Capítulo 36

27 5 0
                                    

Amaneció con una frescura húmeda que abrillantó las paredes y muros de escuela, debajo de su puerta se deslizó una carta bien envuelta en un sobre blanco con el sello del emblema de la institución en la parte inferior, al abrir el comunicado, Kenneth encontró positivo un proceso legal, para una baja definitiva del servicio educativo de la institución.

El desacreditado estudiantil de Mauricio había procedido con rapidez y eficacia, dentro del contenido, halló el extenso proceso exitoso, seguido de la firma de los ejecutivos académicos y de Mauricio, arrugó el papel hasta envolverlo dentro de su puño y salió de prisa de su habitación, bajó las escaleras sintiendo una enorme adrenalina que crecía al paso que descendía, se plantó en el pasillo para estudiar los rostros de los alumnos y habiendo encontrado a Mauricio, anduvo sin detenerse hasta tomarlo del saco y aventarlo con una fuerza desmedida causando que se cayera, los alumnos que se hallaban alrededor formaron un círculo para admirar la disputa, Kenneth se tiró al suelo y se montó encima de él, con una mano sujetó el cuello de su camisa y con la otra le plantó tres puñetazos seguidos en el rostro, hasta que Mauricio detuvo su puño, escupió un filamento de sangre y le regresó a Kenneth un puñetazo tan feroz que le hizo desmontársele, Natalia trató de intervenir abriéndose paso entre los estudiantes y gritando, Ana apareció por el pasillo seguida de David y otro miembro de seguridad y los separaron con violencia, Ana se acercó a Mauricio para interrogarlo en un tono autoritario, pero mientras él se limpiaba los residuos de sangre de la boca, admiró cómo Natalia lo observaba con un ademán horrorizado detrás de la multitud y Erick la sujetó de la barbilla para darle un beso lento y profundo, Natalia finalizó el beso y le correspondió la mirada a Mauricio, este se giró en dirección a Kenneth y le dio otro puñetazo en la mejilla.

El despacho de Ana estaba más frío de lo usual, en el aire se percibía el vapor que salía de las bocas al hablar, ambos se hallaban sentados, con un militar detrás y Ana enfrente.

—La indisciplina es inaceptable en esta institución, han mostrado actitudes imprudentes e inadmisibles, actitudes que no se les toleraran nuevamente, caballero Kenneth, no quisiera recordarle el motivo de su traslado, ni tener que mencionarle los requisitos para tramitar uno nuevo, caballero Mauricio, ha cometido un grave delito, realizó un desacreditado estudiantil sin mi autorización, lo cual le traerá severas represalias en su historial académico, van a quedarse aquí hasta que puedan reflexionar la causa de sus inadecuadas conductas, quedaran bajo la tutela del teniente David, quien permanecerá afuera de mi despacho y quien no les permitirá la salida hasta no escuchar un discurso congruente de sus arrebatadas actitudes. —Proclamó Ana abandonado el sitio y dejándolos envueltos en un silencio.

—¿Desacreditarme? —Mofó Kenneth. —Eres muy poco inteligente.

—¿A caso sabes con quién hablas? —Respondió Mauricio.

—Definitivamente eres tú el que no sabe con quién está hablando.

—¿Crees qué tengo el pendiente de descubrir quién eres? —Contestó Mauricio riendo.

—Haces bien en no investigarme, no te gustaría ver lo que hay sobre mí en los archivos del gobierno, pero si deseas conocerme, puedes preguntarle a Natalia.

—Ten cuidado Kenneth, puede que tengas que retractarte y no precisamente disculpándote.

—¿Me estás amenazando?

—Es una recomendación, si quieres evitar más problemas.

Ambos se retaron con la mirada, sintiendo sobre sus cabezas una estela de hostilidad, Mauricio finalmente tenía un adversario de su talla, sin que ninguno de los dos conociera la crueldad que emanaba de sus seres, se enemistaron y aquello estaría por abrir un desafío que demostraría quien, en su pleno debut, recibiría el título del verdadero y más temido criminal.

Ander.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora