Flawless Drama © | Taeten

III

Taeyong había estado pensando sobre su apariencia, si mismo y las palabras de Kun el día anterior, se miro en el reflejo de su móvil pensando en que realmente nada bueno podía salir de él, era una persona fea, simplemente eso, Kun siempre fue guapo a comparación de él, ni haciendo el mayor esfuerzo del mundo lo haría. Soltó un suspiro cargado de angustia, lo último que quería era acomplejarse por su apariencia pero no podía evitar hacerlo.

Actualmente estaba en la biblioteca, debía estar en clase de educación física pero no estaba de humor para estar ahí y tampoco quería que comenzarán a burlarse tan rápidamente de su delgado cuerpo.

Se levantó del suelo y buscó entre la sección "Cosas de la vida" algo que le ayudaría a superar aquello, sintiéndose satisfecho cuando encontró un libro titulado "¿Cómo ser confidente consigo mismo?" y otro "¿Cómo mejorar tu autoestima?" en la misma sección, tomandolos para volver a su lugar especial y sentarse a comenzar a leer. Lo primero que leyó es que para ser confidente con él mismo debía aceptar quien era y aprender a amar a esa persona, como ejercicio estaba mirarse en el espejo y comenzar a decirle cumplidos a tu reflejo hasta que esos cumplidos se reflejen en tí y así puedas aceptarse, se preguntó si realmente funcionaba y decidió intentarlo cuando llegará a su dormitorio, también leyó que si quería tener buena autoestima debía amarse tal y como era, claro también debía aprender a cuidar su cuerpo, a hacerlo lucir y sobre todo, aceptarlo.

Después sacó su móvil y colocó YouTube en sus vídeos y buscó vídeo de como mejorar su apariencia, entre ello supo que debía comenzar a aprender a estilizar su cabello pues este influía mucho en como te veías, que debía tener una rutina de cuidado de la piel, que su postura era importante y sobre todo la seguridad que tenía. Cuando por accidente su móvil se apagó y miro su reflejo, su estómago se revolvió al pensar que sería imposible mejorar algo que de veía así.

Recordó las palabras de los libros que había leído y se preguntó si es realmente lo que necesitaba, pero mientras lo hacía, el producto de que haya pasado la noche en vela pensando en lo mal que se sentía consigo mismo hizo efecto y terminó cayendo dormido ahí mismo.

[...]

—

Odio tanto a Mark Lee, ¿cómo se atreve a desafiarme de esa manera? Es un completo idiota— Soltó Johnny molesto mientras él y Sicheng rodaban los ojos con molestia.

Pudo notar como él y Taeil iniciaban una conversación pero, ¿a quién engañaba? No tenía ni el mínimo interés en ella, su mente solo podía estar enfocada en la hora del almuerzo unas horas atrás, justo cuando Sicheng dijo que iría a lavarse las manos al baño y tardó más de lo que debería. Alzó la mirada hacía Kyungsoo, el chico que él y Winwin habían tomado de lacayo con tal de que dejará de ser molestado por todos los demás.

—Oye Kyungsoo.

Este alzó la mirada y lo miro confuso para aclarar su garganta y hablar:

—¿Si, príncipe?

—¿Sabes que pasó con Winwin en la hora del almuerzo? Ya sabes, cuando se fue al baño y tardó más de lo usual— Cuestionó sintiéndose molesto cuando este mordió su labio nervioso.

—No lo sé príncipe, no fuí con él— Cuestionó haciendo a Ten bufar.

—¿Cuántas veces más te debo decir que lo acompañes a donde sea?— Replicó—. Sabes lo de su problema con los besos, no podemos dejar que alguien se aproveche de ello.

Kyungsoo avergonzado de disculpó.

—Winwin me dijo que no lo acompañara, yo solo sigo órdenes— Explicó, haciéndolo rodar los ojos.