Por cada mañana de enero, cada tarde de martes y cada noche de sábado.
Por ser el dueño de los mejores recuerdos que guardo en mi memoria.
Por estar ahí cuando me hundía.
Por tus cigarrillos dorados y las tardes de pipas.
Por tus quejas y mis celos.
Por cada palabra, cada beso, cada caricia y cada arañazo.
Por dejarme sin aliento y permitirme ser la dueña de tus mejores abrazos.
Por los orgasmos provocados y concedidos.
Por conocer mi cuerpo y sus reacciones como nadie.
Por ser el mejor de este mundo y de todos los otros.
Por tu sonrisa de niño y tu forma de mirar.
Por hacer de tus brazos el mejor lugar para refugiarse del frío.
Por ti, por mi, y porque el mundo es nuestro
hoy, mañana, y siempre.
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Poesía y pipas
PoetryBienvenidos a lo más profundo de la jaula de grillos que es mi mente. Pasen y vean, soy un todo un desastre.