Sangre, luz y oscuridad reinaron entre el infierno y el cielo, con los gritos de guerra y agonía.
Después de que las almas puras de los Arcángeles tomaran las llamas del infierno al ser los vencedores, obligan a los demonios a reencarnar en la Tier...
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En pocos segundos estaba junto a Amara quien parecía no respirar, estaba tan asustado que quería gritarle qué tenía.
Zerek había adquirido una postura preocupada, cargando una ira hacía mi persona como si supiera que tuviera algo que ver con todo esto.
—Ciara... —Leí en sus labios rojizos, pues su voz no la llegué a percatar.
—¿Qué pasa con ella? —Zerek se puso frente a ella y la tomó de los hombros. En este punto, su cercanía no me importó —Amara qué pasa.
—Sé dónde está —sus ojos se cristalizaron y despertó mi alivio.
—Tu auto —me dijo para comenzar a caminar.
Ambos, con Zerek siguiéndonos corrimos al auto sin perder un segundo en buscar las llaves y arrancar.
—¿Cómo demonios sabes eso? Tenemos que llamar a la policía —Zerek se sentó en la parte de atrás agarrándose de ambos asientos.
—Tiene razón, tenemos que llamar a la policía —me sorprendí de mis propias palabras concordando con él por primera vez. —¿Cómo sabes? ¿Estás segura?
No había muchos autos en el camino así que la velocidad no fue un problema.
—Calle Pericolum. Arranca Blake y sin policías hasta ahora.
No podía hacerlo más, sería peligroso.
—Un hombre me llamó, su voz estaba distorsionada pero sus palabras fueron claras —estaba tan agitada como nerviosa —"Último bar a dónde fuiste, se encuentra tu hermana"
De repente no me gustó la idea y frené.
Amara irradió desesperación y se volteó de un tirón.
—¿Qué haces? ¡Arranca ya!
—No sabemos quién te llamó y como porqué sabe la localización de tu hermana. ¿Cómo sabe a cuál fue el último bar al que fuiste?
Sonaba a una idea pésima al seguir las indicaciones. Aún no sabíamos quién era "S" entonces no era seguro nada para ella ahora pese a que ya no se había presentado recientemente ¿Qué tal si es el chico rubio quien trata de hacerle una mala broma?
—¿Qué bar fue al último que fuiste? —Zerek estaba irritado también.
—Uno de mala muerte siguiendo a Grace —hablaba muy rápido.
—¿Tu prima?
—¿Cómo sabes que es mi prima?
Zerek se quedó callado unos segundos antes de responder.
—No es difícil adivinar, vives con tus tíos.
—¡No estoy para esto ahora! O me acompañan o me dejas las llaves para ir yo.
