|Capítulo 40|

1.7K 140 16
                                    

Martes 03/septiembre/2019

7.30p.m.

Madeleine está a nada de irse, por lo que me aferro a su pequeño, pero fuerte cuerpo con miedo de que no la vuelva a ver mientras ella me asegura repetidas veces que no me va a fallar.

—Promételo—suplico.

—Te lo prometo—susurra, peinando mi cabellera—no dejare que pases un día más en este lugar.

Asiento y solo cuando nos separamos ante la voz de Ryan.

—No olvides comprar nada de la lista—le dice.

—Lo has repetido mil veces, ya lo sé—rueda los ojos, fingiendo diversión.

Le sonríe con cariño para despues entregarme un plato con sopa que dudo mucho en aceptar, pero que ante su mirada termino por hacerlo. Madeleine me mira preocupada porque sabe lo de la comida, pero le hago saber que está bien con una sonrisa, despues de todo, dormir es una mejor opción que estar despierta con él a solas.

Y justo ello me recuerda que había algo más que tenia que decirle a Mad, algo de lo que necesito respuestas.

—¿Puedes servirme un vaso de agua? —le pido a Ryan quien obedece de inmediato.

—Te lo traigo de inmediato—dice al desaparecer.

—Ayer...—susurro acercándome a ella, dejando el plato de lado—olvide decirte sobre algo, ¿sus personalidades tienen diferentes nombres o algo así? —cuestiono.

—¿Cómo sabes eso? —parece asustada.

—Es solo que una vez me dijo que lo llamara...—intento recordar.

—¿Cómo? —está asustada y ello me asusta a mí también.

—Zev—suelto al recordarlo haciendo que el rostro de la chica se llene de una palidez sorprendente.

—Mierda, mierda, mierda—repite una y otra vez antes de tomarme de la mano y arrastrarme—¡Ryan le quiero enseñar algo más a Michell! —grita ocultando su miedo.

Escuchamos una maldición antes de desaparecer en una habitación en donde me abraza con fuerza.

—No te quiero dejar, no quiero, no puedo—se aferra—escúchame bien—se separa y me ve directamente a los ojos—mantente lo más alejada posible de él, si puedes en cuanto tengas oportunidad enciérrate en esta habitación, necesito que aguantes por unas horas.

—¿Por qué? ¿Qué es lo que esta pasando? —frunzo el ceño.

—Zev es el nombre que sus padres biológicos le dieron—recuerdo algo de ello, pero ahora mi mente está bastante borrosa ahora—Zev es una personalidad con la que jamás he tratado, sin embargo, sé que es mala, peligrosa y alguien de quien te tienes que mantener alejada.

—Pero-

—Por favor—suplica—por favor mantente alejada de él si notas algo extraño.

—Está bien—termino por aceptar.

—¡Madeleine, se hará más tarde! —grita el chico desde la planta baja.

La chica parece mucho más nerviosa y asustada que antes por lo que duda bastante, pero sabe que no hay marcha atrás, tiene que irse.


✨ ✨ ✨


Martes 03/septiembre/2019

9:00p.m.

La cabeza me da vueltas y tengo una increíble necesidad de beber agua, sin embargo, no logro mover mi cuerpo en lo absoluto, estoy demasiado cansada.

Obsesión fatal. ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora