BULLIE - CHAENNIE G!P

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POV Jennie
— ¿Es enserio? — apreté mis dedos en el cuero de la silla, la directora me miraba incrédula y fui incapaz de poder hablar con normalidad en todo lo que estuve aquí. — me dice... no, dices que Chaeyoung, la misma, Chaeyoung Park... ¿te golpeo ayer?

— Si. Lo hizo.

— ¿Por que? — ¿Hay una razón? Ella solo me reclamaba por el profesor Lee. ¿Había otra razón?

— Porque le da gana. Es un matona, ella y sus... secuaces. Ellas estaban presentes.

— Jennie, no creo capaz a Chaeyoung.

— Lo es, juro que lo es. — tengo miedo. — A-Ayer, me dijo que... me insultó, me llevo al baño y me tiro del cabello, incluso me casi me asfixia en los pasillos— No debía decirle lo del profesor Lee, ¿y si el se metía en problemas?

— Jennie— sentenció firme, se que me cree, se que algo la detiene— es solo una etapa. No alucines.

— ¿Etapa? ¡¿Etapa?! — Una puta etapa, no puedo creerlo— No creo que hostigarme sea una etapa para ellas, más bien, son unas psicopatas.

— Señorita.

— Son idiotas. Una insensibles, no pueden hacerme esto...

— Hare lo posible— sabía, por la forma en que lo decía, que no haría nada. — Adiós.

— Pero...

— Adiós señorita Kim. — su sonrisa, esa sonrisa. Todos lo que me lastimaban tenían esa sonrisa, aburrida y con desdén, tan cínica y odiosa.

— Le digo la verdad.

— Usted necesita ayuda, se la daré. Ahora, tiene que irse.

Claro que necesito ayuda, pero sería una gran idea empezar por ella primero.

— ¿Problemas?

— Me das asco— la pelinegra volvió a reírse, sabía que la acusé, ¿por que no hace nada?

— Jennie, tu me das asco y principalmente, te estas metiendo en un lío. Pero como se que la directora es una lame botas, ninguna de las tres vamos a salir perjudicadas.

— Ya veo. Si no fuese así no dudaría que serían unas cobardes.

— No lo niego, todos somos unos idiotas cuando sabemos que tenemos poder... por que dime, ¿quien haría esto estando una posición como tú? — su cercanía, odiaba tanto la cercanía que tomaban estas chicas conmigo. De las tantas veces que estaban casi encima mío tenía ganas de escupirles. — No vales nada.

— ¿Cómo sabes eso?

— Te dejas pisotear, si fuera tu armaría un escándalo pero no tienes la suficiente confianza en ti misma para hacerlo.

— Te odio.

— Y lo único que haces es repetir lo mismo, "te odio" — burlona, retrocedió hasta llegar a la puerta, rogaba por que cayera y aún así no me imaginaba un rostro avergonzado— Eso siquiera me hace cosquillas.

Incluso se que si algún día cae, ella alzaría su cabeza como la reina que es. Ella tenía razón, no soy nada.

[***]

Once de mañana, el día eterno. Como es de conocerse, los días para mi son un suplicio. Revivió cada vez que puedo, y cuando lo hago caigo de nuevo convirtiéndose en un ciclo. Jisoo, así se llama. Esa persona que tenía razón, y lo peor es que me duele reconocerlo. Solo en limito a hacer mis tareas, ¿y lo demás? ¿Hyuk es parte de mi vida? Por que trabajo por el. Claro, soy pobre y no tendría donde vivir. No puedo inscribirme a ningún club, el único club "gratis" de esta escuela era el de literatura, era tan aburrido, en ese entonces no debió llamarse así por que todos iban a dormirse en los sofás y a tener sexo, si, enfrente de todas. La directora descubrió tales cosas y cerró el club permanente despidiendo a la profesora, una joven de 25 años que decía que su vida de estrella estaba por comenzar, sus historias eran fantásticas lastima que todas eran un delirio.