Los gordos, también aman.

Capitulo 21: Nueva Elena

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Aquí teneís un nuevo capi. Es cortito, pero tenía que acabarlo y subirlo enseguida, por que el internet va faaaaaaaaaaatal! Pero ya estoy con el siguiente ;) y espero tenerlo para subir mañana ;) si puedo, lo subo antes!!

Espero queeeeeee os guste! Espero vuestros votos y comentarios, como siempre ;) 

Os quiiiiiiiiiiiiero!

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P.O.V Elena

Me puse un vestido negro pegado al cuerpo, con un escote llamativo pero muy sencillo, nada provocativo. De zapatos me puse unos tacones que estilizaban más mis piernas, de color rosa y me maquille de una forma muy sencilla, natural, apenas un poco de colorete, línea de agua en negro, mascara de pestañas y pintalabios rosita claro.

Nerviosa espere a que vinieran a buscarme, me senté en el sofá, me levanté, me puse a andar, me senté en la mesa de la cocina, revise la hora.. hasta que por fin sonó el timbre.

-Pero Elena mujer, cálmate.- Me dijo Raúl riéndose, por lo nerviosa que iba.

Al fin llegamos, llamarón al telefonillo y casi se me para el corazón al volver a escuchar su voz, su dulce voz. Sonreí mientras abríamos la puerta del portal, imaginándome la cara que pondría. Al llegar a su descansillo, me escondí entre el ascensor y su puerta, impidiendo que me viese.

-Qué pasa hermanoooo.- Dijo Raúl a Mario.

-Eiiiii...- Dijo Mario, aunque le note apagadillo.-

-Qué pasa men.- Dijo Jaime saludando también a su amigo.- ¿Cómo estás?.- Preguntó.

-Aquí ando, que no es poco.- Dijo Mario.

-Holaaaaaa...- Saludaron Estefanía y Lara.

Había llegado mi momento, era la hora de aparecer, de recuperarle, de ver su reacción... salí de mi escondite, mientras Lara terminaba de saludarle, y su cara fue todo un poema. Soltó el móvil, que cayó al suelo sin conseguir que ninguno de los dos dejáramos de mirarnos. Me miraba de arriba a abajo, sorprendido, serio, ¿Le gustaba? ¿No le gustaba?.

-Hola...- Dije tímidamente..

-Ho..Ho..Hola..- Dijo nervioso.

-¿Puedo pasar?.- Dije sintiendo como mis mejillas se volvían rojas.

-Claro que sí.- Dijo tendiéndome la mano para que la agarrara y pasará. Al coger su mano, sentí como mil corrientes eléctricas invadían mi cuerpo. Cerró la puerta sin soltar mi mano y sin dejar de mirarme, dándola una patada.

Nos sentamos al rededor de la mesa, y hablamos todos tranquilamente. Nos reíamos, contábamos anécdotas, situaciones embarazosas, recuerdos... fue muy divertido.

En ningún momento Mario dejo de mirarme, sonriente aunque su mirada era de preocupación, estaba nervioso, estaba con un poco de miedo quizás.

P.O.V Mario.

Elena no contestó a mi mensaje, por lo que deduje que no aceptaría mi invitación, lo cual me dejo jodido el resto de la mañana. Apenas sin ganas, baje a comprar alguna que otra cosa que me faltaba para la "fiesta" que más bien sería una cena de amigos.

Ya después de comer me metí en la ducha intentando matar mis nervios, mi mal estar anímico; Deje que el agua cayera por mi cuerpo, intentando relajarme sin éxito.

Prepare todos los aperitivos en la mesa del comedor, un poco de jamón, de lomo, patatas fritas, algún que otro surtido variado, en fin, lo típico de una reunión de amigos. Me senté en el sofá y espere a que fuera la hora para que vinieran.