Cuando llegué a la cafetería con mi hermana me desconcertó un poco ver a Blake y Rose solos en la misma mesa. Después recordé la pequeña conversación con ella de si me gustaba el chico.
Lo que si no me esperaba es que a la hora de levantarse y despedirse Rose se pusiera de puntitas y uniera sus labios.
Pareció que a los dos nos tomó por sorpresa pues él pareció desorientado. No hizo nada, solo se quedó ahí parado.
Aparté la vista lo más rápido que pude, poniéndole toda mi atención a mi hermana llenándome con una enfermiza cólera y con un nudo en la garganta sin saber por qué me sentía así.
Ella unió sus cejas y giró la cabeza al escenario.
—¿Te gusta ese chico? Es lindo —mordió el pastelillo de chocolate que siempre pedía.
Resultó difícil reunirnos todos como familia. No había desbordado tantas lágrimas como ayer, cuando sentí el aroma de mi hermana entre mis brazos.
Pensaba que estaba muerta. No me podía engañar a mi misma y sin embargo aquí estaba, frente a mi. Dormimos todos juntos en la misma habitación como pudimos. Mis tíos y hasta mi prima también se alegraron sobremanera verla "bien". Estaba de todas las maneras agradecida de tenerla conmigo de nuevo. Después del interrogatorio fuimos a la casa a llorar más. No podía expresar el alivio que me daba observar sus ojos grises, un poco apagados.
El detective no pudo sacarme mucha información pues yo tampoco la tenían. No sabía quién me llamó o porqué me dijo dónde estaba mi hermana o cómo lo sabía. No me quejaba tampoco pero no estaría tranquila hasta saberlo.
Ciara estaba conmigo, pero no me quitaba la preocupación.
La policía fue quien más la interrogó al igual que nosotros y sin obtener nada a cambio. Decía no recordar nada en lo absoluto. Recuerda ver a su novio, salir de la escuela pero no recuerda si llegó a la casa o si algo le pasó en la calle. No recuerda ni un solo día en el que detuvo desaparecida. Qué estuvo haciendo o los rostros de alguien en el lugar, tampoco sabía que hacía ahí o en qué momento se puso a bailar. Solo recuerda mi rostro gritándole que regresará a mi.
Me llenaba de ira y ganas de llorar por no saber más, como si hubiera estado en coma pero despierta.
Los médicos le dieron una revisión rápida pero parecía tener signos vitales normales. No le dolía nada. Le sacaron sangre para saber si llevaba alguna sustancia que le ayudará a olvidar pero aún no salían los resultados.
Nada, no tenemos nada de quién le pudo hacer eso. No tenía ni un solo sentido lo que decía. Pensé en que nos estaba engañando, tal vez por miedo, por una amenaza pero cuando las preguntas ya no cabían en su cabeza se puso a gritar sosteniendo su cabeza en un ataque mientras se puso a llorar en el piso. No eran seguidos esos ataques pero sí que los tenía y nunca fue buena mintiendo por lo que supimos que en efecto decía la verdad. Eso preocupaba más.
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Solo es un poco de oscuridad
ÜbernatürlichesSangre, luz y oscuridad reinaron entre el infierno y el cielo, con los gritos de guerra y agonía. Después de que las almas puras de los Arcángeles tomaran las llamas del infierno al ser los vencedores, obligan a los demonios a reencarnar en la Tier...