✈︎┋El Diario De Las Torres Gemelas. ᵏᵒᵒᵏᵛ

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5 de Septiembre, 2001.
5:10 pm.

Era un día normal, tranquilo después de regresar del trabajo.

Recién habíamos terminado de comer una deliciosa pasta de camarón que Taehyung había echo. Estaba tan deliciosa que me llené después de dos platos completos.

Taehyung ahora se encontraba sentado junto conmigo en el sofá poniéndole a Yeontan los trajecitos que Namjoon y Yoongi nos habían dado el día de mi cumpleaños.

Que por cierto, no conté como fue nuestro ultimo día ahí.
Solo nos tuvimos que despertar temprano para dejar la casa tal cual como cuando habíamos llegado.
Fue todo un desorden en la casa hasta que al fin habíamos entrado a la minivan de Jin...vanessa.

El camino se hizo más largo que la ida, más porque en ciertas partes había tráfico, hasta para ser un domingo por la tarde, supongo que hoy las familias disfrutan de su día libre y salen a pasear...no estoy seguro.
A mitad del camino nos habíamos detenido en una tienda que está a mitad de la carretera para llenar el tanque de gasolina de la minivan, pero, al parecer Hoseok tenía la urgencia de ir y vomitar en los baños.
Dios mío, ¿A quien se le ocurre ir leyendo en el camino? Solo a él.
En fin, logramos llegar a casa sanos y salvos después de mi cumpleaños, el mejor de toda mi vida.

Ayer fuimos por Yeontan a la veterinaria y sacarlo de ahí. Lo recibimos ya con su pelo cortado y oliendo a fresitas.

Entonces, apenas hoy le dio tiempo a Taehyung de vestir a nuestro "hijo".

—¿Te gusta como se ve?— preguntó feliz refiriéndose a Yeontan que tenía puesto una tipo sudadera tejida rojo con amarillo. Asentí al ver como el cachorrito lucía su ternura mirándome con unos ojos muy tiernos.

—¿En donde habrán comprado esta ropita? En verdad es un encanto.— acaricié la cabecita de Yeontan.

—Por lo que sé, Yoongi sabe tejer y coser, posiblemente esta ropita la haya hecho él.— Lo miré confundido, ¿En verdad Yoongi hace eso? Vaya, siempre me sorprende.— seguido cose ropa, yo le había pedido hace poco que me ayudará a coser una playera y la dejó como nueva.—

—Qué linda hizo la ropita de tu hijo.— mis ojos miraron de nuevo a Yeontan, quien ya se había bajado del sillón. Al no obtener respuesta de Taehyung, lo miré. Tenía su mano en su pecho y estaba con él ceño fruncido.

—¿Cómo se te ocurre? ¿Acaso desconoces a TU hijo?— me dio un pequeño golpe en el brazo. Reí ante su acción.

—Bien bien, nuestro hijo.— corregí y Taehyung asintió contento, se acercó más a mi y me abrazó por los hombros.

—Que bonito es vivir contigo, Jungkook.— afirmó. Hice mi cabeza un poco hacía atrás para mirarlo mejor.

—¿De verdad te gusta?.— asintió.— ¿por qué?—

—Me gusta por el ambiente. El ambiente que tenemos es muy cómodo, ¿Sabes? Es como si fuéramos esposos y Yeontan es nuestro hijo.— Mis propios pensamientos me causaron gracia y solté una pequeña risita. Cuando menos lo esperé, Taehyung dejo un beso en mi mejilla.— gracias por dejarme vivir aquí contigo, Kookie.—

—No es nada, Tae...sabes que por ti haría de todo.— me volvió a dar un beso en la mejilla.

Estuvo un rato dándome besitos en la mejilla haciéndome reír, pero el sonido de su teléfono nos interrumpió. Taehyung al ver el número del que recibía la llamada, sonrió y contestó.