Enamorada De Tom Riddle [Tom Riddle y Tú]

El Pasado de Dumbledore

...

La segunda hora de pociones al fin había terminado, los estudiantes de Slytherin empezaban a salir después de haber recogido sus libros y calendario de exámenes, Tom ofreció su mano a Neela para ayudarla a levantarse, pero antes de que pudiera dar un paso en dirección a la salida ella intervino.

—Debo de hacer unas cosas antes— dijo, dándole a entender que quería privacidad, él asintió y salió del salón, esperándola unos pasillos más allá, ella se colocó bien sus muletas y caminó hasta llegar donde Slughorn —Profesor— llamó.

Éste volteó a verla sorprendido de que aún estuviera ahí, cuando los demás morían de ganas por estar en su receso —Dime, Neela— respondió volviendo la vista a los ensayos de los alumnos, calificando y corrigiendo, el que no llevara su mano al bolsillo dentro de su saco para tomar la poción contra el veneno de serpiente fue un gran alivio para ella.

—Bueno, me preguntaba si podría darme una "asesoría" breve, sólo serán unas cuantas preguntas— agregó sacando de su mochila una libreta, su pluma y tinta, él la miró confundido mientras dejaba los ensayos a un lado.

—¿Asesoría?— preguntó sin creerlo —¿A ti?— la rubia asintió, lista para escribir las respuestas que buscaba —Pero tú eres una de las mejores de la clase, peleando por el primer lugar con Tom, yo soy quien debería de pedirte asesoría a ti— ella se sonrojó un poco al escuchar aquel cumplido.

—Verá, la verdad es que quiero que ésta poción en particular salga bien, así que quiero estar segura de no tener cabos sueltos, usted sabe, como el nivel del fuego, la cantidad de agua, cómo agregar los ingredientes, entre otras cosas— el profesor Slughorn se cruzó de brazos, observándola aún con duda en su mirada.

—¿Se puede saber de qué es la poción?— ella dudó en responder, pero pensó que sí lo hacía, sería más obvio que tramaba algo, así que balbuceo antes de responder.

—Está bien, le diré, quiero hacer una poción somnifera, nada parecida al filtro de muertos en vida— explicó rápidamente —Sólo necesito que esa persona duerma unos cuantos días— (meses) —Y tampoco quiero dejarle inconsciente por un año, así que para eso lo requiero a usted.

—Pues... Bueno... ¿Podría saber para quién es esa poción?— Neela pensó y pensó, volvió a pensar y pensar, y después negó.

—Asuntos familiares, ya sabe, madre que no duerme y necesita reposo— mintió, y ahí su actuación empezó —Es que yo... Quiero... Quiero ayudarla— titubeó mientras hacía que sus ojos se pusieran llorosos —Desde que regresó de usted-sabe-donde no ha parado de tener pesadillas, y hace meses que no duerme— repuso al borde de las lágrimas.

El profesor Slughorn se paró rápidamente y se colocó junto a ella mientras la abrazaba tratando de consolarla —Lo siento, no lo sabía— dijo sintiéndose mal por haber tocado un tema tan sensible para su alumna, sin saber que lo estaba inventando.

—Está bien... Yo lo quise así... Entonces... ¿Me ayudará?— Horace hizo una mueca de lástima y asintió, dando unas palmaditas en su espalda mientras le ofrecía su pañuelo para secarse.

—Te ayudaré, Neela, pero si la quieres antes de las vacaciones tendremos que apresurarnos— ella asintió mientras secaba sus lágrimas, guardando su libretita de nuevo en su mochila.

—Ya conseguí una planta somnifera que será el ingrediente principal, profesor, le pedí a un amigo mío de Hufflepuff que la cuidara mientras termina de crecer— antes de que pudiera salir, él preguntó.

—Y a todo ésto ¿Por qué no le pides ayuda a Tom, él es tan bueno como tú y como yo?— Neela suspiró, al fin respondiendo con la verdad.

—No quiero que sepa de ésto, probablemente me diga que es una terrible idea. Hasta al rato profesor.