Almost Paradise | Timotheé Chalamet

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- te dije que comprar este libro, sería una muy buena idea. - le dije mientras llegábamos a lo final de la ciudad. - le encantará.

- gracias por ayudarme. Sin ti no hubiera podido escoger algo bien. - voltea a ver a su reloj. - es tarde. ¿nos vamos?

- pero ¿y la feria? - dije. Y es que mas temprano nos dijeron que pondrían una feria a las nueve de la noche. - me gustaría quedarme.

- ¿en serio? - me pregunta y asiento. - perfecto. Bueno, por si acaso podemos rentar unas habitaciones. - voltea a ver al hotel que estaba enfrente.

- cuartos separados. - recalco. 

- por supuesto. Si, así será.

- bien.

Llegamos a la recepción del hotel y pedimos en efecto dos habitaciones por separado. Cuando dije que quería quedarme era en serio, y si quiero ir a la feria. Me encantan. Esto no tiene nada que ver con Timothée así que, por ello, habitaciones por separado. 

Estuvimos toda la mañana en busca de un libro para su hermana o quizá música, pero encontramos una muy hermosa edición antigua de Orgullo y Prejuicio la cual, por lo que me dice Timothée, a ella le encantará.

Ahorita, aprovechando que es temprano, salimos a la terraza de mi habitación. Esraba tan grande, y tenía camastros para poder ver la vista. Cold Spring es hermoso. En verdad que si. 

- ¿creíste volver a Cold Spring? - le pregunté mientras tomaba asiento. Por alguna razón no había tanta gente aquí, tan solo una pareja de viejitos se veían desde aquí, ellos están abajo en la alberca. 

- la verdad es que no. ¿tú?

- menos. - reímos. - sigue igual de lindo.

- si...

- quiero vivir aquí cuando envejezca. - decimos al mismo tiempo.

- te has copiado de mi idea. - me dice este.

- claro que no. - le di un codazo. - yo lo pensé primero.

- no tienes manera de comprobarlo. - se levanta de su silla y se recarga en la pared. - por cierto, no recibí tu guión. De tu película.

- me arrepentí. - seguí viendo al frente, en estos casos en especial no quisiera hablar de esto. - no es bueno.

- déjame yo juzgarlo.

- no te gustará. - me detuve.

- ¿por qué no? - voltee a verlo- las probabilidades  de que no me guste son del uno por ciento.

- Chris lo leyó y no le gustó. - alzó los ojos. - bueno, no dijo eso. Tan solo, no le ve futuro. - mejor uso sus palabras para evitarme malos entendidos.

- Mary, perdóname si te molesta lo que te voy a decir pero es algo que tengo que decir ya. - esta vez sonaba determinado, listo para decir lo que el quería. Asentí y miré al suelo, no quería verlo a los ojos mientras tenía que darme un sermón. Se acerca un poco, lo siento. - yo no creo que te este haciendo bien estar con el.

- tu no sabes lo que pasa. Solo te quedas con lo exterior.

- quizás. Quizás tengas razón y yo este mal. - levanta los hombros. - pero lo que sé, es porque tu, me lo has contado. - enfatiza "tú". - y perdón, pero creo conocerte bien. Y ahora eres... diferente.

- no se que esperas, Timmy. Lamento si no soy lo que quieres. No escojo mi personalidad esperando complacerte.

- no, no lo tomes así. - parecía estarse enojado, pero to también. - creo que estás olvidando por completo quién eres.

- ¿y tu si sabes quien soy? - me crucé de brazos.

- se que eres increíble en lo que haces. Jamás te había visto insegura de tu trabajo. - para las manos por su cabello rizados. - tu y yo, y todos quienes te conocemos, sabemos que eres increíblemente talentosa.

- la gente falla.

- es cierto, tampoco eres perfecta, lo entiendo. - asentí. - pero aún así, no por eso dejarás que algo en lo que te estabas esforzando, terminé en la basura por solo una opinión. - no dije nada. - solo no quiero verte... triste. 

- no lo estoy. - evadí de nuevo su mirada.

- ahora lo estás. Lo sé, estás evitando voltear a verme. - lo miré para mostrarle que se equivoca. - tienes razón, quizá al final del día no soy nadie para decirte que hacer o que sentir. Dejé de ser una pieza importante en tu vida. Se que fue mi culpa. - empecé a sentirme triste, justo como el lo dijo, pero no por lo de mi película sino por lo que me estaba diciendo. - se que no hice lo que debí en su momento y se que lo arruiné muchas veces, pero eso no significa que me has dejado de importar. - cada vez que decía algo más mis cejas bajaban mas a chocar con mis ojos y estos empezaban a llorar. No salía nada, pero lo sentía. - pero eres increíble y me duele que no puedas verlo.

- Timmy...

- hace mucho tiempo que no me decías así. - sonríe, pero también, podía ver la tristeza en su mirada. - puede que sea malo, tu guión, pero no lo dejes si te gusta, no por un comentario. Sigue adelante. 

- cuando dije que las cosas han cambiado... no mentí. - dije mientras me ponía de pie para poder tener bien esta conversación.

- yo sé. Me consta. Ahora dices cosas como... como que no te gusta el matrimonio. - asentí, afirmando ese hecho. - sabes que no es cierto.

- claro que si es cierto.

- y que ahora, no te gusta el amor. No quieres tener un "nombre" para tu relación pero eso es solo una excusa al final del día para no tener una pareja. Para no tener que decirle "novio". - Timothée Chalamet parecía mas mi psicólogo que mi amigo. - Ya no quería oír esto, me empecé a enojar de nuevo. - y no te gusta el matrimonio, porque no lo quieres con el.

- basta. - me toma del brazo y me voltea a el. - suéltame.

- ¿me equivoco? - no  dije nada. - no quieres esas cosas porque sabes que no lo quieres con esa persona. - me solté. - ¿que pasa? 

- quizá así soy ¿okay? no entiendo porque le das tantas vueltas al asunto. Deberías dejar de intentar entender algo que no tiene que ser entendido ¿por qué no lo haces con alguien mas y ya? 

- porque te amo a ti. - aunque nadie me lo crea, yo al escuchar eso, me asombre. Solté un suspiro. Me dejó sin palabras. No sabía que decir. Y el lo notó.- me iré a mi habitación. - molesto, se va.