Capítulo 58:

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Bueno, todo esto estaba yéndome bastante mal, nada como lo habíamos planeado con Anastasia, tuve que hacer un hechizo de ilusión que digamos me dejo un poco con las baterías bajas cuando Rebekah quiso pasar a agradecerme por ayudarla con el hechizo de desvinculación a pesar de todo y yo estaba al lado del cajón vacío, pero ella no lo noto gracias a mi magia por suerte.

Una gran tormenta se estaba largando, no sabía cuánto mi magia iba a aguantar hasta que descubrieran que Klaus no estaba en su ataúd, en estos momentos Marcel, Freya, Rebekah y Elijah se encontraban hablando en la oficina terminando sus últimos puntos del plan.

Mi plan de esconder la escapada de Klaus termino cuando todos aparecieron en el cuarto de Rina mirándome bastante mal, la deje en su cuna de forma muy cuidadosa y me prepare para su ataque.

-¿Dónde está? –trato de peguntar Elijah tranquilamente.

-No lo sé –conteste con la verdad mientras Rebekah se cruzaba de brazos y me miraba mal-. Yo tenía un plan, le saque la daga y él estaba débil, iba a venir a buscar a Rina, pero supongo que escucho el audio de Hayley huyendo con Hope y fue ahí que desapareció.

-Ahora no solo tenemos que enfrentar a Dahlia, sino que también la furia de Klaus –comento Marcel mirándome y luego mirando a los hermanos.

-Te creo –acepto Elijah mirándome seriamente-. ¿Te unirás a nuestro plan?

-Depende –conteste subiendo y bajado mis brazos.

-¿Cómo que depende? Por tu culpa el plan se ve en riesgo –acuso Rebekah mirándome enojada.

-Marcel vos y tus vampiros traten de ubicar a Klaus, pero no luchen contra él o van a morir –le ordene a Marcel el cual dudo seguir mi consejo, pero Elijah asintió y Marcel desapareció.

-¿Eso significa que vas a cooperar? –pregunto mirándome Elijah con la poca paciencia que le quedaba.

-Depende –volví a repetir-, si veo que están perdiendo y peligran sus vidas, si voy a intervenir, pero sino no voy a mover un dedo, porque recuerdo como le clavaron una daga a su hermano.

Llevaba toda la mañana lloviendo, anoche los vampiros de Marcel habían encontrado cuerpos y claramente Anastasia cancelo su vuelo a Nueva Orleans, Rina estaba muy perceptible a todo y lloraba por cualquier cosa, este día no parecía mejorar.

Freya seguía aprontando todo para esta noche tenderle la trampa a Dahlia, habían colgado los cuadros de Klaus en el patio interno, mientras hacia sus hechizos, cuando Dahlia ingresara en la zona de los cuadros seria mortal y podrían asesinarla, o eso creían ellos.

-Si tuviera que adivinar diría que está planeando una larga lista de castigos crueles y extraños para nosotros –comento Rebekah apareciendo en el marco de la puerta del cuarto de Rina y podía ver el miedo en sus ojos, tenía miedo de Klaus, este era un nuevo nivel de traición por parte de ellos.

-¿Eso me importa? –pregunte mientras movía el peluche de Rina buscando que dejara de pucherear.

-Te escucha, todos queremos paz –hablo mirándome y acercándose a Rina para tocar su mano.

-Está furioso porque las personas que más ama literalmente lo apuñalaron y dejaron que Hayley huyera con Hope. ¿Por qué pensas que me escucharía? –le pregunte mirándola.

-Porque te ama –contesto con una sonrisa como si fuese lo más obvio.

-¿Vas a ayudarnos o no cuando él venga? –pregunto desesperada.

-Veré, depende los castigos que les tenga planeados –conteste sonriéndole-. Pero te aviso que no ha contestado a ninguna de mis llamadas desde que se fue. Sabemos cuan amigo de Shakespeare fue, no espero menos y ustedes tampoco deberían.

The True Originals-Klaus Mikaelson Y TúDonde viven las historias. Descúbrelo ahora