Ambos se encontraban en ambas puntas de la mesa comiendo. Hermione se estaba inquieta... quería decirle algo, pero sabía que él no contestaría o tal vez simplemente se levantaría y se iría, y no se aseguraba si a su habitación. Por lo que se armó de valor y dejó su tenedor en el plato y juntó sus manos. Snape estaba comiendo.
-Señor... ¿Pu... puedo hablar con usted un segundo?- "Diablos, no tenía que parecer insegura" Severus la miró y se recostó en el respaldo de la silla, cruzándose de brazos.
-Presiento que aún así lo hará, Granger.
-Sé que jamás creyó encontrarse aquí, y sé que quiere irse... Pero por favor...
-Si volverá a decirme lo mismo, déjeme decirle Granger que no hará...
-Lo sé, pero aún así me gustaría que me escuchara.- Lo último se escuchó con algo de reproche... Snape extendió la mano levemente para que prosiguiera.- Como dije antes, desearía que no se vaya... Y no lo uso como escusa para... No. Es solo que me gustaría hacer algo bien por alguien en este lugar antes de... venderlo o hacer lo que vaya a hacer con esta casa. Aparte de eso, usted necesita reposo. Por favor, no me lo niegue, no se me ponga en necio con eso.- Severus en ese momento frunció el ceño.- No, no es un niño para que le reproche, pero sí presiento que tiene la terquedad de uno, por lo que implica que por más que me diga lo que diga, no perderé las esperanzas de que usted sí se quede. ¿Tiene algún otro lugar para ir aún no fuera así?
-Eso lo vería yo mismo, no necesito de...
-Una insufrible sabelotodo, se...- Snape alzó una ceja. – No es ese el tema señor, debe hacer reposo... Y por lo que entiendo entonces a su respuesta, No, no tiene un lugar para ir. Eso también se puede arreglar, pero luego de su reposo... por favor.
-¿Y por qué debería hacerle caso, Granger?
-Porque si no acepta tomar el reposo, ahora misma enviaré un patronus a su Medimago para que vuelva a San Mungo.
-¿Me está amenazando?
-Estoy buscando la manera de que acepte. Prometo no molestarlo y ayudarlo... Yo también estoy buscando alguna casa para comprar... por favor. Acepte...
Snape la miró, traía los ojos abiertos y suplicantes... Una voz en su cabeza decía que se largara ahora, la chimenea estaba allí. Pero aún así, no se movía, no decía nada... Suspiró resignado y enojado consigo mismo. No le respondió a Hermione. Pero al menos, no fue un no. Solo siguieron comiendo.
Una vez terminada la cena. Hermione hizo desaparecer todo con un movimiento de varita y se levantó. Snape hizo lo mismo. Sentía que saldría por la chimenea. Pero se dirigió de brazos cruzados hacia las escaleras, entonces Hermione lo llamó.
-¡Señor!- Este se volteó en medio camino.- ¿Sig... significa que sí?
-Significa tal vez, Granger. Pero tengo condiciones.- Ella asintió, no dijo nada.- No se pondrá pesada todo el tiempo.- Hermione asintió... Este se volteó hacia las escaleras y siguió su camino.
-¡Buenas noches!- Pero solo escuchó un portazo de su parte... Estaba contenta... ¿lo había convencido? Estaba contenta. ¿Pero por qué?
Se sentía un idiota. ¿Por qué seguía ahí? Esa niña era manipuladora. Pero por algún motivo se sentía "en deuda" era la única que había ido a verlo, y ahora había hecho esto para irse de ese lugar. Se sentó en la cama enojado consigo mismo. Cuando vio en la punta un conjunto de pijama que antes no estaba. Negó con la cabeza. No estaba cansado físicamente, pero su cabeza no dejaba de dar vueltas. Por lo que a regañadientes se puso la ropa y se acostó.
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Sobrevivir
RomanceLuego de la guerra mágica, Severus Snape se despierta de un coma de tres semanas deseando haber muerto. Pero las visitas casi diarias de Hermione hará que ambos entablen una nueva relación desconocida para ambos. La castaña acepta por medidas de San...