capitulo 25

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- ¡saint! - gritó Vianey feliz de verme.
La pequeña niña de 7 años corrió como una loca por el parque para abrazarme.

-Hola pequeñaja - dije agachándome y abrazándola.

Vianey era la hermana pequeña de zee. O más que hermana su prima, la hija de su tío. Era una niña adorable de pelos castaños y unos ojos marrones como el color de la coca-cola. Siempre me había llevado muy bien con ella, y también con la otra hermana de zee. En general con toda la familia de zee porque con su tío también me llevaba bastante bien.

-¿Te has traído al gato? - dijo zee en cuanto llegó a nuestra altura.

-¡Gatito! - exclamó Vianey en cuanto se percató de que Desdentado estaba al lado mío.

Vianey fue a agarrar al gato pero este se escapó asustado. Siempre hacía lo mismo con aquella pequeñaja.

-Me da pena dejarlo en casa. Los gatos suelen ser muy callejeros, así que mejor si le da el aire.

-Sí, yo también me he sacado a la mascota de paseo para que le del aire- dijo señalando a la pequeña que trataba de pillar a Desdentado.

Me reí. Era domingo por la tarde y zee había salido con su hermana al parque, algo que a veces hacía. Me parecía muy adorable que hiciera de niñero con su hermana pequeña. En cuanto zee me dijo que iba a venir al parque con su hermana cogí a Desdentado y bajé sin pensármelo, porque adoraba estar con su hermana y porque también quería hablar con zee

De repente noté algo chocándose contra mi. Era Desdentado que se había tirado encima mío y había clavado sus uñas en mi ropa quedando colgado del costado de mi camiseta. Vianey se rió divertida.

-¡Gatito asustado!- dijo entre jadeos de haber estado corriendo.

-¡Desdentado! ¿Qué haces?- dije intentando quitármelo de encima- No seas así. Si ya conoces a Vianey, no te va ha hacer nada.

Solté a Desdentado de mi camiseta y lo dejé en el suelo. Este rápidamente se escondió detrás de mis piernas. Me reí.

-Bueno, no me has dicho qué tal éstas - le dije a la niña.

-¡Muuuy bien! - dijo exagerando la palabra "Muy".

-¡Vaya! Pues me alegro muchísimo.

-Vianey enséñale asaint  lo que te ha pasado esta mañana- dijo zee

Vianey se emocionó y se acercó a mi. Me agaché un poco para estar a su altura y ella abrió bien la boca para que pudiera ver con claridad el diente que le faltaba.

-¡Qué bien! ¿Sabes lo que quiere decir eso?

-¡El Hada de los Dientes!- chilló feliz - Vendrá volando

Vianey estiró las dos brazos como si quisiera que estos se convirtieran en alas y comenzó a correr alrededor de nosotros imitando a una mini hada. Sin parar de correr se dirigió hacía la zona de juegos del parque. zee y yo tuvimos que seguirla. Desde la lejanía vi como Vianey se reunía con un grupito de niños que serían sus amigos.

-Y bueno... ¿Qué quería sammy?- preguntó zee

-¿Cuando?

-Ya sabes, cuando te pidió que le acompañaras a los establos. Era obvio que te lo había pedido para hablar contigo.

-Pues imagínate lo que quería... Le interesa más lo que pasa entre nosotros dos que cualquier otra cosa en el mundo.

-¿Le contaste lo que pasó el viernes?

-No. Osea le dije que quedamos y eso. Pero no le dije la verdad, ya sabes... Le dije que lo habíamos arreglado y punto.

-¿Y se lo creyó?

-Creo que sí...

zee me miró y siguió andando en silencio. Llegamos a la zona de juegos y nos sentamos en un banco libre. Desdentado se subió a mi lado y apoyó su cabeza sobre mis piernas. Observé como el grupito de amigos de Vianey jugaba al escondite. Aparté la vista y volví a mirar a zee

-Ayer discutí con mi padre.

-¿Sí? ¿Y sobre que?

- Sobre la palabra "Maricón".

-¿Qué? -zee se rió.

-Lo que oyes. Todo empezó por un estúpido comentario de mi padre sobre una película. Y se acabó metiendo con los homosexuales y con sammy. Le llamé Homófobo y él me llamó Maricón.

-Joder... - murmuró zee

-No puedo más zee... Mi padre está obsesionado con que sammy es una mala influencia para mí. Y si mi padre supiera que nos hemos besado...

-¿Y por qué te llamó maricón?

-Supongo que por defender tanto a los homosexuales. Y también porque se enfado y sabía que esa palabra me ofendía. No sé... ¿Tú crees que se me nota tanto?

-¿Notar? - dijo zee riéndose - ¿El qué?

- Que soy gay.

-¿Qué? Venga ya saint, tu no eres gay. Y tampoco creo que bisexual.

-¿Entonces qué soy? Porque me gusta mi novia, pero también me gusta mi mejor amigo.

-No lo sé saint, yo creo que...

La voz de Vianey llamándonos hizo interrumpir a zee. Los dos miramos a la pequeña que se acercaba dando saltitos con un amigo suyo.

-saint - dijo Vianey - Te presento a mi mejor amigo.

-Hola ¿Cómo te llamas?- le pregunté al niño.

- Jamie - dijo este.

-Hola Jamie, encantado de conocerte.
-¿Eres la mamá de Vianey? - preguntó en niño.

La mamá de... ¿¡Qué!?- zee se empezó a reír.

-¡Jamie! Ya te he dicho que zee no es mi papá, que es mi hermano ¡Y saint es un chico!

Miré a zee incómodo ¿A qué venía todo aquello? zee continuó riéndose.

-Ya sé que saint es un chico - dijo Jamie molesto -Pero hay chicos a los que les gustan los chicos. Yo vi a unos una vez, tenían un hijo, y mi mamá me explicó que a veces las parejas de dos chicos o dos chicas cuando adoptan a un hijo, que uno de los dos suele hacer de mamá y el otro de papá. Entonces como había visto a tu papá con él...

-¡zee no es mi papá! - exclamó Vianey.

Me estaba muriendo de vergüenza y zee seguía riéndose. La verdad es que me quedé asombrado ¿De verdad había padres en este mundo que les explicaban a sus hijos ese tipo de cosas? Por una parte me alegraba de que hubiera padres tolerantes. Pero por el otro lado me moría de vergüenza que a causa de las explicaciones que le habían dado a Jamie, se hubiera pensado que zee y yo éramos novios.

-saint... ¿Estás bien?- me preguntó la hermana de zee

-Sí ¿Por qué?

-Te has puesto rojo - añadió Jamie riéndose.

Me coloqué las manos sobre las mejillas. Estaban ardiendo. Qué vergüenza... Miré a zee, que seguia riéndose, y le pedí ayuda con la mirada.

-Bueno venga chicos, ir a jugar - dijo zee entre risitas.

Vianey y Jamie se fueron corriendo sin decir nada más. zee se volvió a reír.

-¿Te parece gracioso?- dije malhumorado.

-Te hacen bullying hasta los niños- se rió zee

-¿No me parezco a una tia no?- dije mirándome el cuerpo.

Zee empezó de nuevo a reírse, cosa que me dio rabia.

-Vete a la mierda - dije mirando hacia otro lado.

-Eres adorable, saint

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