Almost Paradise | Timotheé Chalamet

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- ¿donde está Anthony?— estaba terminando de arreglarme para irme a la escuela, cuando paso por el cuarto de mi hermano y veo que está solo.

- no se quedó a dormir. Llegue yo y le dije que podía ir a descansar.

- ¿que hay de su trabajo?

- yo lo hice.— y pareciera que no durmió en toda la noche. Se notaba.— no era justo tenerlo aquí sin nada que hacer cuando yo salí mucho tiempo.

- vió una muy buena película.— Chase ríe.

- si me lo comentó. Le agradas.— y el a mi.— por cierto... sigo soltero.

- como debe ser.

- ¿tanto la odias?— negué con la cabeza.— ya quedamos solo como amigos.

- solo quiero que seas feliz. Y que mejor que empezar de cero en una nueva escuela. Conocerás a alguien.

- tu igual... a un futuro director de cine famoso.

- quien sabe. — tomé mi mochila y baje las escaleras lista para irme.

Esta vez, Vicky y yo decidimos irnos en bicicleta ya que, hay demasiado tráfico en carro. Mejor no nos arriesgamos a llegar tarde a clase. Y ella salió antes porque ella tenía clase a las ocho de la mañana y yo no, yo entro hoy a las doce. Lo cual es en unos veinte minutos así que debo apurarme.

Irme sola en bicicleta en una ciudad que no conozco... ¿que podría salir mal?
Me puse mis audífonos y la música a todo volumen. Fui directo a la cocina por una barrita cuando me encuentro con Timothée y mi mamá almorzando.

- hola.— dije efusivamente. El me sonríe. Dios, aunque diga que no siento nada por el, su sonrisa no deja de ser hermosa.— hola.— repetí.

- hola Mary Cate Davis.— dice mientras prueba de los waffles que preparó mi mamá.— vine a visitar a Tony cuando me encontré con tu madre en la entrada.

- Timmy me estaba contando de la película. ¿Que emoción no crees? — "Timmy" — ¿quieres un waffle?

- me lo comeré en el camino, voy tarde a clase.— tome uno y lo coloque en mi boca.— adiós.— dije muy apenas por la comida en mi boca.

- ¿te puedo acomodar?— me pregunta mientras se levanta de su asiento.— tengo un tiempo libre.

- iré en bicicleta.

- ¡usa la mía! Jamás la uso.— mi madre sugiere.— hablo en serio Timmy.

- mamá...— dije en voz baja.

- Gracias Emma.— que amigos son. Ahora veo que Timothée es muy buen amigo. No solo mío sino de todos. Se acabo mi momento especial.— y muchas gracias por el delicioso desayuno. Estoy encantado.

- esta es tu casa cuando quieras. Te adoramos aquí.

- y yo a ustedes.— le da un beso en la mejilla a mi mamá y se sale junto a mi.— tu familia es increíble.

- me caes demasiado bien.— dije mientras reía nerviosa.— ¿seguro que quieres irte en bicicleta?

- vamos a ejercitar un poco.— que hermosa sonrisa, insisto.— vamos.

- okay.— me subí a la mía y el a la de mi madre. Empezábamos a avanzar por las calles llenas de árboles. Hay un camino el cual es increíble y no pasan carros.