Cuando llegue tu amor (LCA #1)

CAPÍTULO 42

Derek

Julie y Shelley vienen a pasar el fin de semana de Halloween con nosotros ya que se nos hizo imposible viajar porque tenemos que entregar unos trabajos importantes el lunes pero de todas formas siempre podíamos hacernos un tiempo para recibir a las chicas y ellas también podían entretenerse juntas mientras nosotros trabajamos. Hace diez días fue mi cumpleaños y viajé a casa así que no ha pasado demasiado tiempo desde la última vez que nos vimos, ahí decidimos que fuera como fuera pasaríamos Halloween juntos y que nos disfrazaríamos en pareja.

Como no estoy demasiado acostumbrado a estas cosas decidí que ella eligiera y se decidió por Jack y Sally de El extraño mundo de Jack, por lo que no fue demasiado para mí conseguirme un traje con rayas y pedirle a mi hermana que me pintara la cara como el esqueleto. Julie por su parte, se hizo un vestido idéntico al de Sally y también recibió ayuda de Shelley con el maquillaje ya que mi hermana realmente sabe hacer maravillas con un par de brochas.

Cuando mi hermana sale de mi habitación, dejándonos ya casi listos para ir a prepararse ella, con Julie no es mucho lo que hablamos. Discutimos hace un rato, poco después de que llegaran y las cosas siguen estando un poco tensas entre los dos, el que dijo que la distancia es un problema para las parejas, tenía toda la razón del mundo y por más que hemos intentado que no se note, lo hace aunque solo han pasado dos meses desde que me fui.

Además, no podemos hablar todos los días como me gustaría porque por lo general me encuentro demasiado ocupado y no tengo tiempo, en la universidad tenemos muchos trabajos que entregar y exámenes que dar y a veces lo único que quiero es dormir el poco tiempo que tengo libre. Lo único que me tranquiliza un poco es que Ayden está igual que yo, así que no estoy solo en todo esto y de alguna forma hace que me sienta menos culpable.

—¿Segura que quieres que vayamos? —pregunto más que nada para romper el hielo y porque se me han pasado todas las ganas de salir.

Ella me mira con una ceja enarcada como si no pudiera creer que soy capaz de preguntar algo tan estúpido; odio esa mirada, esa no es mi Julie. Se apunta a sí misma sin despegar la vista de mí.

—¿Crees que me hubiese esforzado tanto en arreglarme si no quisiera ir?

—No, pero está claro que no quieres estar aquí.

—¿Tú crees? ¿Y qué te ha hecho asumir eso?

—Mira, sé que te prometí que iría a casa y que lo habíamos planeado todo, sé que te esforzaste por organizar un evento en el club para Halloween y obviamente preferías estar ahí mil veces antes que ir a una maldita fiesta en una casa de fraternidad, yo también lo quería pero no pude y lo siento mucho.

Sé que he dado en el clavo, porque incluso tras el maquillaje azul, se nota un poco sonrojada. Está furiosa pero esta vez yo también estoy comenzándome a enfadar.

—Estoy cansado, Julie, no tienes idea de todo lo que he tenido que hacer estos días ni lo poco que he dormido, ni siquiera debería salir hoy porque tengo cosas importantes para la otra semana pero lo estoy haciendo por ti, porque prometí que estaría contigo hoy, porque te encanta esta maldita noche y los disfraces, y toda la vida te he dado en el gusto.

—Tal vez deberías quedarte aquí, entonces. No es necesario que me des en el gusto todo el tiempo, ¿sabes? Es más, te agradecería que no lo hicieras más porque si tanto te molesta...

Unos golpecitos en la puerta interrumpen lo que prometía ser una discusión bastante fea y mi hermana se asoma por la puerta, supongo que ha escuchado todo.

—Con Ayden estamos listos, pero si prefieren podemos adelantarnos y nos vemos después ahí.

—¿Por qué? —pregunta Julie fingiendo una sonrisa que nadie le cree—. No hay para qué ir separados, nosotros también estamos listos, ¿verdad, Der?