(FRANCESCA BOWEN)El lugar de descanso resultó ser el mismo donde comenzó todo.
Aunque la cabaña no es la misma, el patio trasero da al lago igual como hace cuatro años.
Me siento como si volviera al pasado.
Pero con aspectos ligeramente cambiados.
Ya no está Sebastián.
En lugar de Sara, está Rose.
En lugar de sus amigos, están Josh, Abi, Ryan y las dos nuevas amigas de Rose: Mad y Neila.
Y en lugar de intentar acercarme a Thomas y que él se acerqué a mí, nos estamos evitando.
Josh se estira sobre el sofá en la enorme sala de estar. Suelta un bostezo, sus ojos rojos e hinchados del sueño.
—¡Me duele la cabeza! —grita Josh.
—¡Eso es por los tres litros de vodka que te bebiste! —Abi sale del pasillo con un pijama carmesí extra corto. A mi lado, Matt entorna los ojos y le saca la lengua a pesar de que su mirada va directo a su trasero. Bufo.
—¡Era noche de fiesta! ¿Qué querías que hiciera? ¿Dormir a las diez de la noche como Francesca? —me señala.
—¡Hey! —espeto—. Al menos no tengo ganas de morirme ahora mismo.
—Touché.
Me centro en mi tazón con frutas y jugo de naranja. Como el desayuno con un hambre voraz mientras observo a los demás en la sala con despreocupación. Ya pasó más de un día desde que llegamos a la cabaña de madera donde tomaremos un descanso por una semana y media. Cuando Val le contó a los demás la idea de las pequeñas vacaciones, todos intentamos convencer a él y a Rose de que deberían hacerlo a solas, como una pareja, pero se negaron diciendo que todos nos merecíamos un descanso. Después de un par de vueltas más, aceptamos porque, o sea, ¡son vacaciones!
Podemos ser modestos, pero no estúpidos.
Abi se sienta en el sofá con Josh a su lado. Valen y Rose desayunando en la encimera de la cocina, y Ryan está rodeado por Mad y Neila que le buscan conversación mientras él luce incómodo. Mad y Neila quedaron fascinadas con Ryan desde el primer momento en que lo vieron. Y Thomas...
Thomas, para mi sorpresa y orgullo, está nadando en el lago, sin camiseta.
Desde que llegamos, no ha tenido mucho problema en mostrar su cuerpo marcado, y eso, por alguna razón, me puso feliz. Significa que en el transcurso en el que no estuve en Sunset, él logró superar algunos demonios. Y eso me hace sentir muy feliz por él. Más de lo que nunca podría estar. Sus cicatrices representan para él su infancia robada y los golpes de su padre, y que ahora no le importe nada de eso al dejar que todos las veamos, es un gran paso.
—Puedes decirle a Fran lo aburrida que es, pero aún le quedan un par de años para disfrutar. Tiene diecinueve —dice Rose—. En cambio, nosotros, ya estamos viejos —se ríe.
—¿Viejos? Tenemos veintidós años. Bueno, yo estoy a un mes de estarlo, pero es igual. No estamos tan lejos de la edad de Fran —Matt se defiende. Apunta un dedo a Ryan—. Viejo está Ryan, que roza los cuarenta.
Ryan entorna los ojos—Tengo treinta.
—No te estreses —juega Matt—. Estás al borde de las canas.
—Tener treinta no es malo —murmura Mad—. Creo que es la edad más perfecta. Tienes estabilidad, seguridad, y no estás muy joven, pero tampoco eres viejo.
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A Prueba De Ti [T#2]
RomanceNadie elige de quien enamorarse, porque créanme que, si así fuera, la mayoría elegiría a una persona diferente. Eso me sucedió con ella. No debía enamorarme, pero pasó y no pude evitarlo. Cuando la vi por primera vez, supe en ese mismo instante que...