Tú en ninjago (Libro 1 de 3)

capitulo 54

Pov's _

Han pasado dos semanas del homenaje de Zane y todo iba fatal en este lugar, las conversaciones son incómodas, no se podía compartir bien porque la mayoría estaba a la defensiva o deprimidos.

Las etapas del duelo estaban funcionando distinto para todos.

Cole: ¡ya no te soporto!— grita con un tono muy enojado que me hace saltar en mi lugar.

Ahora estoy en habitación, suelo estar aquí y dibujar a mi amigo o simplemente recordando cosas del pasado.

Jay: ¡eres un mal amigo!— le recrimina molesto y dolido. Me acerco a la puerta que abro al instante saliendo de mi habitación para ver a los chicos.

Cole: ¡acepta que perdiste!— le grita nuevamente. Me acercó a ellos siguiendo sus voces hasta llegar a la cocina donde estaban de frente gritándose cosas a la cara.

Jay: ¡no he perdido nada!— le grita de vuelta con rabia sin prestarme atención— ¡sabes lo que siento por Nya y aun así te metes en nuestra relación!.

Los observo y ambos están muy molestos, sus rostros reflejaban irá que me hace sentir lástima por verlos en ese estado.

Cole: no hay ninguna relación— le responde entre dientes— ¡además ella me prefiere a mí!.

Otra vez estaban peleándose por Nya, hace unos días que habían comenzado con esto nuevamente, primero fueron pequeños roses, pero ahora ya eran gritos, espero que nunca lleguen a los golpes.

_: por favor paren— les suplico desde mi puesto sin levantar mucho la voz, ya que me sentía nerviosa cada vez que ellos discutían.

Pero ninguno me hizo caso.

Jay: ¡ya no soporto verte!— le grita con coraje apuntándole, pero baja la mano y se da la vuelta— ¡me largo!— espeta caminando para irse del lugar pasando por mi lado sin mirarme.

Cole: ¡yo tampoco soporto verte!— le responde de igual forma— ¡también me voy de aquí!— le grita caminando por mi lado sin voltear a verme, lo que causo que mi corazón doliera. A los segundos de que ambos se fueran siento como dieron un fuerte portazo en sus habitaciones.

Kai: no creo que hablen en serio— me dijo apoyando una mano en mi hombro.

No sé en qué momento los chicos habían llegado a mi lado, supongo que al igual que yo, llegaron al escuchar tanto ruido.

Lloyd: solo están molestos— me dice sonriéndome de forma leve para tranquilizarme, por lo que solo asiento no muy convencida.

Pero mi amigo rubio no tenía razón.

Jay y Cole se habían ido tal y como dijeron sin despedirse de nadie más que de Lloyd, lo que me dolió mucho. Había pasado una semana y no sabía nada de ellos, yo por lo menos, pero sé que el ninja verde los tiene vigilados. Algo que he notado últimamente es al ninja rojo muy extraño.

Estaba sentada en la sala leyendo una novela de romance cuando de reojo veo a Kai llegar al lugar con unas maletas, en sus manos, lo cual me dejo sorprendida haciendo que el libro cayera de mis manos al suelo.

_: Kai— le susurro y me mira con una sonrisa triste que me deja en el mismo estado. No pensé que él también se iba a ir.

Kai: debo seguir mi camino— me dice mirándome de forma melancólica— ya es tiempo de irme— me comenta mientras yo me acerqué a él y nos abrazamos— cuídate enana— me pidió riendo de forma leve. Revolvió mi cabello y se fue así nada más.

Sin Zane el equipo se había disuelto, nada era como antes, era como si nuestro amigo era el pegamento que nos unía.

Pasando el tiempo, el Sensei Wu vendió la academia, por lo que nos mudamos al monasterio del padre de Lloyd, pero me sentía fatal y sentía que ya nada era como antes. Han pasado dos meses desde que los chicos se fueron, Lloyd trata de levantarme el ánimo, pero talvez este ya no es mi lugar.