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POV Jennie
Las cosas se habían volteado. Odiaba ahora mismo más que nada a los giros de la vida. Hyuk había vuelto. Entro al departamento igual o peor que la última vez, esta vez impedí que Tony entrara. Le di el dinero y me quedé en ceros, el caos que montó en departamento me rompió en dos. Lo último que tenia lo destrozó completamente.

No sé qué hice ahora, envuelta en las sábanas rasgadas la noche recaía.

Volví a caer, pero más bajo. Hyuk arrebató la poca estabilidad que tenía en mi alma. Por eso lo odio. Por eso odio Nayeon. Por eso odio a Chaeyoung, a Lee por haberme ayudado, a Jisoo y a Lisa. Odio a Jeon, y me odio a mi. Por no ser capaz de ser fuerte. Por no ser capaz de hacer frente a todo lo que rodea y protegerme a mi misma de todos aquellos que me hacen daño.

Son mil demonios. Están saliendo uno por uno, haciendo daño.

El teléfono sonó. Segundo timbre y conteste.

— Jenn...

— ¿Si?

— Jennie. Soy mamá.

— ¡Mamá! Dios, perdón. — Me golpeé internamente, cómo fui capaz de no reconocer su voz. — ¿Q-qué paso?

— Quería saber cómo estabas. Me preocupe no saber de ti en días, apenas pude desocuparme... — Escuche su pena, la comprendía. — ¿Todo está bien? ¿Estas bien?

No. No lo estoy. Nada esta bien.

— Todo está bien. — Suspire, aguante las ganas de llorar— Todo esta marchando bien, el... yo... yo estoy bien. Lo juro mamá.

— Jennie, sabes que puedes contarme lo que sea. Si algo te inquieta-

— Ma, todo esta bien. Lo juro. Solo que, ya sabes. A veces algo falta pero, después todo se arregla — Mentí bien o ella simplemente ignoro el hecho—. Ya sabes, problemas que están destinados a pasar.

— El viernes te haré depósito — Después del silencio habló— Perdóname Jennie, por enviarte allá y quedarme acá, — Una lágrima brotó — pero hay buenas noticias.

— ¿En serio? — Intente sonar bien, pero ese maldito nudo en mi garganta no me dejaba ni respirar.

— Si, logre que me ascendieran de puesto. Logre mantenerme al margen estos meses y el jefe me ascendió — Pude imaginar su sonrisa. Mordí mis labios para evitar cualquier sonido contraproducente, no puedo ser débil con ella. —. Pronto vamos a estar juntas Jenn. Muy pronto.

— Eso espero. — Te extraño. — Lo ansio con ganas.

— Come bien, disfruta la escuela, haz muchos amigos... — Quise reír amargamente, pero ella no se merecía saber la pena por la que estaba pasando — Se feliz. Cualquier cosa que esté mal, no dudes en llamar que, dejaré de hacer todo para que tú estés bien. ¿Entiendes? — Asentí con la cabeza, ojalá pudiera verme.

— Lo entiendo — Le di la respuesta.

— Debo colgar, mañana será un día cansado. Descansa, mi niña. — No dije nada.

— Descansa. — Colgué.

Mi visión se tornó borrosa. Mi pecho dolía de una manera horrible, mis roncos lamentos alertaron a Kuma, que enseguida escuche las patitas golpear sobre el piso.

Me dolía siquiera poder darle algo de felicidad a mi perro. Me dolía no poder ser feliz, también me dolía no tener a mi mamá a un lado.

Ella sabe que estoy mal. Lo sabe más que nadie, pero sé que esto es por un motivo.

BULLIE - CHAENNIE G!PDonde viven las historias. Descúbrelo ahora