—
El miércoles llegó más rápido de lo esperado y era su primera clase de educación física, se probó por primera vez el pantalón deportivo. No le pintaba mal. Era azul marino, como un clásico deportivo, amarrándose una coleta de cabello, se dirigió con los dientes apretados al aula de educación física, donde al entrar todos estaban parloteando.
—¡Acérquense jóvenes! —Ordenó un individuo con uniforme deportivo y un silbato colgado del cuello.
Obedecieron y estos se aproximaron a donde esté se encontraba.
—Mariana Hudson Hipólito pase al frente. —Volvió a ordenar con firmeza.
La chica temerosa prosiguió a ponerse a lado del profesor.
—Soy Maximiliano, quiero explicarle como ejercemos esta clase. —Empezó diciendo en un tono militar. —La regla fundamental es la disciplina, no tolero la impuntualidad, la falta de energía, ni las excusas por agotamiento físico, ¿quedó claro?
Mariana asintió.
—La clase se divide en tres apartados, el equipo de futbol, de basquetbol y el taller de porrismo, necesito que elija a cuál quiere pertenecer. —Aclamó esbozando una sonrisa.
La realidad era que Mariana nunca había sido buena en los deportes, era categóricamente mala con los balones, siempre terminaban dándole un buen golpe, por otra parte, tampoco cumplía con el perfil de una animadora, sólo prefería observar el partido con unas palomitas y un refresco, pero por lo visto esa opción no estaba disponible.
¿Jugar fútbol y arriesgarme a que me lesionen? Yo paso.
¿Elegir basquetbol y correr el riesgo de que me empujen? No, gracias.
¿Ser animadora y vestir con una falda? Creo que tampoco es lo mío.
Mientras analizaba cada punto, los demás solo la veían respirando con una mirada meditabunda.
—No tenemos todo el día Hudson. —Presionó el entrenador.
—¿Porrista? —Respondió con duda.
—Erick es el capitán del equipo de futbol, Mauricio es el representante del equipo de basquetbol y la señorita Natalia es la capitana del equipo de porrismo. —Explicó mientras la bella chica pasaba al frente sonriéndole con una malicia perceptible
Tiene que ser una broma...
—Ella se encargará de mencionarle todos los detalles del respectivo grupo, además de prepararla y orientarla, cualquier duda que tenga sobre la clase, puede pregúntame, o a cualquier capitán ¿quedó claro?
Asintió.
—Durante todas las clases de educación física, usted ejercerá únicamente el porrismo, solo se hacen cambios en situaciones exclusivas o en caso de que el capitán reporte algún inconveniente, sin más preámbulo comencemos.
Todos, incluyendo a sus amigos se acomodaron en una posición especifica en la cancha, como si esté hubiera dado la orden.
Por otro lado, Natalia y su sequito de frívolas se pusieron a un costado de la cancha para prepararse, Mariana las siguió con torpeza.
—Bienvenida. —Clamó Natalia en un tono prepotente. —El grupo de porristas tiene la finalidad de motivar a los equipos, así que espero que tengas la energía y la agilidad que requerimos, también, utilizamos un vestuario específico, por lo que voy a pedirte que te cambies. —Añadió extendiéndole un conjunto conformado por una corta falda blanca con un top azul marino. —Cuando regreses voy a establecerte tu lugar y comenzaremos a montar la coreografía, espero nuevamente que hayas entendido nuestro propósito y por supuesto también que soy tu capitana y tendrás que hacer todo lo que te pida ¿entendiste? —Terminó insinuando una amenaza.
ESTÁS LEYENDO
Ander.
Mystery / Thriller¿Dinero, belleza, ambiciones? En esta academia lo que importa es el trabajo de tus padres y que tan preparado estás para enfrentarte a todos los peligros que corres.