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POV Rosé
—Hemos hecho gran parte, no creo que sea eficaz...—Ella hablaba tanto, tanto que comencé a irritarme. Mire a Jennie sonreír, y eso me gustó.

—Son difíciles, pero no creo que no sea algo que no podamos hacer—Confesó la otra, moviéndose justo de su lugar tapándome la vista.

—Si tú dices... ¿qué opinas?—Se dirigió a mi, quien siquiera sabe de lo que hablaban. Me incline hacia atrás y vi a las tres. Yuna tomó mi brazo.

—¿Qué opinas?—Suspire, no sabía que decir. ¿Que dices cuando no sabes nada? Exacto, nada. —Opinó que Chaeyoung y yo lo podemos hacer, mientras se encargan de stand.

El stand, claro. Fue eso.

—No creo que...

—Si Chaeyoung se encarga de la teoría, todo estará bien—Me sonrió la primera, siquiera me moleste en saber sus nombres. No le agradecí.

—Bien, esta bien.

Las dos se levantaron, había algo en este día que no me parecía normal. Digo, nada era normal en mi vida. Me dispuse desde el principio a no decir nada, me sentí agobiada y de repente aturdida, el sol picoso en medio de este invierno consternaba más mi existencia. Los dedos Yuna rozaron los míos, desperté de mi repentino viaje.

—Puedes ir a mi casa, después de las tres. ¿Qué dices?—Habló repentinamente.

—¿Eh?—Y aunque escuche perfectamente, no entendí.

—Ir a mi casa después de las tres, podemos ir juntas—Sonrió, Yuna tenía linda sonrisa. Y eso es admirable, es una chica hermosa, pero nada que se asemeje a la hermosura de Jennie. Si ella no existiera, tal vez...

—No creo que pueda—Recordé a mi padre, a Jennie.

—Pero deberíamos hacer el trabajo Chaeng.

—No sé si pueda ahora, no me siento bien.

—¿Mañana?—Insistió. La presencia de Yuna ahora parecía más pesada. Creo que por eso no quería estar a su lado. O tal vez por las palabras de mi padre.

Nada más había en mi cabeza. Estos últimos días las cosas eran del todo opacas. No había una razón por la cual fuese así, pero la presencia de Mason en casa era arrebatadora. Ese hombre era un infierno existiendo. Podría jurar que me sangraría la nariz con solo verlo. No hemos hablado, tampoco me ha dirigido la palabra; solo ayer. Solo ayer bastó con arruinarme la "paz", me preocupe porque de pronto el quisiera cruzar palabras conmigo. Algo había pasado, y yo no estaba enterada. Incluso el extraño comportamiento de Jennie ante mis ojos, eso evitó tanto nuestra cercanía últimamente. Solo la mire. No me refugié en ella, esta vez solo decidí alejarme un poco. Noté como una vez me miraba, parecía extrañada y lejana, sus ojos negros no me transmitían la absoluta confianza de antes. Quise echarme la culpa, en las noches pensaba que había hecho algo malo y que en verdad, yo no servía para esto.

Ella no es así, no es una chica que ve problemas donde no los hay. Esta mañana no habíamos hablado, solo me limité a darle un beso en la mejilla. Ella volteó su rostro, fue perfecto porque Jisoo la saludaba y después se fueron. Mi pecho se oprimió bastante. Y suspire. No dije nada.

Los grupos eran de cuatro, lastimosamente no tuve la oportunidad de elegirla a ella, esto fue obra del profesor. No quise meterme más en ello, pues Jennie estaba perfectamente con sus compañeras de grupo. Sobretodo en esa castaña, con esa sonrisa amable y ojos avellana entre sus pestañas, es perfecta y vi que siempre busca a Jennie. No recuerdo su nombre, pero alguna vez lastime de ella.

La recuerdo, Jihyo.

Apreté mis labios. Había algo que no me conformaba, eran amigas. Lo son, estoy al tanto y puedo asegurar que no hay nada más que una linda amistad, pero la forma tan plácida en la que están me hace sentir celosa y de nervios.

BULLIE - CHAENNIE G!PDonde viven las historias. Descúbrelo ahora