☀️(46) Acabas de hacerme jodidamente feliz, rayo de sol

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(FRANCESCA BOWEN)

Aún recuerdo lo que Lucy dijo sobre Thomas:

<< ¿Sabes eso de que los chicos malos significan problemas? Bueno, Thomas no significa eso, significa dolor y sufrimiento. Y si no te cuidas, rubia, te romperá el corazón>>

¿Y saben qué? Tal vez tenga razón, pero ¿y qué importa? Todos nosotros tenemos partes de las que no estamos orgullosos. De algún modo u otro, también causamos dolor o sufrimiento, aunque no queramos que eso suceda. Pero hay cosas que no la decidimos nosotros, y lo importante entonces, es enfrentarlas, ser fuertes y levantarte cuando caes. Podemos significar problemas, dolor y sufrimiento, pero también podemos ser amor, consuelo y placer.

Y Thomas en estos momentos, es eso.

Se que lo he amado desde los trece, me consuela estar a su lado, y me hace sentir el más intenso placer cuando me mira, me sonríe, besa y toca.

No me importa lo que puedan pensar los demás, no me interesa lo que ocasione, solo me importa el aquí y ahora, con él, porque lo que él me hace sentir, es lo único que importa en estos momentos.

Porque él me ama.

Lo dijo.

No lo dije yo primero, no lo dijo por obligación o porque debía decirlo para no herirme. Lo dijo porque vi en sus ojos como sintió que era el momento correcto para decirlo. Y estoy extremadamente feliz por ello.

Aprieto más mis brazos a su alrededor. Thomas lanza una risa sonora.

—Espera, nena, ¿Apenas empezamos esto y ya me estás queriendo asfixiar? —soba mi espalda con delicadeza.

Inclino mi cabeza hacia atrás para verlo—Perdón. Supongo que me emocioné.

Sofoca una risa—Si no me contuviera en este momento y te abrazara con la fuerza y las ganas que quiero, creo que te sacaría el corazón por la boca —bromea.

Suelto una carcajada—Por favor, no lleguemos a extremos —murmuro y vuelvo a hundir mi cabeza en su cuello sintiendo su fuerte aroma a miel.

Peina unos mechones de mi cabello hacia atrás—De verdad, Fran. Quiero que sepas que te amo. Lo digo enserio.

Dios, se siente tan bien oírlo decir eso.

Retrocedo—Lo dices mucho, ¿aun sigues ebrio? —entorno los ojos fingiendo sospecha.

Sus ojos brillan y se encoge de hombros—No me importa si lo estoy. He querido decirte esto desde hace mucho tiempo, rayo de sol. Si el alcohol me sirvió de incentivo para decirlo, no me importa, porque lo que dije es la pura verdad. Solo te lo repito porque no quiero que creas que estoy jugando.

Sonrío. Aun si no repitiera esas palabras, sabría la verdad porque por primera vez puedo ver la emoción refulgente del amor y la honestidad brillando en sus ojos. Soltando un suspiro satisfecho, rodeo su cuello y peino los mechones bajos de su cabello. Me enderezo para plantar un beso tierno sobre sus labios. Un beso lento para un momento inolvidable. Estando aquí, nuestro primer te amo, besándonos bajo la noche, en su cuarto rodeados por la lluvia, ¿Acaso podría haber sido mejor? Nunca ni en un millón de años.

Chupo su labio inferior y dedico mi tiempo a acariciar sus labios con los míos y mi lengua. Me alejo para tomar aire, pero mis piernas se debilitan cuando veo la mirada café de Thomas volverse aún más oscura y brillosa de deseo.

—Eres muy hermosa, Fran —vuelve a besarme.

Me pierdo en sus labios y en sus manos que recorren el costado de mi cintura y mi espalda. Desciende hasta mi espalda baja, la electricidad recorre mi cuerpo y vuelve a subir. Thomas retrocede un centímetro solo rozando mis labios para verme a los ojos antes de volver a poseer mi boca.

A Prueba De Ti [T#2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora