Cap. 55

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Narradora

Con Anel

Anel estaba nervioso, Leo lo había dejado delante de la puerta de la academia de conducir y las manos le sudaban, entró por la enorme puerta y se dirigió a su aula para allí encontrarse con su profesor, un Alpha de unos 35 años. La clase estaba vacía por completo, y era porque Anel se acostumbraba a llegar más pronto de lo acordado, así se cercioraba de no llegar nunca tarde, y si surgía algún imprevisto le diera tiempo a solucionarlo.
Se planteó ir a dar una vuelta para relajarse pero el Alpha notó su olor antes de él poder irse y lo llamó.

- Anel... Por favor, tome asiento, sus compañeros todavía no llegan pero no se sienta incómodo -

Anel asintió y con las piernas como gelatinas se fue a sentar al fondo. Ese profesor suyo no le daba muy buena espina, le tenía manía.

- Anel. Aquí delante si no le importa -

Desde el primer día de clases el profesor había tenido gran atención en él, cualquier duda o necesidad, allí estaba su magnífico profesor, pero de una forma peculiar.

- Ningún problema profesor -

Se sentó justo delante de él y empezó a jugar con sus dedos mientras miraba el escritorio garabateado y rayado por antiguos alumnos que dejaron huella en ese trozo de madera con forma cuadriculada.

- ¿ Nervioso ? -

Anel sabía lo que el profesor quería, hacerlo inquietarse para que fallara el examen, llevaba casi toda la mañana dando los últimos repasos y durante dos semanas llevaba estudiandose a fondo la teoría.

- En absoluto -

- Ya veo... ¿ Es verdad que espera un cachorro ? -

- Si -

- Enhorabuena -

La clase se quedó en silencio y Anel podía sentir la mirada del profesor sobre él.

- ¿ Entonces está marcado ? -

- Si -

- Tsk - chisco la lengua para susurrar algo.

Anel se tomó eso como una ofensa.

- ¿ Podría repetir lo que acaba de decir ? - dijo serio

- ¿ Disculpe ? -

- Me parece una falta de respeto que me insulte en susurros, puedo escucharle, y si tan valiente es como para susurrar lo sealo también para decírmelo a la cara -

Ambos se mantuvieron la mirada sin darse cuenta que tenían varias miradas sobre ellos expectantes que no querían pasar del marco de la puerta para no interrumpir.

- Muy bien... Como puede ser que un Omega tan brusco como usted tenga pareja y un hijo en camino -

Anel puso una sonrisa tétrica sin dejar de mirarlo, poniéndose en pie y apoyando sus manos sobre el pupitre.

- Se lo diré alto y claro profesor y me da igual  que vaya a ser usted quién me ponga la nota... El como sea yo no le trae sin cuidado, si tengo pareja será porque la habré cautivado con mi personalidad, soy un Omega transparente, si no me caes bien te lo digo a la cara y en efecto, lo cumplo, por ejemplo ahora, usted, un Alpha de casi 40 años, solo, sin pareja, ni esposas, ni hijos. ¿ Por qué crees que será ? No creo que sea por ser profesor de conducir o por el mal gusto de ropa que lleva - tanto el profesor como sus compañeros estaban flipando - y que sepas, que tanto mi pareja como yo estamos satisfechos de nuestra relación, tenemos una hija de año y medio y un cachorro en camino. Así que, respondiendo a su pregunta... Soy un Omega único, no me reprimo las palabras y me gustan las emociones fuertes, no estar tomando el té con muñecas de cristal. Estoy estudiando para ser policía y si he llegado a ser todo esto es por la gente a mí alrededor que me quiere. ¿ Entendido ? -

Un Omega PeculiarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora