"Huye de las tentaciones despacio, para que puedan alcanzarte"
Anónimo
—————————————
—¿Es en serio? —pregunta ocultando su leve sonrisa— Puedes pedirme lo que sea ¿y me pides algo tan simple como un beso?
—Soy simple ¿Recuerdas? Una simple tentación —ironizo poniéndome más cerca de su rostro.
—¿Y estás dispuesta a asumir las consecuencias?
¿Consecuencias? ¿A quién le importan las consecuencias?
—Pruébame…
—Dijo el veneno —murmura completando la frase, sé que la he oído en algún lado que ahora no recuerdo porque no puedo despegar mis ojos de sus labios.
Y tal vez sí soy el veneno, tal vez luego no pueda asumir las consecuencias de mis acciones impulsivas, tal vez esto sea un error, pero los supuestos nunca me han detenido y no van a hacerlo ahora.
Se queda en silencio, aún está muy cerca pero no se ha movido, entonces entiendo que no lo hará, solo está buscando una forma de persuadirme.
—¿Sabes? Creo que mejor me guardaré mi acción para un momento más necesario que este.
—Me parece muy prudente de tu parte —murmura sin quitar sus ojos de mí.
—Un día querrás besarme sin que te presione, y eso me parece mejor que esto.
Me pongo de pie para dejar las tazas en la cocina y él viene detrás de mí.
—Así que te guardarás tu acción para algo más importante que un beso, y dejarás que yo te bese cuando ya no pueda resistirme a la tentación… —repite lo que acabo de decir como si no lo comprendiera por completo.
Dejo las tazas en el lavaplatos y en cuanto me volteo su rostro está a escasos centímetros del mío.
—O hasta que quiera... —murmura cuando siento nuestras narices rozarse.
—¿Quieres? —susurro apenas.
—No debería, pero sí.
—¿Y qué esperas?
—¿Y qué esperas tú?
Apenas las palabras abandonan su boca, nuestra distancia se reduce a cero, no sé si fue él, si fui yo o si fuimos ambos, pero todo el deseo y la tensión estallan en cuanto se unen nuestros labios.
Pone ambas manos a mis lados arrinconándome contra la encimera, y siento la tensión de su cuerpo completo en cuanto meto mi lengua en su boca.
Se siente suave e intenso a la vez, no es un beso desesperado, es un beso lento y profundo, con algunas mordidas y succiones leves. Me está enloqueciendo, solo con un beso necesito más.
Quiero tomar el control pero no me lo permite, con una sola mano rodea mi cintura pegándome a él, haciéndome sentir lo duro que está justo donde mi humedad ya amenaza con traspasar mi ropa.
Baja su mano a entre mis piernas, yo voy a hacer lo mismo pero me aleja con su antebrazo. Él pone las reglas, él toma las decisiones, así que simplemente me voy a entregar a sus manos.
Sus labios se apartan de mi boca y bajan suavemente por mi cuello, pero entonces se aparta de golpe llevando un dedo a sus labios para pedirme silencio.
Me siento confundida, mi respiración está acelerada, pero de todas formas noto que fue lo que lo alertó.
Pasos. Alguien sube la escalera de la entrada.
ESTÁS LEYENDO
Superficial
Mystery / ThrillerAmaya Hope padece de una rara afección en la amígdala de su cerebro que trae como consecuencia la absoluta incapacidad de sentir miedo. Ella tiene muy claro que eso le trae más problemas que soluciones, pero no dudará en usarlo a su favor cuando un...