Capitulo 30

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El día era mejor que ayer, con los rayos de sol mañanero infiltrándose en la casa por las ventanas

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El día era mejor que ayer, con los rayos de sol mañanero infiltrándose en la casa por las ventanas. Le sentía bien el sábado.

Mis padres habían salido con mis tíos desde temprano.

Jugaba con mi cereal con la cuchara. El apetito no despertó conmigo como lo hacía con regularidad a pesar de ser ya las diez de la mañana.

Ciara bajó de las escaleras sonriente, fresca con el cabello mojado de su ducha, dejando su olor a rosas cuando pasó junto a mi para ir a la cocina y servirse igual cereal. Yo seguía en pijama.

—Buenos días —soltó, sacando un plato de la alacena.

—Buenos días —contesté con recelo. Observaba cada movimiento de ella. —¿Cómo amaneciste?

—Genial, es bueno estar en casa. ¿Pudiste dormir un poco anoche?

Así que sí se acordaba que fui a su habitación.

Trajo su plato de cereal a la mesa y se sentó frente a mí, llevando un gran bocado a su boca.

—Si, si, un poco.

Seguí viendo sus movimientos, concentrada con felicidad en su cereal. Se le veía alegre.

—Ayer... No sé ¿Tuviste pesadillas?

Alzó su rostro y pensó un poco.

—No, creo que no. Dormí bastante bien —otro bocado.

Asentí y comí un poco.

—Deberíamos comprar más de estos cereales ¡Son deliciosos!

La miré con extrañeza.

—¿Los Zucaritas?

—Exacto, son muy ricos.

—Siempre hay en la casa —siempre los desayunaba.

—¿De verdad? Vaya, debería comerlos más entonces —sonrió y continuó comiendo.

—Ajá.

—¡Hola niñazas! —Grace bajó por las escaleras y se sentó junto a nosotras.

Tenía que hablar con ella. Lo he querido hacer desde hace días pero se interpusieron un par de detalles.

—Bueno ¿Ustedes irán?

Hice una mueca por su falta de información.

—¿A dónde?

Ella mostró una sorpresa sarcástica mientras se acomodaba su cabello rojizo hacía un lado.

—¿De qué hablas? ¿Acaso no sabes de la fiesta que planea tu amiguito? ¿Cómo se llama? ¿Payton?

Fruncí el ceño ante la noticia. Me paré para ir por mi celular al cuarto.

—Yo iré —se alistó mi hermana con un brinco para acomodarse mejor en la silla color chocolate.

Solo es un poco de oscuridadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora