
Me dedicó una sonrisa radiante que alboroto mis sentidos.

-Mi linda soñadora, te amo.

Ronroneó contra mi oído, mi cuerpo entero comenzó a temblar, mi respiración se detuvo y mi corazón corría un maratón. Era la primera vez que alguien me dedicaba esas palabras después de mucho tiempo y no sabia como reaccionar. Menos aún, si esas palabras provienen de Gil. 

Yo... ¿lo amaba? Sin poder evitarlo, me sonroje. Oh, estúpido cuerpo, no te emociones. 

—Y tú, Renata. ¿Me amas?

Me tambalee cuando su lengua áspera acaricio mi lóbulo. Y jugueteó con el interior Demi oreja. Su respiración en ella me hacía delirar.

Yo, realmente yo lo...

Antes de ser capaz de ordenar mis sentimientos, la neblina que ví antes volvió a surgir de la nada encontrándome desconcertada. Gil había desaparecido y en su lugar se encontraba Cassandra.

—¡Lo sabía, lo sabía, a ti te gusta Gil! Si mi transformación hubiera durado un poco más lo habrías confesado.

Dando brincos como una niña, Cass fantaseó con mi relación con si hermano.

—¿Transformación?

En ninguna parte del instructivo venía esa función. Debería llamar para devolver la mercancía.

—Si, las súcubos somos capaces de adoptar la forma de un ser amado, aunque aún no soy muy buena en ello.

La vergüenza se convirtió en una conmigo misma.

—Te voy a matar Cass... ¡Eres súcubo muerta!

Grité con furia y corrí tras de ella, quién había huido fuera de la cabaña. Hoy, haría puré de sexo.

Hola!

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Hola!

Antes que nada, una disculpa por no haber cumplido con el maratón, pero cuento con poco tiempo. Sin embargo, trataré de subir un cap diario.

Y ¿adivinen de qué me acabo de enterar? Que el nombre de Gil, en varios países significa "tonto o lelo"  así que todo este tiempo Ren le ha dicho tonto a Gil. Ok, no. 😂

En realidad nombre así porque significa; Gil es una variante del nombre Egidius, era un nombre muy popular en la edad media y se llegó a convertir incluso en apellido, su significado es "El que se cubre con la piel del cordero" que puede traducirse como "El protegido".

¿Nada qué ver, verdad?

Sueños HúmedosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora