Increíble ver cómo un casual cúmulo de casualidades puede trastocar tu vida al completo. Tan increíble como que el aleteo de una mariposa puede provocar un huracán en la otra punta del planeta, o eso dicen, pero si es cierto, tú, con tus increíbles ojos café y esas pestañas que me traen loca, serías capaz de destruir un continente. Y es que tú, que eres tan natural como follar a pelo, tan frágil y tan fuerte como la vida misma, tan irresistible como un tazón del mejor chocolate caliente en pleno mes de enero, tú, que no sabes decir que no, pero que te cuesta un mundo decir que sí, tú, mi vida, eres peor que la droga más cara de esta ciudad. Hace mucho que dudo sobre lo que estoy haciendo, sobre el peligro que tiene recorrer las curvas finitas de tus labios y colgarse de todos tus lunares como si de un precipicio se tratase. Hace mucho que las canciones hablan de ti, o de nosotros. Hace mucho que no me puedo dormir sin recordar alguna de las tardes que pasamos juntos, aquellos momentos que no se pueden olvidar, como bien tú decías. Hace mucho que estrellarse contra tu cuerpo único y que me robes el aliento suena demasiado bien.
Pobre kamikaze que no tiene mejor forma de morir que entre los brazos que le dan la vida.
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Poesía y pipas
PoetryBienvenidos a lo más profundo de la jaula de grillos que es mi mente. Pasen y vean, soy un todo un desastre.
