Cap. 11

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Al dia siguiente

Tomás

Anel había cumplido su palabra.

En el desayuno me traía una prenda con su olor y en la cena otra.
Me hacía gracia. Ya que había tanto olor impregnado en la camisa de él que apostaría mi cuello y no lo pierdo a que disfrutó oliendo mi aroma antes de dejar él el suyo.

Llevaba días masturbándome con su olor, su imagen en mi cabeza, su voz...
Era tan excitante...

Quería reventar la puerta y follarlo allí mismo en el sofá, llenarlo con mi esencia 1, 2 y 3 veces... ¡ O más ! Quería morder cada parte de su cuerpo, saborear cada milímetro de esa blanca piel... Morder esos rosados labios hasta hacerlos sangrar...
Ver esa dulce carita sonrojada, excitada por el momento, llorosa del placer y llena de expresiones candentes. Dominar a ese rebelde Omega que decía no querer a un Alpha pero que por dentro moría por tener a uno... Y yo quería ser ese uno.

Ser el Alpha que despertara con el por las mañanas, que le hiciera el desayuno y que lo mimara con besos todo el dia. Con caricias... Caricias que cogieran tono y calor y acabarán siendo dulces muestras de amor mientras nos fundimos juntos en una noche apasionada llena de amor y lujuria...

Esos pensamientos llenan mi cabeza hasta el punto de nublarla.
Ser el primer Alpha que inspeccione su virginidad, ser el primer y único Alpha que pudiera tener ese cuerpo, esa alma, ese Omega para el mismo y para nadie más.BNo querer compartirlo y partirle la cara a cualquiera que lo hiciera daño o lo tocará sin su permiso o el mío.
Ser el príncipe de los cuentos de princesas que aunque la damisela sea fuerte y se las apañe, siempre aparezca para ayudarla...

Anel sería mi princesa, mis días, mis noches... Lo conozco desde hace poco pero... Es mi instinto el quererlo junto a mí, un instinto fuerte que me arrastra hacia su lado... Mi Alpha lo quería para él en cuanto lo vio en la presentación del primer día de clases.
Su olor me había cegado hasta el punto de amarlo.
Es difícil de explicar pero... Se que hay que darle tiempo, se que sus exs lo dejaron hecho polvo y yo quiero llenar ese hueco de su corazón que sigue frío de dolor y lo ciega con recuerdos malos que lo hacen retroceder cuando alguien lo ama.
Pero... lo conseguiré teniendo paciencia. En asuntos del amor es tiempo lo que uno necesita.

Tiempo y no prisas.

Ryan

Las cosas con Anel van bien pero... Van demasiado lentas. Quiero hacerlo mío y quitármelo de la cabeza de una vez. Ya todos en el cuerpo saben de mi pequeña obsesión con él. Solo quiero hacer lo que siempre hago.
Engatusarlo, follarlo, dejarle con una disculpa filosófica y buscarme otro Omega.

Para estos tiempos en los que han pasado días ya lo hubiera liquidado pero... Anel es diferente, por dentro muere porque alguien lo domine pero siempre anda con la excusa de no querer un Alpha. Y encima el idiota del Tomás detrás suyo.

Esta mañana, siendo sábado, me he asomado a la ventana a fumar y he visto a Anel entrar y salir de la habitación con gran rapidez, incluso no he podido ni ver su cara, segundos después Tomás se acercaba a la puerta y recogía comida del suelo y ropa.

Me vestí rápidamente y por casualidad me encontré con la general. Estaba en el portal.
Salía en dirección los apartamentos de enfrente. Dirección a la que me dirigía yo también. No quería que me viera ya que me tiene entre ojo y ojo, pero estos días lleva siendo mas maja.
Su Omega la visita en nuestras sesiones de entrenamiento de por las tardes en el parque y eso la pone muy feliz. Tanto que de 20 vueltas que damos, nos quita 13 para irse más rápido con su querida Omega.;Por lo que Carlota se ha vuelto nuestra salvación en los días de entrenamiento en el parque.

Un Omega PeculiarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora