The True Originals-Klaus Mikaelson Y Tú

Capítulo 118:

Abrí mis ojos, sabiendo que hoy iba a ser un día muy ocupado, Klaus estaba en los pies de la cama, terminándose de levantarse.

-Buenos días –me saludo con un beso y una gran sonrisa.

-Buenos días –conteste sentándome en la cama mirándolo.

-Voy a buscar para que se prepare un gran desayuno –dijo parándose-, la ducha esta pronta para vos y Rebekah me pidió que te informara que fue a resolver unas cosas y vuelve a la ciudad.

-Muy buen informe –agradecí parándome mientras me robaba otro beso antes de desaparecer, usé mi oído para saber que el resto seguía durmiendo.

Me di una ducha de agua caliente y me vestí rápidamente, cuando salí del cuarto podía escuchar cuchichear a Rina y Hope, pero me dirigí hacia el comedor donde ya estaba Klaus esperándonos.

-Parece que terminan de tramar algo y bajan a desayunar –comente robándole un beso para sentarme a su derecha.

Freya apareció en silencio y se sentó a mi lado, la primera de las infractoras en aparecer fue Hope con una gran sonrisa sentándose enfrente mío, Rina apareció unos segundos después para sentarse al lado de su hermana.

-Bueno, la maldición que ha afectado a nuestra familia durante doce años nos ha pasado factura –empezó su discurso Klaus mientras yo tenía mi mirada sobre Rina quien se servía una copa de jugo de naranja con mucha tranquilidad-. A nuestra ciudad, a nuestro hogar, a nuestra familia, las consecuencias de que estuviéramos juntos eran graves –añadió apoyando sus codos sobre la mesa-, pero hoy, gracias a ustedes dos, celebramos un nuevo comienzo. Uno donde tenemos libertad para estar juntos y no importa las dificultades que puedan venir, las enfrentaremos juntos, como una familia –Klaus agarro su copa de jugo de naranja, todos imitamos su acción-. Por siempre y para siempre –dicho eso todos brindamos.

-¿Me pasas las tostadas? –pidió Rina con una fingida inocencia en mi dirección.

-Por supuesto –fingí una gran sonrisa-. Entonces, Rebekah volverá en unos días, está intentando atar algunos cabos sueltos –comente la información que había compartido conmigo Klaus.

-Estará bien tenerla acá –hablo Hope con tranquilidad, Rina la quedo mirando mientras masticaba su tostada.

-Sera bueno volver a estar todos bajo el mismo techo –añadió Freya mientras Rina la quedaba mirando.

-¿Vamos a volver a casa verdad? –preguntó Rina mirándonos con seriedad-. ¿Vamos a volver al instituto? –añadió y podía sentir el tono de desesperación en su voz, claramente no estaba tomando la posición, así que esta reacción debía de ser por su vínculo.

Iba a contestar algo, pero con Klaus compartimos una mirada mientras se borraba su sonrisa, Elijah estaba ingresando al recinto y en segundos estuvo dentro de la misma habitación que nosotros.

-Buenos días –nos saludó con delicadeza Elijah-. Obviamente, hay mucho de lo que hablar –añadió ante nuestro silencio. Hope, déjame empezar diciéndote lo mucho que lo siento...

-Gracias por el desayuno, pero tengo que ponerme al día con los deberes –lo corto Hope parándose después de haber doblado un tenedor con su magia y se retiró.

-Eso no es normal –señalo Klaus el tenedor con preocupación mientras yo negaba, Rina le sirvió una copa de jugo a Elijah y se la entrego-. Ella no es normal.

-Ha perdido a su madre, Niklaus –intento apaciguarlo Elijah con la copa en su mano dejando un beso sobre la cabeza de Rina-, no debería haber bajado.

-Al menos podés alegar amnesia, a diferencia de nuestra hermana, que voluntariamente ayudo a las niñas a arruinar sus vidas –comento con enojo Klaus.