capitulo 29

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- Bueno... ¿Querías algo verdad? - me preguntó sammy justo después de soltar la flecha.

-Sí.

Estábamos en el polideportivo de la ciudad en un sala grande donde se practicaba tiro con arco. Sammy  hacía tiro con arco desde que tenía 5 años, era muy buena en ello, y luego también montaba a caballo. Dedicaba mucho tiempo a las horas extraescolares. De vez en cuando había venido con sammy a verla practicar y hacer competiciones.

Me encontraba detrás de ella sentado en un banco. sammy no me había hecho mucho caso en todo el tiempo que llevábamos allí , así que la mayor parte del tiempo lo pasé sumergido en mis pensamientos. Ya habían pasado unas cuantas semanas desde la fiesta de natt y lo de zee cada vez iba a más. Siempre que quedábamos solos, nos acabamos besando, tal y como decíamos en nuestro trato que hicimos de amigos con derecho. Cosa que aún me parecía mal.

-¿Y lo que quieres es...?- dijo sammy dándose la vuelta y acercándose a mi.

-Hablar.

-Bien. Eso lo puedo hacer - se rió - ¿Qué tal el día?- dijo de bromas.

-No... Haber... No quiero hablar del día. Es algo más serio.

-Entonces ¿Sobre qué quieres hablar?

Me quedé callado unos segundos. Tenía que encontrar la mejor manera de contárselo a sammy

-zee - dije finalmente.

-Oh... zee. Menuda novedad - dijo suspirando y cogiendo una flecha - ¿Qué ha pasado?

-Bueno... No creo que este sea el mejor lugar para que te explique lo que ha pasado - miré a la gente que se encontraba en la misma sala - Si no te importa. Lo hablamos cuando salgamos.

-¿Y para eso has venido? Podrías haber venido más tarde y no tragarte todo el entrenamiento.

-No tranquila... Me gusta verte entrenar.

Sammy  sonrío y se giró con la flecha en la mano. Se acercó a la línea de tiro se colocó y lanzó la flecha. La flecha se clavó justo al lado de la anterior en el medio. Una voz que oí por el fondo indicó que todos los arqueros podían ir a recoger las flechas de las dianas. sammy, como el resto de los arqueros fue a recoger las 6 flechas ya lanzadas.

-¿Me voy a enfadar?- preguntó sammy cuando llegó de vuelta.

-¿Eh?

-Ya sabes... Me prometiste que no la cagarías de nuevo con zee. Y después me dijiste que lo habías arreglado con el. Sería verdad ¿No?

-Em... Bueno... - solté una risita nerviosa.

-¿sammy? - una voz masculina con un acento algo peculiar nos llamó la atención a los dos.

Miré al lugar donde procedía la voz y me encontré con un chico de entre unos 20-25 años de edad. Tenía los ojos rasgados así que debía de ser asiático ¿Quién era? No le conocía... Lo miré de arriba abajo. Su pelo era de color azabache y sus ojos eran marrón clarito. Era alto, bastante musculoso y muy guapo. Espera... ¿Desde cuando yo me fijaba en los chicos?

-¿Quién es? - preguntó señalándome el asiático.

-El es saint. Uno de mis mejores amigos.

-Oh... saint. El famoso saint - se rió.
Miré a los dos algo confuso ¿El famoso?

-saint. El es perth, un nuevo monitor de tiro con arco de este año. Se ha mudado de Japón.

-Ah... Eh... Konnichi wa - dije sin saber muy bien qué decir.1
perth se rió.

-Konnichi wa saint. O genki desu ka?2
¿Que? No entendí nada. Miré a sammy aturdido. Perth se volvió a reír.

- O genki desu ka quiere decir "Qué tal estás" Y ahora tú me tendrías que contestar Genki desu, que quiere decir "Estoy bien".

-Ah pues... Genki desu - imité a perth.

-¡Bien! - me aplaudió - Hajimemashite. Encantado de conocerte saint. sammy me ha hablado mucho de ti.

- ¿A sí?- miré a sammy.

-Sí. Eres mi amigo más interesante. Lo que no te pase a ti...

Enarqué las cejas ¿No habría sido capaz de contarle nada verdad? No creo... Podía confiar en sammy.

-Bueno chicos, voy estar por aquí por si necesitáis algo. Sayounara.

- Sayounara - repetimos los dos.

-lindo ¿eh?- dijo sammy una vez que perth ya se había ido.

-¿Qué le has contado de mí?

-Tranquilo. Nada personal. Aunque no hubiera pasado nada si le hubiera contado más cosas sobre ti. Seguro que lo entendería... Es gay ¿Sabías?

-¿Tienes que hacerte amiga de todos los homosexuales?

-Los detecto con facilidad - dijo soltando una carcajada - ¿A qué no está mal? Es muy atractivo. Ya sabes... Si no te funciona la relación de orn ni la de zee, ya sabes donde encontrarle.

-¡Cállate! No bromees con eso ¿Sabes lo mal que me siento con todo esto?

-¿Estás dando por hecho que "Esto" - dijo haciendo comillas en la palabra esto - sigue? Osea que me has engañado y sigues con zee haciendo... cositas.

-¡No! Osea sí. Pero cositas no... Bueno o sí...

-¿Sí? ¿Qué tipo de cositas?

-De eso te quería hablar...- me rasqué la nuca nervioso.

-Uy... Que miedo me das saint

-Te debería de dar más miedo zee...

De repente una voz muy conocida me llamó de la lejanía. Me giré para ver una niña con otro niño a unos metros de mí. La chica salió corriendo hacía mí ¿Es que no podía hablar con sammy sin que me interrumpieran?

-¿saint? ¿Que haces aqui? - preguntó Andrea en cuanto se acercó a mí.

-No... ¿Qué haces TÚ aquí? - dije marcando la palabra tú mientras la señalaba.

-Me ha traído un nuevo amigo que tengo del instituto. Es el hermano de uno de los monitores nuevos. He venido a ver como va la cosa. Igual me apunto a tiro con arco.

-¿yacht?- dijo sammy.

-Sí yacht ¿Lo conoces?- preguntó Andrea.

-Hombre claro. El adorable hermanito de perth. Ese que viene por ahí - dijo indicando al niño que se acercaba a unos tres metros de nosotros - Konnichi wa Hiro. O Genki desu ka?

- Konnichi wa sammy. Genki desu- contestó este.

-¡Que guay! Te apuntas a tiro con arco y encima aprender Japonés - comentó sammy

yacht se rió.

-Si quieres te enseño robótica. Se me da bastante bien - dijo yacht orgulloso de sí mismo.

-Wow. Eso sería genial ¿Entiendes ahora porque quería amigos Japoneses saint? Son geniales.

-Sí, lo son- afirmó Andrea mirando a yacht.

Me fijé bien como le miraba Andrea a yacht. De verdad que parecía gustarle.

-Adiós chicos nos vamos a ver si conseguimos algún arco y puedo probar esto. Me tendrás que dar clase un día de estos sammy - dijo Andrea.

-Claro. Y con mucho gusto encima. Adiós chicos. Pasarlo bien.

Andrea y yacht se fueron alejando mientras charlaban entre ellos. Hacían buena pareja...

-No puedo seguir entrenando. La intriga me mata - dijo sammy dejando el arco en una esquina - Voy a recogerlo todo, nos vamos y me cuentas todas las "cositas" de las que tu hablas.

sammy comenzó a recogerlo todo y dejando todo en su sitio. En menos de 10 minutos ya estábamos saliendo del polideportivo. Y entonces me empecé a poner nervioso.

Había decidido que no podía seguir ocultando más lo mío y lo de zee. Necesitaba contárselo a alguien. Sobre todo después de lo que había pasado... ¿Quién mejor que sammy? Esperaba que zee no descubriera que se lo iba a contar a sammy. Pero le daba vueltas y vueltas a la cabeza y estaba hecho un lío. Necesitaba a alguien que me ayudara, que me aconsejara.

-Antes que nada... No te enfades por favor - dije caminando por la calle.

-Vale. Ya es oficial. Me mentiste sobre lo de zee. En fin... No me enfadaré.

-Jo. Sí, te mentí. Y lo siento. Quedé con zee con que no se lo diríamos a nadie. No pude contenerme, le volví a besar.

-Bueno, no pasa nada ¿Ahora me explicas que era lo que me querías contar?

-Sí, eeh... Uf. No sé por dónde empezar.

-Pues por el principio ¿No?

Miré a sammy levantando una ceja.

-Vale, vale lo siento. Empieza - se disculpó.

-Pues... Durante todas estas semanas he estado con zee muy a lo... Ya sabes. Es como si fuéramos a rollos en secreto. Bueno, más bien es como si fuéramos pareja en secreto. Cada vez que pasa algo entre nosotros luego me arrepiento. Pero mientras lo hago, no. Me gusta estar con él, me gusta besarle, no puedo negarlo. Y aunque quiera parar no puedo.

-En resumen. Te gusta tanto zee que no puedes contenerte.

-No. Bueno, sí... ¡Ag! No lo se.

-¿Y cuando quedáis pasan cositas?

-No. No pasaban cositas. Ayer fue cuando pasó algo...

-¡Qué pasó! ¡Cuéntamelo! ¿Dónde? ¿Cómo? Soy muy cotilla lo siento ¡Pero cuéntamelo!

-Sí, sí. Tranquila. Fue en los vestuarios de gimnasia en el instituto...

De repente sammy cogió aire de golpe indicando que se le había ocurrido algo. La miré y esta me miró con picardía.

-¿Sexo?

Me quedé callado durante un rato. Tenía que contárselo, debía contárselo...

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