ONE SHOTS | Tom Hiddleston & Sebastian Stan y tú| By, 19Jane9HIZU

THE FORMULA | SEB

SEBASTIAN STAN

Advertencias: no.

Tan rápido como sonó la alarma del despertador te levantaste de la cama, soñolienta te dirigiste a la recama de tu pequeña hija Lucy, le hablaste un par de veces para que se levantara la niña, pues hoy era su primer día de escuela, Lucy iba a entrar a primer grado de primaria y aunque estaba muy contenta no podías dejar de ver un destello de nervios en tu niña.

Tu esposo llegó con ustedes minutos después, había reservado un día de vacaciones en la empresa para este día, besó en la frente a su princesa consentida como Sebastian le decía, y luego te besó con amor en los labios.

Lucy entró al baño para ducharse, mientras Sebastian y tú arreglaban la mochila y los útiles de su hija.

- Se ve contenta-, dijiste rompiendo el silencio que reinaba entre tu esposo y tú.

- Sí-, respondió Sebastian de inmediato con media sonrisa, -Pero yo no lo estoy-.

- Yo tampoco-, exclamaste sincera.

Sebastian y tú temían que Lucy sufriera en la primaria como lo hizo cuando entró al jardín de niños, pues pasaron semanas para que la niña se adaptara a estar unas horas lejos de ustedes, y por más que le explicaban que debía asistir a la escuela, ella no quería apartarse de su lado, los tres eran muy unidos y eso no les había afectado hasta aquel día.

Claro, con el paso de los días y después de que Lucy hizo amigos, la situación se volvió mucho más llevadera, pero ahora, temían que su hija volviera a sufrir por el cambio, al entrar a su nueva escuela, les preocupaba que Lucy fuera tan dependiente de ustedes, algo que era hasta cierto punto lógico, ya que Lucy era hija única.

***

Una vez que la familia Stan se duchó y se arregló, Sebastian, Lucy y tú bajaron a la cocina y mientras preparabas un sencillo desayuno, tu hija jugaba a las muñecas con su padre.

Sebastian se veía tan adorable peinando las pequeñas cabezas rubias de las muñecas de Lucy y luego decidiendo el atuendo ideal para cada una de ellas; Sebastian era muy feliz con su hija, adoraba verla reír y verla tan contenta, y ni tú ni él descartaban la posibilidad de próximamente darle un hermano o hermana a Lucy.

Los tres desayunaron con un poco de prisa, y después partieron en el auto hacía el colegio, durante el trayecto cantaban las canciones favoritas de Lucy a todo pulmón ganándose miradas confundidas de las personas que los miraban en cada semáforo donde se paraban.

Al fin llegaron al colegio y la hora decisiva llegó, Lucy se despidió primero de su padre con un gran abrazo y un beso.

- Pórtate muy bien princesa consentida-, dijo Sebastian mientras le daba a la niña su mochila y su lonchera.

Lucy solo asintió y volteo a verte para darte también un abrazo y un beso.

- En la tarde que regresemos por ti, te llevaremos a tu restaurante favorito para que nos platiques cómo te fue hermosa-, exclamaste calmada mientras te agachabas para quedar a la altura de tu hija.

Lucy trató de sonreír, pero no pudo hacerlo, miró a su alrededor y pudo ver a una niña llorando y aferrándose a su madre suplicándole que no la dejara en el colegio, y por otro lado miró como un niño hacía berrinches en el suelo con la misma intensión de no quedarse en la escuela.

La pequeña recordó lo que sintió el primer día en el jardín de niños y a pesar de ser tan chica y de no querer separarse de ustedes, se prometió no llorar esta vez, porque no quería ver a sus padres tristes.

- Ya me voy mami-, dijo la niña sorprendiéndote por su actitud, -Me voy a portar bien papi-, exclamó dirigiéndose a Sebastian.

Lucy se armó de valor y aunque de sus ojitos estaban a punto de brotar lágrimas, no se lo permitió, caminó hasta el interior del colegio y después se perdió entre la multitud de niños.

Sebastian y tú permanecieron abrazados en el mismo lugar, un tanto sorprendidos por la actitud de Lucy, pero al mismo tiempo esperando que la niña volviera a aparecer en cualquier momento por entre los niños y corriera hasta ustedes llorando y suplicándoles que no la dejaran, sin embargo, no fue así.

Después de un tiempo prudente, se retiraron de las instalaciones del colegio, ninguno de los dos decía nada, iban a regresar a su casa cuando Sebastian habló.

- Deberíamos quedarnos cerca del colegio por si Lucy necesita algo-.

- Estaba pensando lo mismo, amor-, dijiste con una sonrisa nerviosa.

***

Las horas pasaron, Sebastian y tú permanecieron cerca del colegio imaginando mil cosas que nunca pasaron. Cuando se acercó la hora de la salida, estaban parados justo donde habían dejado a Lucy por la mañana y cuando los niños comenzaron a salir de las instalaciones del colegio, los dos se estiraban para buscar a su hija.

Sebastian y tú sonrieron ampliamente al ver como Lucy se dirigía a ustedes con una radiante sonrisa, la niña corrió en cuanto los vio, los abrazo con fuerza y ustedes la besaron hasta cansarse.

Lucy estaba muy contenta porque había hecho muchos amigos, mientras los tres se dirigían al restaurante favorito de la niña como lo habían prometido, la pequeña no dejaba de hablar y ustedes no podían estar más contentos de ver a su hija tan feliz.

- ¡Ay Seb! -, exclamaste divertida en cuanto tu hija fue a subirse a los juegos del restaurante, -Estábamos tan angustiados por Lucy-.

- Y ella haciendo amigos-, dijo Sebastian con una gran sonrisa.

- Me alegro tanto que no haya sucedido lo que nos pasó en el jardín de niños-, dijiste tomando la mano de tu esposo sobre la mesa.

- Yo también-, confirmó Sebastian, -Pero, esto nos enseñará a no sobreproteger a Lucy-.

- Mi bebé ya creció-, dijiste con cierto tono de nostalgia mientras mirabas lo grande que estaba Lucy.

- Podemos tener más hijos T/N-, propuso Sebastian con tono pícaro en su voz, -Conozco la fórmula ideal de hacer muchos bebés-.

- Encantada de probar esa formula amor-, dijiste sonriendo.

Sebastian te besó con amor y tú le correspondiste, más tarde todos regresaron a la casa más tranquilos y juntos miraron una película hasta que fue hora de que Lucy durmiera, entonces Sebastian y tú aprovecharon para poner en marcha la fórmula infalible de tu esposo para hacer bebés.

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N/A: Hola de nuevo, mil perdones por abandonar un poco este proyecto, pero me traen como loca en el trabajo y no me habían dejado tiempo para nada.

Gracias a todas por su paciencia y por todo su apoyo ❤, les pido que si les gustó la historia dejen su hermosa estrella ⭐, y quiero invitar a que me sigas (si es que todavía no lo has hecho), y también que pases a mi perfil y cheques mis otras historias.

Mil gracias por leerme, hasta la próxima 😉✌