𝟞𝟙

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–SooBin...– YeonJun suspiró.

Luego de unos segundos, SooBin frunció sus cejas e intentó cerrar la puerta, aunque el rubio lo detuvo.

–Para, necesito hablar contigo, por favor– suplicaba el mayor.

–No necesito escucharte, sé que te importa mucho más tu nuevo novio de lo que alguna vez yo te importe– SooBin se esforzaba por cerrar la puerta.

Aunque parecía estar a la defensiva, SooBin creía que YeonJun tenía razón al haberle terminado, pero no quería oírlo, no quería terminar aún más herido.

–No es así, por favor déjame entrar y te explicaré todo.

–Mamá está en casa, no puedo hablar ahora– se excusó tontamente.

–Es mentira, llamé a Kai y dijo que tú madre iba a estar hasta la noche en su casa, con tu tía– empujó la puerta fuertemente, abriéndola al fin– Terminé con él– dijo sin más. El menor abrió los ojos lo más grande que pudo.

–¿Qué?

–Terminé con JungKook mientras venía para tu casa, le dije que sé que no le gusto, y que él tampoco me gusta...– se quedó en silencio unos segundos, para luego acercarse más al menor– La única persona que me gustó y me gusta, eres tú... Lo siento, lo siento mucho Binie– el mayor comenzaba a llorar, pero nunca apartaba la mirada de sus ojos– Sé que dije mucha mierda de tí y que te hice mal, pero no era mi intención, solo tenía rencor, pero jamás querría dañarte, Binie... Te extraño tanto y te amo, no puedo seguir así, necesito hablarte, necesito que hablemos... Te necesito en mi vida, SooBin... Perdóname, por favor.

SooBin, quién había mantenido una mirada fría y distante tiró su cigarro ya terminado para luego ponerse a llorar, tomó el brazo del mayor y lo acercó rápidamente para abrazarlo como hace meses no lo hacía.

Lloraba en el cuello del mayor mientras sus brazos se aferraban fuertemente a él, tratando de sanar sus heridas.

–Lo siento– sollozaba– Sé que fuí el peor novio del mundo, no te merezco hyung, pero no puedo soltarte porque te amo... Te amo tanto– lloraba como si fuera un niño.

YeonJun levantó su rostro, mirándolo a los ojos, acariciando las mejillas y el cabello de SooBin, quién unió sus labios rápidamente.
Los labios del más alto sabían a tabaco, pero a YeonJun no le importaba en lo más mínimo.
En cambio, los del rubio sabían dulce.

SooBin lloraba en medio del beso, mientras acariciaba el rostro del mayor.

–Te extrañé tanto, hyung– dijo sobre los labios contrarios.

...

Luego de una larga seción de besos cariñosos, ambos se encontraban sentados uno al lado del otro en el sofá de SooBin, hablando sobre todo lo que habían pasado en el tiempo que no estuvieron juntos, y discutiendo sus sentimientos y las razones de su separación.
Cuando fué el turno de hablar de SooBin, YeonJun se sorprendió al enterarse de todo lo que había pasado con su padrastro, y cómo a pesar de todo había estado pendiente de él.

–Llamé a BeomGyu al día siguiente, cuando iban a entregarte los resultados para saber si él te había contagiado algo... Estaba tan nervioso, si él te hubiera pasado alguna enfermedad volvería a golpearlo hasta dejarlo inconsciente.

YeonJun apretaba fuertemente la mano de SooBin, el menor lo miró y se acercó más a él. Posó una de sus manos en su cabello, luego en sus mejillas, las cuales acarició.

–Lo siento tanto hyung, todo lo malo que te ha pasado fué por mi culpa.

–No Binie, no es así... Yo debí haberte entendido y esperado más tiempo– juntó sus frentes.

–Creo... Que ambos somos un poco tontos– la voz SooBin se quebraba, a pesar de que reía irónicamente.

YeonJun limpió la lágrima que caía por su mejilla y lo besó.

–Pero ya hemos aprendido la lección ¿Verdad?... Prometo que no volverá a pasar, Binie.

Ambos discutieron sobre su futuro, y así fué como llegaron a la solución de sus problemas:

SooBin se iría de su casa, dormiría un tiempo en la casa de YeonJun, quién había llamado a su madre, informándole acerca de la situacion de SooBin, aunque no le dijo por qué se quedaría en su casa realmente.
El menor preparaba su mochila con algunas prendas de ropa, más sus cosas escolares y algo de dinero que había ahorrado.

Cuando ambos iban a salir de la casa de SooBin, su madre entró por la puerta, asustando al menor.

–Mamá...

–¿SooBin? ¿Dónde vas a ésta hora? Tienes prohibido salir de casa, ya te lo he dicho, no quiero que vuelvas a pegarte con alguien solo porque sí– hablaba sin parar su madre.

–Mamá– volvió a hablar SooBin, señalando con su vista al mayor, quien estaba algo lejos, por lo cual su madre no lo había visto.

–Oh, hola YeonJun... ¿Ya no están peleados?

–No, ya nos arreglamos– sonrió y se acercó a la madre del menor– Señora ¿Deja que SooBin duerma en mi casa? Por favor.

La mujer miró a su hijo, había algo que no le estaba diciendo, pero daba igual, YeonJun siempre había sido un buen muchacho ¿No?

–Está bien, avísame si vas a venir a casa– habló de manera seca.

SooBin asintió y abrazó a su madre, la cuál se sorprendió bastante, pero correspondió el abrazo de su hijo.

–Dime tú cuando quieras que vuelva a casa– SooBin sonrió y salió de su hogar, seguido de YeonJun.

–Vamos, Binie– dicho eso, tomó su mano y la besó.

Una lágrima se deslizó por la mejilla de SooBin, y aún así, sonrió.

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cap. editado ♡

𝔸𝕟𝕕 𝕨𝕙𝕒𝕥...? ➣ 𝘚𝘰𝘰𝘑𝘶𝘯 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora