capitulo 37

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(Flashback narra orn)

—Putos tacones de mierda... Se los voy a meter por el culo a aquel que se le ocurrió la grandísima idea de inventar esta tortura humana. Acabará la noche y yo estaré en el hospital con los pies hinchados ¡Joder! — dije malhumorada quitándome los tacones para darme un respiro.

— Madre mía ¿Quién eres tú? Pensaba que ya estabas más que acostumbrada a los tacones — dijo day mirándome los pies.

—Yo también lo creía...

Me quedé descalza sobre aquel suelo de madera con los tacones en la mano. No me hubiera arreglado tanto para una fiesta de pacotilla, lo hacía obviamente por saint. Hoy era un día especial para ambos, aunque más para él, y quería estar lo más guapa posible para mi novio. No estaba apenas nerviosa por lo que tenía planeado que pasaría hoy, no iba a ser algo nuevo, pero para mi novio sí. Lo que más miedo me daba era que para él saliera mal.

Miré los tacones con desprecio y después clavé la vista en el suelo. Probablemente ese suelo estaba lleno de mierda, pero me dio absolutamente igual. Me apetecía andar descalza, encima no tenía pensado quedarme mucho tiempo más allí. Ya serían las 10 y media, muy pronto, pero tampoco había venido pensando en fiesta.

Le pegué un sorbo a mi vaso. Sabía a vodka con algo, no estaba segura de que, lo había cojido de la barra de la cocina donde había diferentes tipos de bebidas. Ese vaso era mi primero y seguramente también el último.

—¿Estas bien? — oí una voz justo delante de mí.

Levanté la cabeza y vi a sammy preocupada mirándome los pies.

—Sí tranquila, son los tacones. En un rato se me pasará el dolor.

—Vale... — dijo esta — ¿A que no adivinais qué? zee está ligando con una rubia abajo — sammy se rió.

—Qué raro... — comentó day que estaba a mi lado — Ese tío nunca para. Se queda con todas.

—Como le envidias day — le dije riéndome — A veces se que te encantaría estar soltero.

—¿Soltero? ¿Yo? Na... Con hwahwa estoy muy bien. Aunque es verdad que si estuviera soltero ligaría tanto como el fiera albino ese.

—Claro que sí day — dije dándole unas palmaditas en el hombro a mi amigo.

Volví a beber un poco más de la bebida y observé un poco la fiesta. Me encontraba en el segundo piso de la casa junto con day y sammy que acababa de llegar. La casa de Mew era bastante grande para ser un simple chalet. Tenía tres pisos, tres baños, cuatro habitaciones, dos salas... En el segundo piso había una sala que conectaba con las habitaciones de ese mismo piso y tenía unos cuantos sofás, y allí era donde yo estaba apoyada contra la pared de la sala. La música estaba puesta abajo pero llegaba hasta aquí, se estaba más tranquilo que abajo, pero aun así había mucha gente charlando. Entre ellos estaba hwahwa, hablando con una pelirroja de trencitas a unos metros de nosotros.

Mi mirada fue a parar a las escaleras cuando vi a una morena bajar con Mew de el tercer piso, los dos iban hablando y continuaron bajando hacía el último piso. Mientras bajaban la morena me miró y me dedicó un falsa sonrisa, yo se la devolví con todo el odio que puede expresar. Aparté la vista de las escaleras para encontrarme con la mirada de sammy.

—¿En serio orn? Olvídate de ella ya.

—Sí. Olvídate de ella — repitió day

—Tu cállate, que no tienes ni idea de que estamos hablando — dijo sammy enfadada.

day se rió y se fue adonde estaba su novia.

—No puedo — dije.

—Sí puedes. Además sabes perfectamente que no se lo contará. Lleva muchísimo tiempo amenazando con ello y nunca lo hace. Encima saint está abajo con zee...

—¿Y qué va ha hacer zee? ¿Ligarsela también? Si ni siquiera conoce a fah...

—No, pero, seguro que si ve a saint hablando con otra chica se acercará por curiosidad y fah se callará la boca. Tú tranquila.

No contesté. Me limité a quedarme allí en silencio. Sabía perfectamente que zee no se ligaría a fah, primero porque zee solo se ligaba a una por noche, y si ya estaba con una ahora mismo como había dicho sammy... Y segundo, porque sabía que era gay. No le gustaba ligar con chicas, aunque el dijera que a veces le resultaba divertido el hecho de conocer gente nueva y que normalmente solían ser divertidas... fah tampoco parecía ser de su tipo. Quizás le debía haber dicho antes a zee quien era fah para que supiera exactamente quien era la chica de la que le había hablado tan mal.
Sabía que podía confiar en zee, había demostrado haber sido buen amigo con tan solo no entrometerse entre saint y yo. Sabía perfectamente lo que a mi amigo le sucedía. Estaba enamorado de mi novio desde que era pequeño y jamás se lo había confesado, sino había dedicado su adolescencia haciéndose pasar por heterosexual para no perder la amistad de saint. Sabía perfectamente que saint no dejaría de ser el mejor amigo de zee por mucho que esté fuera gay, el problema era si él descubría que su amigo estaba enamorado de él. Entendía la situación en la que zee se encontraba, de hecho hace dos años me paso lo mismo, yo era saint y sammy era de zee.

Aunque supiera que zee estaba enamorado de saint yo no me preocupaba por nada, tenía entendido que zee no intentaría nada con él, aunque yo ya le había dicho más de una vez que debía salir del armario. Zee  me dijo que no se entrometería en nuestra relación y yo sabía que era verdad, no lo haría. Ya cumplió su palabra cuando le pedí por favor que no le contara nada a saint sobre el beso que me di con sammy. En cuanto a sammy y a mi, tenía entendido que no había nada.

Salí de mis pensamientos en cuanto vi otra vez el color moreno de aquel pelo de la persona que tanto odiaba. Esta vez no bajaba, sino subía hacia arriba. Tuve la esperanza de que me dejara en paz, y por un momento pensé que que ni se iba a acercar, pero estaba equivocada, la morena vino directamente hacia a mi. Llevaba un vestido verde y unos tacones negros, y aunque me jodiera admitirlo, la muy guarra era muy guapa, probablemente más que yo.

—Anda, pero mira quien esta aqui. Pareces aburrida —fah hablaba con un tono burlón.

—Lo estoy — dije fríamente.

—¿Porqué no bajas con tu novio? Él también parece aburrido. Su amiguito no le hace mucho caso—fah miro a sammy que se había alejado de mi hace unos minutos para hablar con unas chicas de al lado — Ah... Creo que ya entiendo porque no bajas.

—¿Qué más te da a ti si bajó o no?

—Nada en realidad. Me ha llamado la atención verte aquí tan sola.

—Sí, y por desgracia ya no lo estoy. Así que si no te importa dejarme sola de nuevo...

—Oh. Encima que he venido a hacerte compañía ¿Me echas?

—Se que no has venido a hacerme compañía.

—¿Yo? ¿Para qué iba a venir sino? Solo quiero llevarme bien contigo — el tono de hablar de fah dejaba totalmente claro que me estaba vacilando, sentí una especie de ira crecer en mi interior.

—Ja ja ja — me reí irónicamente — Claro, igual nos convertimos en mejores amigas.

—Es posible — dijo esta sonriéndome — ¿Qué? ¿Problemas con los tacones?
Fah miró mis pies descalzos. La forma en la que me había hecho esa pregunta me sorprendí bastante, ya que sonó bastante amigable. Aun así seguía sin fiarme de ella.

—Sí — me limité a responder. Y después me volví a poner los tacones.

—Te entiendo, a veces son una tortura. Creo haber oído que hoy es una noche especial para ti y para saint ¿No? Por eso te has puesto tan guapa.

—Sí — volví a responder dudando de a donde iría a parar esta conversación.

—Sería una pena que algo saliera mal ¿No crees?— ahora sí que parecía empezar a meterse conmigo — ¿Qué pasaría si derrepente saint descubriera tu gran secreto orn? ¿Crees que seguiría queriendo tener la noche especial? De verdad que lo sentiría mucho, sería horrible. Un año de relación lanzados por la borda. Encima saint te odiaría de por vida y no volveríais a ser amigos. Bueno... Si esto pasara, quiero que sepas que yo siempre estaré disponible para ser amiga de tu querido novio y consolarlo de los recuerdos de su horrible primer noviazgo. Pobrecito... Me da pena pensarlo y todo.

—Cállate fah — dije molesta.

—No lo niegues querida orn, ambas sabemos que te cuesta admitirlo. Sabes perfectamente que está muy mal lo que le estas haciendo. No le quieres contar la verdad ¿Pero porque? ¿No sería mejor que lo supiera de ti que que lo descubriera él?

—Cállate — repetí.

—Si no se lo quieres contar tu, se lo contaré yo.

—Llevas diciendo eso desde que nos viste y nunca lo has hecho.

—Mm...¿Cómo se lo diría? Emm... saint, tu novia es lesbiana — dijo fah como si yo fuera saint.

—¡No soy lesbiana!

—Se lió con su mejor amiga unas semanas antes de que vosotros os volvierais novios — continuó diciendo.

—¡Estas celosa! ¡No pudiste soportar lo que vistes!

—¡Ui! Claro que no pude soportarlo. No pude soportar ver como una guarra a la que le gustaba un chico se liaba con su mejor amiga y luego encima se iba con el chico que le gustaba.

—¡No pudiste aceptar que sammy fuera lesbiana!

—¿¡Cómo no iba a aceptarlo!? No soy homófoba. Solo pienso que por tu puta culpa hiciste que sammy se enamorara de ti para que luego encima le dieras esperanzas y después la abandonaras por el pobre de saint que no sabe nada de esto ¿De verdad que no te sientes mal? Eres una zorra de cuidado... Vas de flor en flor experimentando con los sentimientos de las personas. Puta.

—Atrévete a llamarme eso otra vez— dije furiosa.

—P. U. T. A. — dijo fah de letra en letra — PUTA.

—Vaya... Sí la niña sabe deletrear — dije acercándome a ella — Pues yo tambien se hacerlo: V. E. T. E. A. L. A. M. I.E. R. D. A.

—Oh esa a sido buena — dijo fah riéndose.

Cada vez estaba más cerca de fah y me estaba tragando la tentación de pegarle una hostia allí mismo. ssammy debió de vernos ya que en escasos segundos ya se estaba metiendo de por medio para que paráramos.

—NO — dijo sammy poniendo las manos en medio de las dos y separándolas a cada una hacia un lado — No empeceis.

—¡Ha empezado ella! Siempre está igual — dije.

—Perdona, pero tu eres la asquerosa que va de...

—¿Que va de qué, eh? — dije intentado quitar los brazos de sammy de en medio.

—Ya basta — dijo sammy empujándome hacía atrás.

—¡PUTA ZORRA ASQUEROSA!

—Eso lo serás tú guapa ¡Vete por ahí a meterte con tu puta madre! Que te aburres y no sabes ni que hacer — la contesté.

—¡PAREN! — gritó sammy.

Las dos nos callamos y miramos a sammy. Sammy poco a poco fue bajando los brazos de en medio. sammy había conseguido pararnos, pero no había conseguido calmarme. Aún tenía ganas de tirarme encima de fah y arrancarle la cabeza. Miré a mi alrededor, todos nos estaban mirando. Pasaron unos segundos, nadie decía nada, tan solo se oía sonar la canción de Shake it off de Taylor Swift del piso de abajo. Y cuando creí que ya me había calmado lo suficiente, fahme dedicó una sonrisa falsa y eso ya fue suficiente como para que esas ganas de matarla me volvieran a consumir. Esperé a que sammy diera señales de pensar que ya había acabado todo aquello. Entonces sammy suspiró cansada y yo me abalancé a por fah.
Un grito de sobresalto se escapó de la boca de fah. Mis manos fueron a parar a su pelo y comencé a tirar de él con todas mis fuerzas. Pensaba dejarla calva si hacía falta.sammy empezó a chillar para que paráramos y fah soltaba cualquier insulto que se le pasaba por la cabeza. Fah  me agarró del brazo y me empezó a dar tortas con la mano. Era todo un show, todo el mundo estaba mirando, algunos pedían que nos separaran y otros gritaban la palabra "Pelea". Fah también me agarró del pelo y yo intenté quitármela pero no podía. Sentí a alguien detras mio tirando de mí para pararme, entonces fue cuando intentando quitarme a fah le golpeé a la persona que tenía detrás con el codo. Sobresaltada empuje a fah y esta se cayó al suelo. Me giré y sentí como mi corazón se encogía ante lo que veían mis ojos.

Sammy me miro asustada, se llevó la mano a la nariz y cuando se miró la mano se dio cuenta de que estaba sangrando por la nariz. Yo no sabía qué decir. sammy se alejó de mí lentamente y después se fue corriendo y se metió en un cuarto. Fah dijo algo que apenas oí, pero yo la ignoré por completo, salí corriendo detrás de sammy y entre en el mismo cuarto que ella.

—sammyyo... Lo...— dije en cuanto entré.

—Prométeme que no vas a volver a pelearte con ella — me interrumpió enfadada.

—Lo siento... — terminé la frase.

—Lo digo enserio ¡Joder! Te he dicho mil veces que lo único que quiere fah es reírse de ti un rato, no te dejes llevar por tu odio, ella lo hace a posta para provocarte —sammyse sentó al borde de la cama — Me preocupo por ti orn... Me importas más de lo que tu piensas.

Me quedé callada durante un rato y después salí de allí para dirigirme al baño. Al volver, tenía un cacho de papel higiénico en la mano, cerré la puerta y me senté junto a ella. Agarré delicadamente la cabeza de sammy y con el papel en mi mano le limpié la sangre que brotaba de su nariz. sammy me miró confusa. Nuestros ojos se encontraron y comencé a sentir algo en el estómago.

—Tú también me importas sammy... — dije medio hipnotizada por sus ojos.
sammy bajo mi mano de su cara y colocandola sobre su pierna me miró aturdida.

—Se sincera — dije — ¿Qué sientes? ¿Qué sientes por mi?

—Muchas cosas... — contestó.

—¿Qué cosas?

—No... No lo sé — dijo sammy agarrándome de la mano.

Tragué saliva. Odiaba afah, era verdad, pero en parte era porque ella me recordaba cosas que eran verdad, y yo quería negarlo pero no podía. Me daba rabia que me contara las cosas que yo no quería escuchar. "Hiciste que sammy se enamorara de ti para que luego encima le dieras esperanzas y después la abandonaras por el pobre de saint que no sabe nada de esto" había dicho fah. Y era verdad... Y también quería negar que esto estaba pasando. Quería negarme a mí misma que me acababa de inclinar sobre sammy y que ahora mismo la estaba besando.

Era la segunda vez que probaba sus labios después de mucho tiempo, tanto tiempo que había olvidado lo que se sentía. No mariposas, sino un zoológico completo montando barullo en mi estomago. Admiraba el respeto que tenía sammy por mí, nunca se había lanzado a mí, las dos veces había sido yo, y por la simple razón de que a mi me gustaba o salía con otra persona. Pero yo no parecía respetar a esa "otra persona" como hacía sammy. Era una egoísta.

Me separé de ella sintiéndome culpable. Sammy  me miró asombrada, no aguantaba más allí, tenía que irme. Me levanté sin decir nada y me fui de allí. Comencé a bajar las escaleras y me topé con la mirada de saint. Mi corazón se encogió. Hoy era la noche... Se me había olvidado... Mierda. Intenté dedicarle una sonrisa y baje corriendo. Nada más llegar le di un pico rápido intentando disimular, aunque me estaba costando la vida...

—Tú debes de ser la novia de saint ¿verdad?— dijo una morena que se me acercó de repente.

—Sí — dije confusa. Después vi a zee y entonces comprendí que era la chica con la que zee estaba ligando.

—Ella es natt, me la ha presentado el pesado de zee — explicó saint.

— ¿Preparada para hacer la tarta orn? — dijo zee.

¿Qué tarta? Me reí para disimular más. No me apetecía intentar entender una de las estupideces de zee.

— ¿saint, nos podemos ir de aquí ya, por favor? Me estoy hartando de este sitio — le susurré al oído a saint.
Necesitaba irme de allí. YA. 

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