María
Me encontraba en mi cómodo apartamento con la nerviosa e incomodada compañía de Ryan y la neutral y tranquila compañía de Alan, la cual era intimidante para Ryan.
- ¿ No vas a decir nada ? -
Mi voz sonaba dura, quebrada y dolida, pero en todo momento molesta.
Ryan brincó en el sitio cuando el tema de conversación fue sacado para atacar al otro. Y aunque intentará mantener mi compostura esto iba a ser duro.- No tengo nada que decir -
Su postura era tranquila y formible, p mejor dicho, insoportable.
Me recuerda cuando nos conocimos, pero lo que más me molesta es que no admita que tiene la culpa de esta situación.- ¿ Un "lo siento" tal vez ? -
El ya molesto tono en mi voz rebotó en las paredes del salon y me obligó a relajarme para no montar un numerito de feromonas.
- Sabes porque me fui. No tengo que explicarte nada -
- Estas en perfecto estado.
Una llamada, un mensaje... ¿!Sabes lo mal que lo ha pasado ? -Ahora ya no hablaba de mí, sino de Abel, mi pobre hijo el cual tuvo que soportar a ese Alpha imbécil como padrastro.
- ¿ Y tu ? -
- ¡;Aquí lo que importa es el ! -
- ¡ Pero por lo que veo tu estas peor ! -
- ¡ Ya no ! -
- ¡ Llevas sus cachorros ! ¡¿ Crees que no los siento ?! -
Eso me rompió por dentro.
Ryan se levanto, se fue a la cocina y cuando volvió traía una taza de té dulce.- Gracias Ryan -
El salon se volvió a hundir en un silencio abismal. Me sentía mal, después de todos estos años y así me encontraba ahora, delante del hombre al que amé y que pudo estar todo este tiempo con nosotros y aún así se escondió.
- Lo siento... - dijo él despacio y con la voz muy baja.
Levante la mirada y lo vi arrepentido.
Su olor era tranquilo.
Se levantó y se acercó a mí.
Se arrodilló y apartó la taza de mis manos.
Me resistí un poco pero como siempre él tenía mas fuerza.- Perdoname.
Dejame estar ahora contigo para siempre y aunque no de sangre... Ser un verdadero padre desde el principio y hasta el final -Esas ultimas palabras las dijo con sus manos en mi vientre. Su contacto me estremeció hasta los huesos y esto hizo sonrojarme. Su cara se acercó a la mía pero lo rechacé.
- Desde 0.
Nuestra relación va a empezar desde una amistad, no creas que después de todo lo que he pasado te perdonaré tan rápido -Mi cuerpo estaba tenso pero me logré mantener firme ante su presencia tan cercana y tentadora.
- ¿ Entonces eso significa que sigo durmiendo en los apartamentos de la academia ? - preguntó riendo.
Asentí con la cabeza.
Mire de reojo a Ryan y lo vi mas tranquilo, y es que ya no había ese ambiente tenso.- ¿ Has tenido que soportar mucho el secreto ? - pregunte curiosa.
El asintió.
Solté una pequeña carcajada y los acompañé a la puerta. Pero antes de cerrar, la mano de Alan en mi cintura y el roce de sus labios en mi mejilla me hizo sonrojar.- Hasta mañana... - dijo con su añorada voz ronca en mi oído.
Esa voz ronca y seductora con la que me habló en nuestro primer encuentro, esa misma voz que me hacía derretir sin necesidad de nada.
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Un Omega Peculiar
AksiSoy un Omega peculiar respecto a los Alfas y al amor. No me gusta ser la princesa de los cuentos que siempre acaba con un príncipe. Prefiero ser más, la princesa rebelde que se escapa del castillo sin ayuda. Irme a estudiar en la universidad me ha h...