47| Dragón de hielo

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-De acuerdo...-susurro Lucifer mientras pasaba sus manos sobre Aegon, los ojos azules del dragón se colocaron en la joven y su pupila se abrió.

Aegon abrió sus fauces mostrando sus dientes filosos. Lucifer apretó las escamas del animal y lo trepó con rapidez, el animal se movió sobresaltando a la chica abrazándose al dragón. La respiración de la joven se aceleró con terror, un movimiento en falso y sería un bocadillo para el animal. Paso sus manos sobre las escamas del animal tranquilizandolo y el animal cerro sus ojos con confianza.

-Magia de vidriagon- susurro Lucifer pasando sus mano sobre las escamas del animal al descubrir que la magia que poseía el animal. La magia de congelar todo lo que se atravesara en su paso.

Miro el ala que había estado lastimada ya sanada y paso una mano sobre el ala.

-Puedes ser libre- hablo mirando al animal quien hizo un sonido reptil- Podemos serlo y yo te prometo que te dejare ir.

El animal la escuchaba y luego abrió su boca lanzando el frío hacia la reja que estaba sobre ellos destruyendola, el animal miro la salida y comenzó a trepar. Lucifer se aferró a las escamas del animal para no caer y salieron de la cueva, Aegon por fin logro estirar sus alas y soltó un rugido seguido de soltar hielo por su boca.

-De acuerdo...- susurro Lucifer para si misma- Sabes domar una escoba, jamás he logrado domar los dragones de mi padre, pero puedo hacerlo.

Aegon esperaba que su nueva dueña le ordenará volar, Lucifer golpeó con su pie a un costado de las alas del animal y el dragón se alzo entre los aires extendiendo sus alas azules entre la noche dirigiéndose a dónde estaban sus hermanos.

***

-¡No!- exclamó Serpens Malfoy colocando sus manos en su cabello castaño- ¡Todo menos mi cabello! ¡Hey, alejate!- soltó el joven hacia Buckbeck, el animal se alejo soltando un exclamo- Maldito pollo.

Los dragones volaban de un lado a otro mientras que Abraxas Malfoy se debatia en duelo con Draco Malfoy.

-Maldito Draco- soltó Abraxas cuando su varita fue lanzada lejos por su primo, el hombre chasqueo los dedos- Tragatelo- ordeno el hombre a su dragón.

El gran animal abrio su boca emitiendo su sonido reptil, Draco dió un paso hacia atrás y cerro los ojos al sentir el frío aliento del animal. Una llamas azules hizo que Abraxas y Draco mirarán al cielo, Aegon descendió al piso y soltó un rugido.

-¡Alejate de mi padre!- exclamó Lucifer Malfoy desde el lomo del animal, la sonrisa de Draco Malfoy se amplio al ver a su hija.

-¿¡Cómo has escapado!? Y ¿¡Que haces con mi dragón?!- soltó Abraxas con enojo y miro a su hija buscando una explicación, Igna se encogió de hombros y sonrió cuando su padre dejo de verla.

-Olvidas que soy un Malfoy- exclamó Lucifer con una gran sonrisa- Si tú puedes donar este dragón, yo también puedo hacerlo- los ojos platas de la chica brillaron intensamente- Yo siempre logro lo que me propongo.

Abraxas miro como sus otros dos dragones se colocaban a lado de Aegon y le mostraron sus colmillos, dió un paso hacia atrás y nego con la cabeza.

-Maldito traidores- exclamó hacia sus ex dragones, Lucifer sonrió de lado sin dejarlo de mirar, Abraxas camino hacia un lado y jalo a Ángel, colocó su varita en la garganta del joven y sonrio- Baja ahora de mis bestias o juro que lo mató.

Lucifer miro al joven y este a ella, luego la rubia comenzó a bajar de las escamas del animal.

-¡Igna!- grito el hombre y su hija lo miro, ambos intercambiaron una mirada- ¡Mátala!





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