Capítulo 13 "Me perdí de nuevo"

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Para cuando llegaron a la mansión estaba completamente oscuro afuera, no podían ser más de las 7 pm pero el cielo ahora era nocturno.
Hermione temblaba con su ropa empapada, sentía pena por aquel enorme charco de agua que ambos estaban dejando en el living, auque a Draco parecía no importarle.

-Ven aquí- la guió escaleras arriba por un nuevo laberinto desconocido, todo en esa casa parecía no tener fin, era fácil perderse entre tantas paredes y pasillos.

Draco abre la puerta del final de uno de los pasillos, era un area que parecía bastante privada. El rubio se hizo a un lado para que ella pudiera pasar y así lo hizo.
Se quedo sin palabras al ver donde estaba. Sin duda era la habitación de Draco, tenia un gran balcón al que podías acceder al pasar por dos puertas de cristal, una cama enorme estaba situada en el centro de todo, las luces eran tenues, dandole un aspecto oscuro pero muy acogedor y sobre todo calido.

Del techo de madera colgaba un hermoso candelabro, pero la vista frente a la cama era increible, se podía ver desde lo alto ya que la mansión estaba en las colinas, no había visto nada parecido y le encantaba.

-Voy a darte ropa para que te cambies, si no vas a enfermarte- dijo el rubio buscando entre cajones.

-Tu también vas a enfermarte- el negó.

-No, mi temperatura corporal es diferente a la tuya-

-oh- dijo ella -¿Si te sentías mal por qué estabas en el bosque?-

-Te dije que me gusta ir para despejar mi mente- Hermione asintió -ahora que estas aquí ya no me siento tan mal-

-¿Ya no tienes...sed?- preguntó refiriendose a la sangre. El rubio cerro los cajones y se acercó a ella con algunas prendas en la mano.

-Muero de sed- dijo susurrando en su oido -pero tranquila- Draco no parecía calmado, tenia una expresión de desconcierto en el rostro pero aún así besó los labios de Hermione.

-¿Por qué no me dijiste que era tu cumpleaños?- Draco sonrió de lado finalmente -tampoco me llamaste, no me dijiste por lo que estabas pasando, habíamos quedado en no más secretos- quizás en ese momento se veía como una niña pequeña hablando, pero no era bonito como él solo le seguía mintiendo.

-No te dije porque sabía que ibas a querer estar conmigo, me daba miedo que yo...perdiera el control y quisiera...- el mira el cuello de Hermione y se lame los labios -creí que si tenía cerca no tardaría en atacarte por la sed- el traga saliva.

-¿Y que sientes ahora?-

-Felíz ahora que estas aquí, sana y salva, se que puedo manejar esto- dice besando su frente -ponte esto por favor- le entrega unos pantalones de chandal negros y una sudadera negra, seguro le quedarían enormes, pero se estaba muriendo de frío.

-Gracias- dice tomando las prendas.

-Yo quiero darme un baño, puedes cambiarte aquí, en un momento regreso- señala el baño que estaba dentro de la habitación. Draco aún se veía cansado, ella estaba muriendo de hambre y eso le recordó que él no había comido.

-¿Quieres que busque algo de comer para ti? ¿Mientras te bañas?- pregunta mordiendose el labio, gesto que Draco no pasa desapercibido. El solo asiente con una sonrisa y desaparece por la puerta del cuarto de baño.

Hermione quita la ropa mojada y la pone en una cesta para que no siga mojando el suelo, iba a necesitarla para después así que decidió buscar algún lugar para ponerla a secar.

Se coloca la ropa de Draco y en efecto, le quedan enormes, pero al menos estaba calentita ahora.
Tomó la cesta con ropa mojada y salió de la habitación. Toda la casa estaba en silencio, se escuchaba solo el ruido de la lluvia golpeando el techo de madera, todas las chimeneas estaban encendidas y eso era lo único que iluminaba algunos pasillos.

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