•°100 𝑅𝑎𝑧𝑜𝑛𝑒𝑠 𝑃𝑎𝑟𝑎 𝐴𝑏𝑟𝑖𝑟 𝐿𝑜𝑠 𝑂𝑗𝑜𝑠•°

⁀➷12༄

Harry Potter.

Me giré de la cama tomando la varita, aunque veía todo un poco borroso no podía dejar que Draco escapara.

-Fermaportus

La puerta entonces brillo.

-No saldrás de aquí.-Murmuré bajando de la cama para ir hasta el, Draco retrocedió y entonces pude ver como buscaba su varita.

-Si te largas de aquí yo me largaré a coger con la primera persona que me encuentre.

Amenace con una voz firme, suavice mi ceño fruncido al ver como Draco soltaba un gruñido, como si fuera un animal.

Entonces en menos de un parpadeo tenía a Draco encima de mí, sus ojos color plata con mercurio se afilaron, tomo mi mentón para hacer que alzara a aún más mi rostro.

-Potter entiende bien una cosa, eres mi esposo y no estás siendo tú, no sabes lo que pides y en mis rasgos de villano no está el aprovecharme de una persona, no si eres tú y no si es de esta manera.

Un aroma a madera me llego, ese aroma que tanto caracterizaba a Ron, ¿Por qué Draco huele a Ron?.

El aroma me volvió a aturdir, sentí como aquella excitación desesperada volvió a abrumarme.

- Tú hueles a... tan bien.

Draco entonces hizo una mueca, aún estaba arriba de mi, antes de que se le ocurriera quitarme con mis piernas lo atraje aún más a mi.

-¿Por qué te alejas?, ¿No me deseas?.

Veía todo borroso, empezaba a ver luces y de nuevo no me sentía tan bien, el aire se me estaba escapando de los pulmones.

Creo que Draco volvió a preguntarme que me había tomado, rodé los ojos, ya le había dicho que nada. Aunque ahora que lo recuerdo me dormí con el frasco entre mis manos y cuando desperté simplemente estaba roto.

El frasco de Hermione se había derramado en mi piel, no sabía lo que era, solo sabia que era amortenia combinada con no sé qué cosa.

-Llama a alguien para que me quite esto...- Dije mientras intentaba quitarlo de encima, mi dolor estaba empeorando y el no estaba ayudando.

-Potter no voy a dejar que te toquen.-Bramo Draco totalmente enojado.

-Pues entonces deja de...

Entonces sentí unos labios cálidos besar los míos, no rechace el contacto para nada, al contrario, los bese con más ferocidad.

Gemidos roncos empezaron a salir de mi boca al sentir como sus manos empezaban a filtrarse por mi ropa acariciando mi piel suavemente.

Sentí que mi cuerpo temblaba como gelatina y la fuerza se me iba de todo el cuerpo con cada beso y jadeo que salía de mi boca.

Sus manos recorrieron mi cintura, me separe de sus labios, solté un quejido en signo de molestia, Draco delineo mis labios y entonces aproveche para meter sus dedos a mi boca, mi lengua bailó alrededor de estos en forma de espiral.

-La insinuación es clara.-Murmure después de sacarlos de mi boca, sus dedos se quedaron sin ningún rastro de saliva.

Draco entonces retiró sus dedos paseándolos por mi piel.

-Bastante.-Murmuró él.-Pero para que el efecto se pase eres tú el que debe correrse.

Sonreí ladinamente.

-Deseo probarte como no he deseado probar a nadie en mi vida, el simple hecho de imaginar tu sabor hace que quiera correrme así que déjame chupártela por el amor de Godric.