Capítulo 8.

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— ¿Paso algo? -No sabia por qué había dicho algo como aquello sin titubear cuando se había dado cuanta la pregunta ya había abandonado su boca_


— ¿Si te digo cuanto me creerías?_


— U..na p.ersona c..cuando d..dice su mayores t..temores n..no c..creo que mienta -tras balbuceos contesta podía sentir a un más subir su temperatura por aquellos brazos a su alrededor Yibo sentia que en cualquier momento sus piernas sederian y lloraria era patético_

Xiao Zhan cierra los ojos disfrutaba aquel abrazo, pero podía notar que a un el joven que lo abrazaba torpemente aún se encontraba enfermo.


— Te lo diré pero antes de eso tienes que sentarte antes de que toques en suelo_


—¿Ehh?_


— Eres demasiado lindo Yibo -Zhan no pude evitar tocar esas mejillas que se encontraban caliente olvidando su miedo inicial pone sus manos en la cintura del menor y lo carga con facilidad realmente era muy liviano_


Yibo ante acto de reflejo rodea sus brazos en aquel cuello, sentia su rostro arder y esta vez no era por estar enfermo modia su labio con impaciencia sentia una gran vergüenza quería llorar sus ojos claros empezaban a llenarse de lagrimas  que se negaba a salir. Todo el trayecto hasta llegar a su habitación por indicaciones de el, siente la suavidad de su cama sobre su espalda y el aliento del empresario chocar contra su cuello.

Xiao Zhan disfrutaba de las diversas expresiones lindas del menor, que estaba jugando sus dedos con rapidez y tenía la mirada a bajo no lo sabia por ninguna razón, había vuelto hacer  aquel tímido y tierno joven que lo hacía sentir muchas cosas. Yibo trataba de concentrarse lo más que podía en sus dedos no podía mirar aquel sujeto sin que recordara aquellos labios sobre los de el debido a sus pensamientos siente sus mejillas arder cubriendo su rostro con rapidez.

Zhan no dejaba de mirarlo con lentitud se quitó el saco y lo puso en la silla detrás de él, la habitación se encontraba ordenada se había dado cuanta hasta a penas que había dejando de mirar a Yibo, se desobrocho la playera de manga larga dejando ver una camiseta que dejo y se acercó a la cama donde tomo asiento en el borde.

— Lamento venir así cuando estás un enfermo Yibo -con pesar en su suave voz Zhan se disculpa pasando dos dedos por aquellos mechones del castaño pelo_

— N..no s..e preocupe e.stoy b.bien_

Rie sin poder evitarlo Zhan.


— Te voy a creer pero debes reposar no me iré a ningún lado hoy -afirma estando de pie y rodear la cama acostándose del otro lado_


— X.iao Zhan ¿Que p..paso? _


— Llegaron al país una persona que me hizo mucho daño y tengo miedo de que vuelva a mi vida -Zhan no sabia como le decía eso sin dudar a Yibo que no quitaba aquellos claros ojos de su persona_

— No debería tener miedo, el miedo es parte de la vida nos hace crecer como personas y ser mejores que antes nos marcan lo que debemos evitar_


Yibo no sabía que más decir no era como si fuera su mejor amiga para que le gritara, lo único que podía hacer era acercarse a él y abrazarlo con fuerza oliendo de lleno el fresco perfume que desprendía de su cuerpo.


— Y..Yibo t..tu - esta vez fue el turno de Zhan de tartamudear debido a la inesperada acción del menor_


— E..esa persona no sabes lo maravillosa persona que eres por que si yo te tuviera jamás te dejaría Z...ZhanGe- balbucea sentido arder sus mejillas_

Dulce Tentación Donde viven las historias. Descúbrelo ahora