Febrero, 2020
Entrada la noche y vestida como princesa en apuros, me vi caminando rápidamente y con bastante dificultad, debido a los altos tacones que llevaba puesto. No me agradaba la idea en absoluto de utilizar aquel tipo de zapato, pero creía que vestida de otra manera me hubiese visto ridícula y totalmente fuera de onda.
La alfombra roja se abrió paso frente a mis ojos, dejándome apreciar a todas las mujeres y hombres elegantes, vestidos de etiqueta, paseándose frente a los flash de las cámara, que no dejaban de sonar siquiera cuando alguien dejaba de sonreír, o su cara ilustraba una mueca salvaje de desasosiego. Era la primera vez que era parte de un evento tan conocido y de talla mundial como este. Estaba nerviosa, mi respiración no podía controlarse por si sola y parecía que en cualquier momento mis piernas cederían ante el temblor de mi cuerpo.
-¿Nerviosa? - preguntó alguien a mis espaldas, golpeando su aliento contra mi cuello desnudo, ya que mi peinado constaba de una cola bastante desordenada.
Me di la vuelta y pude ver a Collins, con una sonrisa de oreja a oreja, vestido impecable en ese traje azul marino brillante. Me abalancé a sus brazos, para luego dejar un beso en una de sus mejillas, mínima muestra de afecto para hacerle saber lo mucho que lo había extrañado.
-¡Collins! - exclamé, agarrando su rostro para así poder verle bien.
-No pensé verte aquí - sonrió, tomando mis manos entre las suyas, sacándolas de sus mejillas.
-Yo tampoco - reí - Fue una decisión de último momento.
-¿Muy agotador el viaje? - preguntó curioso.
-Solo quiero dormir - confesé, dejando salir un suspiro.
Collins entrelazó nuestros brazos, y no sin antes darme una mirada cómplice, comenzamos a caminar hacia el corazón de la alfombra roja, donde las cámaras atraparían rápidamente cada uno de nuestros movimientos.
Sin embargo, mientras me dejaba deleitar por aquel escenario nunca antes visto, algo totalmente desafortunado ocurrió, dejándome con el corazón a dos manos. Guardaré para siempre en mi memoria, ese momento en donde nuestras almas volvieron a conectarse. Sus ojos, más verdes que nunca, delataban la sorpresa de verme, allí, en persona, a solo unos cuantos centímetros. Me solté del agarre de Collins y caminando a pasos apresurados, sin apartar mi mirada de su anatomía, mientras mi chocaba con quien se cruzase en mi camino, me aproximé con impaciencia, esperando el tan ansiado encuentro.
Las palabras sobraron, haciéndose agua bajo nuestros brazos presurosos que se aferraron a la vida del otro, intentando no volver a escapar.
Volver a estar entre los brazos de Timothée, escuchando los latidos frenéticos de su corazón, me hicieron recordar lo mucho que lo necesitaba,junto al sentimiento que intenté borrar de mi memoria a toda costa; porque dolía más de lo que creí poder soportar, y cada noche era una agonía ante su ausencia, que solo levitaba parsimoniosa entre mis más desmedidos pensamientos, que no dejaban de recordar cada detalle de su figura.
Luego de tomar la decisión de volar junto a Henry hacia Londres, podía sentir en lo más profundo de mis entrañas que ese no sería el fin. Trabajo era trabajo, y por muy lejos que estuviésemos, podríamos mantener una relación, e incluso vernos de vez en cuando. Sin embargo, me hubiese gustado saber que las cosas comenzarían a marchitarse lentamente, sin previo aviso. Con el pasar de los días, nuestras entusiastas llamadas comenzaron a cesar, y con el ello, el deseo inicial de mantenernos juntos, a flote en aquel mar de la incertidumbre. Además, la diferencia de horarios, sirvió de excusa cada vez que las palabras se estancaban, reduciéndose a una corta y seca despedida.
Un día, sin siquiera pensarlo, todo terminó. Fue un acuerdo mutuo, y a decir verdad, con la cantidad de trabajo y responsabilidades que tenía, casi no me daba el tiempo para pensar más allá, o buscar una razón lógica a nuestro quiebre inminente. Llegaba la noche y dejaba salir las lágrimas austeras que contenía durante el día, sin lograr entender por completo a qué se debían.
Y solo cuando volví a Los Ángeles nuevamente, fui capaz de razonar y entender ese vacío que me apretaba el pecho por las noches. No fue fácil, ya que el éxito del trabajo, me nublaba los sentidos, evitando que cualquier rastro de tristeza saliera, manteniéndole cautiva en ese vacío que solo crecía y crecía en el completo olvido.
La razón final de nuestra ruptura nunca fue la falta de amor, al menos por mi parte, lo cual, supongo, hizo mucho más difícil el proceso de superación. Porque, para ser sincera, nunca quise superarle, no estaba en mis planes dejarle de amar. Me había costado tanto llegar donde estábamos, que guardaba una llama de esperanza, que volvió a crecer cuando nuestros ojos volvieron a encontrarse.
-No pensé verte - murmuró en mi oído, aun sin apartarme de sus brazos.
-Yo menos - mentí, porque siempre esperé encontrármelo.
-Te he extrañado tanto, Lilo.
Volver a escuchar mi nombre entre sus labios provocó que la poca cordura que me quedaba, amenazara con huir a través de las lágrimas que intentaba contener inútilmente. Lo ansiaba de tantas maneras posibles, que contenerme me parecía absurdo. Me separé lentamente, para así poder mirarle. Se veía totalmente conmocionado y emocionado, lo cual se delataba a través de sus mejillas rojas y el agarre de sus manos en mi cintura.
-No eres el único - confesé, dejando salir un suspiro.
-Somos unos imbéciles - rió, limpiando una lágrima que se había escapado.
-Completamente - murmuré, presa del llanto, volviendo a perderme entre sus cálidos brazos.
Ya nada importaba, todos a nuestros al rededor parecían seguir con el ritmo de sus vidas, mientras nuestros corazones gritaban de delirio, en el comienzo de una etapa, la cual estaba dispuesta a nunca dejar que llegase a su fin. No volvería a permitir que nuestro amor nuevamente volviera a pasar detrás de escena, sin pena ni gloria. Esta vez, sería diferente y gracias a ello, nuestro final también.
me demoré un montón, lo siento:c
pero aquí está el epílogo!
Espero que les haya gustado jeje <3
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Detrás de escena // t.c✔️
RomanceEn la abrazante ciudad de Los Ángeles, Timothée y Lilo se ven envueltos en un candente romance durante la grabación de una nueva película. Sin embargo, todo se torna difícil cuando los sentimientos comienzan a florecer. ¿Podrá Lilo aceptar el crecie...