The True Originals-Klaus Mikaelson Y Tú

Capítulo 29:

Esta mañana me encontraba tomando un baño de burbujas para desestresarme por todo lo ocurrido los últimos días, meses y mi vida entera. Baño al que Klaus se sumó, se encontraba en algún modo buscando mi perdón por su actitud estos últimos días.

-Cásate conmigo –soltó de la nada mientras me terminaba de secar y colocaba una bata.

-¿De nuevo? –pregunte yo haciendo el nudo y caminando fuera del baño.

-Cásate conmigo –volvió a repetir Klaus mirándome seriamente.

-¿Qué? Esta seria nuestra boda numero cuanto –le pregunte eligiendo ropa para colocarme, claramente no era momento de bodas.

-Podemos celebrarlo aquí, algo sencillo chico y sin invitar a tu familia que claramente no nos quieren –comento siguiéndome, él ya se había vestido.

-Mi familia no es la única que no nos quiere no sé si recuerdas tus padres reviviendo y esperando matarlos –le indique terminando por elegir un vestido largo, extrañaba mucho el usar jeans-. En realidad Klaus, me parece raro que pienses ahora en casarnos, has roto tu propio tiempo record.

-Perdóname amor si tarde tanto –hablo este comiéndome con la mirada mientras me cambiaba.

-Klaus no es si tardaste o no, no siento que sea apropiado en estos momentos celebrar una boda –le comente terminando de colocarme el vestido y Klaus se movió rápidamente a mi espalda para ayudarme a cerrarlo.

-Solo te pido que lo pienses –me dijo antes de dirigirse al patio interno a lo cual yo lo seguí, lo conocía muy bien e iba a terminar planeando una boda secreta.

-¿A cuál restaurante le falta un chef hechizado? –nos preguntó Hayley comendo de la gran mesa llena de cosas para el desayuno que había en el patio.

-Es algo que he hecho en el pasado –admitió Klaus mientras nos acercábamos y por su tono de voz supe que era algo malo-, pero yo no tuve nada que ver con esto.

-Pues creo que le agradeceremos a Elijah –comento Hayley sorprendida, Elijah nos miraba bajando la escalera desconfiado.

-Esa no es mi obra –contesto Elijah llegando cerca nuestro.

-Deja de comer –le pedí a Hayley cuando vi que iba a agarrar otra uva.

-¿Entonces de donde salió esta comida? –pregunto ella dejando la uva sobre la mesa, rápidamente el platillo que había tapado comenzó a moverse.

-Qué alguien lo abra –pedí mirándolos a los hermanos que jugaban guerra de miradas, Klaus tomo la iniciativa y abrió el platillo, dos especies de cuervos salieron volando y dejando una sola nota.

-¿Qué rayos fue eso? –pregunto Hayley bastante perdida.

Klaus a mi lado tomo la nota y pude leer lo que decía, cena en su casa a las ocho pm, genial debíamos preparar una cena para mi suegra la cual nos quiere a todos muertos.

-Una invitación de nuestra madre –le informo Klaus a un serio Elijah, ganándose una mirada de Hayley, a la cual supongo todavía no le habían informado nada.

Estaba el nuevo miembro adquirido por la fuerza de esta familia invadiendo nuestro cuarto para pedir una buena explicación sobre el regreso de los padres, Hayley libremente estaba tirada sobre nuestra cama ganándose una mirada de asco de mi parte, Klaus miraba hacia la calle por el balcón y Elija estaba muy pensativo en la oficina que daba a nuestra habitación mirando el grimorio de su madre, yo simplemente me encontraba sentada en un sillón, la espalda me estaba matando.

-En momentos así agradezco no haber conocido a mi madre –comento Hayley luego de la breve explicación incorporándose y sentándose en la cama.

-Tenemos muchos enemigos aquí –le dije como si no fuera nada nuevo y era verdad, no lo era siempre habían enemigos viniendo por nuestras cabezas, o mejor dicho por la de ellos, yo era intocable.

-Entonces la guerra será contra nuestra propia familia –afirmo Klaus.

-Tu mezquina madre y sus discípulos trataron de atravesar a nuestro bebé Klaus con mucho gusto la matare –afirmo Hayley con mucha autoconfianza en ella misma, pero estábamos hablando de una bruja que pudo recrear una hechizo sobre la verdadera naturaleza de mis padres, o al menos lo intento porque claramente ninguno pudo permanecer como bruja.

-No harás tal cosa –hablo Elijah llegando a nuestro cuarto y ganándose una mala mirada de la chica-, Esther es experta en el arte de la posesión, sabemos cuál cuerpo habita, hay que descifrar sus intenciones antes de que encuentre otro.

-Su última invitación fue un intento de asesinato de todos sus hijos, así que podemos asumir que sus intenciones son infames –le recordó Klaus a su hermano Elijah.

-Entonces tenemos la tarde completa para prepararnos –dije parándome, necesitaríamos un chef y seleccionar los platos, dicho esto Elijah se retiró a buscar una bruja porque me creía débil como para hacer un hechizo de marcar un alma, últimamente me tomaba la libertad de leer sus mentes ya que no estaban tan comunicativos.

-Ya perdió el encanto cierto –le pregunto Klaus a Hayley en relación a su hermano mientras me ofrecía su brazo para retirarnos de la habitación.

-Cierra la boca –le pidió esta exasperada.

-Ve a conseguir un par de chefs Klaus, yo me encargare de organizar –le pedí llegando a la sala de comedor donde sería la reunión-. ¿Deberíamos agregar o eliminar invitados de la boda ante estas apariciones? –pregunte bromeando antes de que se retirara.

-Muy graciosa –comento este retirándose luego de darme un beso.

Hayley apareció detrás de mí. ¿No tenía una manda de gobernar? Se sentó en una de las mesas mientras yo pensaba en los platos.

-Conozco las miradas que me has dado últimamente –comento ganándose mi atención.

-¿Disculpa? –pregunte fingiendo no entender a qué se refería.

-No te voy a quitar a Klaus –soltó ella ganándose toda mi intención y provocando que riera, pero ella seguía seria.

-Hayley, primero que nada Klaus es una persona libre como para pertenecer –le dije primero corriendo la silla para sentarme-, y segundo no existiría posibilidad alguna de que pudieras quitármelo si me perteneciera como un objeto –dicho esto al poco tiempo apareció Klaus con tres personas prontas para servir.

-Aquí los tienes –me los señalo, perfecto debíamos empezar a planear una cena.

Bueno... aunque no lo esperaban arca tengo un capitulo sorpresa para un Lunes de cuarentena...