Evadiéndola [Pierre Gasly] ✓

Capítulo 3.

10 de Abril, 2020.
El Havre, Francia.

Me preparo para mí noche en aquí, cualquiera que me conoce sabe lo mucho que me gusta bailar. Ir a clubes y bares siempre fue una de mis actividades de fin de semana favoritas.

Me termino de maquillar y me miro al espejo. El maquillaje oscuro en mis ojos hace que estos se vean más grises que nunca, me termino de maquillar los labios y sonrío. Perfecta. Miro el lindo vestido rojo que hace que mi piel parezca mucho más bronceada y que mis curvas resalten más, me pongo mis botas largas negras de tacón y ¡joder! Parezco un buen polvo.

Riendo ante mis pensamientos, tomo mi bolso y le mando un audio a mi mejor amiga.

-¡Primera noche que saldré sola, deséame suerte!-Digo en este.

Apenas lo mando pasan algunos segundos y veo como ella me manda un mensaje.

Madison: Solo cuídate, te amo.
Yo: También te amo, cariño.

Bajo por el ascensor y me subo a mi lindo Jeep. Jamás dejé que mi papá me regalase un auto, todo lo que tengo, contrario a lo que la gente cree, me lo gané trabajando.

Emprendo viaje hacia una discoteca que hay por aquí y apenas llego estaciono en el estacionamiento del lugar, salgo de mi auto con toda la confianza del mundo y le muestro al de seguridad que soy VIP. Una vez dentro del lugar sonrío.

Me dirijo a la barra donde pido una soda, necesito algo sin alcohol porque tengo que conducir de vuelta a casa. Estoy sentada en la barra cuando siento que alguien se sienta a mi lado, doy una ojeada y veo a un lindo pelirrojo, este me mira y me guiña un ojo.

-Mucho gusto, soy Quentin-Me dice en francés mientras me extiende la mano.

-Sadie-Le contesto estrechandosela.

-¿Tan linda y tan sola?-Me sonríe pícaro.

Oh, Jesús bendito, es un idiota, no dijo más de diez palabras seguidas que ya me di cuenta de eso. Poniendo los ojos en blanco lo ignoro.

-¿Qué sucede, no hablas tan fluido el francés?-Me pregunta con el ceño fruncido.

-O quizás solo no te quiero responder-Le contesto en su idioma.

-Te invito una copa, será divertido...

-No, gracias, estoy bien así-Le digo con una sonrisa cortés.

Me intento levantar del taburete, pero el pelirrojo me habla y me sostiene la muñeca.

-¿Ya te vas?

-Yo...

-¡Oh! Aquí estás, nena-Escucho a Pierre acercándose a mi y haciendo que el pelirrojo me suelte.

¿Y a este de dónde lo sacaron? Creo que nota la confusión en mis ojos porque deja un corto y rápido beso en mis labios, y ¡Joder! Necesito más de esos.

-Si, tardaste-Le digo mirándolo con desconfianza.

-Perdóname, luego te lo compensaré-Me sonríe pícaro.

Joder, joder, joder. Nop, nop, nop, nop. No me puede estar haciendo esto este hombre.

Jesús bendito, haz que Pierre no me diga estas cosas.

-Quentin, él es mi novio, Pierre. Cariño, él es Quentin.

-Disculpa, no sabía que tenía novio-Le habla el idiota a Pierre.

-Creo que las disculpas van para mí chica-Le contesta.

Que lindo suena el "mi chica" de la boca de este hombre. Jodidisimo Dios.