Nuevos comienzos- II Parte (Supercorp)

Capítulo VIII

Alex cruzó a grandes zancadas la sala principal de la DEO, donde varios de sus subordinados se movilizaban de un lugar a otro acatando las órdenes de J'onn, que habían sido dictadas no más de cinco minutos antes de que arribase.

Viendo que la cosa iba más en serio de lo que había supuesto, tomó su celular y avisó a Maggie que quizás se tardase un poco luego de saludar a Winn Schott y al director.

- ¿De qué se trata?- Preguntó a sus colegas.

- Una nave no autorizada traspasó la atmósfera hace menos de un cuarto de hora- dijo J'onn cruzado de brazos y contemplando la pantalla central, que enseñaba una ilustración de la morfología de la nave-. Se asemeja a una de las que utilizan los guardianes, pero contactamos al señor Jordan y nos dijo que no existe ninguna misión programada, y tampoco le han avisado nada.

- ¿Mandaron a Supergirl o a Númex a investigar?

- Les dimos aviso, pero no hemos recibido su contestación. Tengo a algunos agentes intentando hallarlas.

Alex asintió. Lo más probable era que Lena y Kara estuviesen nuevamente en medio de una de sus constantes riñas. En esos últimos días, las niñas no habían dejado de trenzarse como perro y gato. Quitarle a Lena el colorante alienígena que impregnó su piel había sido realmente un desafío, y los efectos no se marcharon del todo aún luego de recuperar su tonalidad habitual. La sustancia dejó atrás una comezón que enloquecía a la pequeña, y que la ponía de peor humor que de costumbre. Eso había deparado en más y más conflictos con su esposa, que aparentemente, además de la madurez, había perdido todo el criterio y no dejaba de atizarla.

El intercomunicador de J'onn soltó un pitido, y este se llevó una mano al oído para dejar entrar la llamada.

- Agente Flint. Sí... Entendido, buen trabajo.

Cortó y miró a Alex.

- Volvieron a quedarse dormidas en el comedor. Será mejor que las busques.

- Wow, wow, aguarden- Winn se enderezó en su silla y comenzó a trabajar con su tableta-. Está ocurriendo algo en un punto alejado de la ciudad, miren... Estos videos provienen de los móviles de algunas personas. Son en vivo.

Trasladó las grabaciones a la pantalla y vieron una explosión seguida de una conmoción general. Todo era muy borroso, pero una vez que el humo y el fuego se disiparon, se alcanzó a apreciar con mayor detalle el ambiente. En determinado momento, vieron que alguien caía y rodaba muy cerca de quien firmaba. Anonadada, Alex reconoció a su sobrina, Lyla, que se puso de pie y sacudió el polvo de su ropa antes de recibir el golpe de un alienígena de una especie que ya había visto con anterioridad.

- Son los de la otra vez- exclamó, alarmada-. Hay que buscar a Kara y a Lena de inmediato. Lyla está sola contra ellos.

- ¿No será peligroso volver a exponerlas a esas cosas?- señaló Winn-. La última vez...

- No querrán quedarse de brazos cruzados cuando su hija está en riesgo- dijo Alex, dirigiéndose a las corridas hacia el comedor.

Kara y Lena dormían plácidamente encima de una de las mesas, la segunda encima de la primera. Había rastros de comida desperdigados por el suelo, el techo y las paredes, y hasta encima de la ropa y la piel de las pequeñas, lo cual hablaba de un muy probable enfrentamiento. Alex no podía evitar hallar divertida la dinámica de sus disputas, dado lo rutinaria que solía ser. Todo empezaba con los gritos que antecedían un primer golpe, que era a su vez precedido por una batalla mortífera. Luego una de las dos o las dos en conjunto lloraban, se reconciliaban y caían desmayadas en el sitio en el que estuviesen, como si la extenuación fuese demasiada como para pensar en hacer otra cosa que no fuese echarse una siestecita.