Parte IV. Capítulo 11.- Diamantes Negros

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Día 28.

NARRADOR


-Ah, por aquí, señorita Gray - dijo el detective Blackthorn cuando vio a Tessa acercase a él.

Tessa había recibido un llamado para que se presentara en las oficinas centrales de NYPD esa mañana. No estando completamente segura de la razón, dado que no le dieron mayores detalles en la recepción del hotel, así que, ahí se encontraba.

-¿A qué viene esto? - le preguntó al agente Blackthorn con curiosidad - no he pisoteado el trabajo de nadie.

-Sígame, vamos a hablar antes de empezar cualquier pelea.

El agente Blackthorn se adentró en una de las oficinas seguido de Tessa, quien miró con mayor curiosidad a los hombres que ahí estaban, mirándolos con seriedad.

-Investigadora Gray - dijo uno de los hombres mientras estrechaba la mano con Tessa - encantado de conocerla, soy Woolsey y él es mi compañero Kyle. Somos sus homólogos del FBI de Nueva York.

-¿FBI?

-Sí, el caso del asesinato de Steve Barlet se ha convertido en la búsqueda de un asesino en serie - Woolsey explicó.

-¿Asesino en serie?, ¿Por qué en serie? - Tessa quiso saber.

-Señorita Gray - intervino el agente Blackthorn - es tal como lo predijo. Esta mañana, otro cadáver ha sido encontrado por un pescador en el centro del lago... el cuerpo descuartizado de una mujer joven... una mujer pelinegra.




MAGNUS


Me encontraba un tanto impaciente cuando miraba a aquel hombre mayor, dueño de una tienda de artículos de cacería y camping. Un niño pequeño también estaba ahí, recargado en el mostrador, mirando con curiosidad la fotografía del hombre.

-Lo siento, no hay suerte - dijo el hombre mientras me devolvía la fotografía - no reconozco esa cara.

-Ya veo... gracias - bien... otra tienda que descartar, maldición - si recuerda algo o tiene algún cliente que se parezca a este hombre, por favor, póngase en contacto conmigo a este número.

-Muy bien.

-Oye - me giré al niño que había estado reposando contra el mostrador - oye, ¿ese hombre tiene cabello blanco ahora?

Le miré confundido... pero... - ¿cabello blanco...?

-Se parece a él - comentó el pequeño - hace unas dos semanas un tipo vino a comprar un hacha, pero era un poco diferente al de la fotografía... él tenía cabello blanco.

¿Podría ser?, me acuclillé frente al chico, quien comenzó a acariciar a un perro... que no había notado ahí antes...

-¿Cuál es tu nombre?

-Leon... emm, Leon Verlac, igual que nuestro negocio, ¿no es genial?

-Ah, si... - claro, un niño siendo un niño - genial, escucha Leon, ¿podrías decirme todo lo que recuerdas de ese tipo de hace dos semanas?

-Oye, oye, ¿me muestras tu placa primero? - ¿en serio?...

La saqué de mi chaqueta y se la mostré - mira...

Nueva York, Con AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora