Rápidamente limpie la sangre que corría por mi nariz y evite la mirada de Elijah, no comprendía nada. ¿Por qué Kol?
Me levante sin decirle una palabra a Elija y me retire a mi habitación, este no me siguió, por suerte había comprendido lo que era privacidad.
Dos días, hacían ya dos días seguidos en los que Klaus y Hayley se iban de compañeros a tomar y beber sangre de brujas, comprendía que buscara distraerla pero esta no era la forma y había escuchado a Klaus discutir con Elijah esa tarde.
Pero esta mañana no fue lo que me preocupo, estaba haciendo la rutina de siempre comer y leer, porque claramente el plan de Elijah se llevaba lento, y a Klaus casi no lo veía.
-Señorita Larissa si no necesita más nada iré a buscar más bolsas de sangre –comento Maccio al verme frente al librero.
-Sí, puedes retirarte –le conteste tranquilamente, cuando este se hubo retirado, apareció Elijah con sus manos en los bolsillos mirándome.
-Llevas evitándome días luego de nuestra conversación y el suceso extraño –hablo este llegando más cerca, me estaba molestando mucho todo últimamente, el libro que había tomado con mi mano derecha se cayó ante un dolor repentino en mi vientre.
-Elijah –le hable con pánico en mi voz, este dolor lo había experimentado muchas veces como para saber de qué se trataba y él también lo comprendió-, no puedo –comencé a decirle entre lágrimas-, no de nuevo Elijah... ayuda.
-Larissa a esta altura del embarazo es imposible que lo pierdas –trato de calmarme él mientras me ayudaba a recostarme en el piso-, piensa en algún hechizo que puedas utilizar –me hablo colocando su mano en mi frente, mi temperatura aumentaba.
-Protegas me, venenum in corpus meum, et illa removeat a me –repetía una y otra vez, con lágrimas en mis ojos y el dolor en mi vientre, perdí la cuenta de cuantas veces lo recite, hasta que el dolor paso. Cuando abrí mis ojos Elijah se encontraba abrazado a mí en el piso, rápidamente me separe de el para vomitar, me encontraba vomitando el veneno que hubiese ingerido.
-¿Estas bien? –pregunto Elijah muy preocupado recogiéndome el pelo.
-Claramente no –le conteste llorando, Elijah me tomo en sus brazos y se encamino hacia mi habitación, dejándome ahí.
-Volveré pronto para ver como sigues –hablo acariciando mi rostro y limpiando mis lágrimas, el olor fétido de cuerpos de brujas muertas me dieron ganas de vomitar-. Ahora lidiare con otros dos problemas, pero volveré.
Pude escuchar como Elijah se enfrentaba a la oscura Hayley que juraba rebeldía, y luego se encamino hacia Klaus, de verdad no quería escuchar esa conversación, me encontraba en posición fetal acostada en nuestra cama, pero me era imposible no escucharla.
-La llevaste a casar brujas de nuevo –lo acuso Elijah a Klaus.
-Solamente quería persuadir a las brujas para que encontraran la estaca de roble blanco, cuando dijeron que no podían, entonces deje que Hayley se divirtiera –lo escuche contestarle a su hermano despreocupado de todo lo que le rodeaba.
-Se vuelve más feroz con los días, no ves que se está desbaratando –le explico este con calma, si fuera Elijah ya le estaría pateando el trasero.
-Tal vez el problema son tus normas tan exigentes –hablo contra su hermano Klaus-, Hayley es una de nosotros ahora, ser un vampiro solo exagera lo que eres en realidad y los lobos son muy salvajes. Sabe que no puede vivir en el lindo paisaje que le pintaste en su cabeza, tu juicio solo la lastima más.
-Intento ayudarla, y pedí que tú la ayudaras hermano –le dijo Elijah perdiendo la paciencia.
-Se supone que eso hago –exploto Klaus golpeando algo-, debiste verla anoche cubierta con la sangre sonriendo de oreja a oreja, ella se está acoplando, menos criticas de tu parte harían que Hayley estuviera bien.
-Escucha Klaus, la madre de tu hija necesita estar mejor que solo bien –exploto finalmente Elijah-. Y sabes quién no está bien y lloraba en el piso deseando no estar cubierta de sangre de su propio hijo de nuevo Larissa, mientras ustedes dejan un rastro de sangre por todo Nueva Orleans, la persona que tu proclamas ser el amor de tu vida y a quien has estado ignorando, casi pierde al hijo que esperan en el suelo de nuestra biblioteca. ¿Qué te parece eso hermano? –cada palabra que le había dicho Elijah provocaron que volviera a llorar, porque era verdaderamente lo que sentía, pero que no había encontrado ni la oportunidad ni las palabras para decírselo.
No necesitaba de mi olfato o tercer ojo para saber que Klaus seguramente se encontraba con su mejor cara de perro abandonado bajo la lluvia mirándome.
-Larissa –pronuncio mi nombre y lo escuche caminar hacia mí hasta que se agacho frente a mí-. ¿Quién te hizo esto?
-No lo sé –le respondí permitiéndole limpiar mi lágrima, generalmente siempre nos vemos rodeados de una sociedad, pero ahora no, solo estamos entre personas de confianza.
-¿Dónde está tu perro faldero? –pregunto Klaus enojado parándose y mirando hacia la otra punta de la pared, me incorpore y estaba Elijah en el marco de la puerta mirándonos como si hubiera tenido una revelación.
-¿Qué están queriendo decir? –pregunte mirándolo a Klaus sin comprender nada.
-Maccio ha sido el único que estuvo contigo hoy en la mañana Larissa y es el que te provee el alimento –dedujo Elijah, pero recuerdo la carta que los Strix me habían dejado la primera vez que paso-, es un vampiro Larissa, pudo haber sido reclutado por los Strix sin ningún problema.
-Elijah es imposible –le dije parándome y evitando la ayuda de Klaus-, cuando mis padres lo convirtieron dejaron claro en su mente que vive para servirme.
-¿Y que si se cansara de ser el perro faldero de una princesa revoltosa? –pregunto Klaus ganándose mi mirada.
-Los Strix no tienen la fuerza suficiente para contrarrestar los mandatos de mis padres –les dije mirándolos.
-Hace tiempo no tenemos contacto con ellos Larissa, no sabemos la estructura actual de ellos. ¿Dónde está Maccio ahora? –pregunto Elijah acercándose.
-No lo sé dijo que iba a buscar sangre –le conteste y dicho eso ambos hermanos desaparecieron delante de mis ojos, algo que se estaba volviendo una costumbre.
Espero les guste un capitulo con bastante drama... Dos capítulos en un día para compensar los que no publique nada
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The True Originals-Klaus Mikaelson Y Tú
FanficSi conozco a los Mikaelson, los conoceré, Rebekah la tierna y leal amiga que eh conocido. Elijah, un hombre muy moralista, educado y es el cuñado que toda chica desearía tener. Antes eran más hermanos a los cuales conocí a todos y tenia aprecio, per...