XLV

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Estaba confundido, nervioso pero sobre todo alerta porque sabía que algo raro estaba pasando. A pesar de haber pasado casi una semana, aquel día le recordaba al de su cumpleaños, era prácticamente lo mismo con un Sicheng mirando su móvil cada que podía, riendo de todo lo que decía o simplemente moviendo sus manos con impaciencia. Sabía que planeaba algo, es decir, no era muy difícil de descifrar, y aunque sabía esto decidió no decir nada y continuar con lo que sea que estuviera haciendo.

—¿Se puede saber a dónde vamos?— Preguntó y él otro se rió, apartando su mirada con sus manos jugando entre ellas.

—Al gimnasio, ya te dije que quiero enseñarte algo— Dijo y él asintió, fingiendo creerle.

Caminó junto a su mejor amigo hasta quedar fuera del gimnasio, donde este fingió sorpresa por algo que leyó en su móvil, él aguantandose la risa por lo cómica que era su expresión y porque este se encontraba en la pantalla de inicio.

—Espera, debo ir a hacer algo rápido, por mientras tú entra— Dijo y se despidió antes de prácticamente huir.

Demasiado sospechoso... No sabía que tramaba pero a pesar de saber que nada de lo que estaba pasando era natural, la curiosidad le ganó y abrió las dobles puertas del gimnasio para entrar todo estando oscuro. Frunció el ceño y se adentro un poco, decidido a caminar hacía las gradas para esperar sentado a Sicheng pero entonces las luces fueron prendidas de imprevisto y él ahogó un grito de sorpresa.

—¿Qué caraj-?— Sus palabras fueron calladas por él mismo cuando se dio cuenta de que Taeyong se encontraba ahí, vestido con un esmoquín, su cabello bien peinado y con unas flores en sus manos—. ¿Taeyong?

—H-Hola— Lo saludó, acercándose hasta quedar lo suficientemente cerca para que Chittaphon notará sin problemas que tenía un leve y bonito maquillaje en su rostro, entregándole las flores que él tomó de inmediato.

—¿Qué está pasando?— Preguntó sin poder evitar sentirse asustado.

—A-Ah yo— Taeyong tragó en seco, mirando nervioso por un segundo detrás de las gradas, volviendo a dirigir su mirada rápidamente a él—. Ahm...

Ten se cruzó de brazos, sin haber perdido el detalle de que cierto japonés fisgoneaba detrás de las gradas, justo en el mismo lugar que Taeyong había mirado con nerviosismo. Ignorando aquello mejor decidió prestarle atención al otro, quien parecía que en cualquier momento se iba a desmayar de los nervios, jugando con sus manos y en ocasiones aflojando su corbata.

—¿Qué está pasando y por qué parecer que me vas a pedir matrimonio?— Cuestionó con la ceja alzada, él otro ahogándose con su saliva.

Lo observó mirar la ventana de la sala de audiovisuales, entonces abriendo sus ojos con sorpresa, desconcertado cuando "Imagination" sonó por los altavoces, haciendo que abra su boca sin poder evitarlo, pensando en que de verdad le iba a pedir matrimonio.

—¿Tae...?

—El collar— Fue lo único que dijo, él tomándolo confuso para sacarlo de dentro de su camisa, así viendo la bonita luna en este.

—¿El collar...?

Taeyong inhaló profundamente y después de varios segundos de retener su respiración exhaló, luciendo más confiado consigo mismo.

—El dije del collar, la luna, significa que vivirás un amor romántico— Explicó, él solo pudiendo mirar con sus ojos brillantes este—. Es por eso que quiero pedirte algo, Chittaphon, ¿quieres ser mi novio?

De pronto en la gran pantalla blanca se proyecto una imágen que decía, ¿quieres ser mi novio? Con flores y corazones alrededor y el detalle de un oso con un corazón entre sus manos, guiñando el ojo haciendo que Taeyong se ahogará con su saliva sin saber aquel detalle mirando inquieto al otro, quien había tapado su boca con su mano libre, mirándolo totalmente anonadado.

Es entonces que el castaño se puso intranquilo al instante, haciendo una rápida señal a la ventanilla en la sala de audiovisuales, la música y la proyección yéndose de inmediato.

—O-Olvidalo, si no quieres e-esta bien— Dijo con sus ojos escociendo al ver al otro tan solo quedarse en silencio—. Ah, fui demasiado tonto, de seguro fue muy incómodo, lo lamen-

No pudo evitar soltar un sonido de sorpresa cuando las flores cayeron al suelo y al segundo ya tenía a Ten, con ambas manos sobre sus mejillas, moviendo sus labios sobre los suyos, en un beso que no pudo corresponder si no segundos después debido a la impresión, tomando los hombros del otro no teniendo dificultades en seguir el dulce ritmo que el tailandés había marcado.

Cuando se separaron y abrió los ojos temeroso cualquier rastro de inseguridad se fue al ver la bonita sonrisa del más bajo acompañada de dos grandes ojos brillantes que hicieron su corazón derretir y que se viera contagiado por todo aquello, sonriendo de la misma manera.

—Sí, mil veces sí— Asintió, su sonrisa ensanchandose—. Si no lo preguntabas tú lo haría yo, tardaste demasiado.

Taeyong se rió no pudiendo responder porque de pronto Yuta y Kun aparecieron, disparando serpentinas que los cubrieron por completo, Ten soltando una carcajada divertido.

—¿Ustedes planearon todo esto?— Preguntó el tailandés cuando Sicheng entró con una gran sonrisa.

—Claro que sí, ya se habían tardado en comenzar su relación— Se rió el chino.

—¡Ehh! No se tomen todo mi mérito, YO fuí quien hizo todo este plan y se encargo de todo— Soltó Yangyang, quien caminó hasta ellos con una sonrisa—. Pido ser el padrino de la boda.

Ten se rió, no sorprendiendose por la presencia del moreno.

—¿Por qué no me sorprende que hayas estado involucrado en esto?— Cuestionó con la ceja alzada, él otro sonriendo en grande.

—Porque fue tan bueno que era imposible que no estuviera involucrado— Dijo con orgullo, los demás riendo.

—Eres un ególatra— Murmuró Kun, quien tomó su mano el moreno rodando los ojos.

Ten aprovechó para acercarse a tomar la de su ahora novio, quien se mostró nervioso al instante, riendo tímidamente con sus mejillas rojizas.

—Se siente bien saber que ahora eres mi novio— Dijo apretando el agarre.

Taeyong se sonrojo y asintió de acuerdo.

—Yo digo que vayamos a comer, digo, para celebrar los nuevos novios— Opinó Yangyang, todos asintiendo de acuerdo.

Ten sonrió asintiendo, recordando la fecha de ese día, un bonito 4 de marzo, definitivamente nunca lo iba a olvidar.

















AHHHHHHHHH QUE BONITO. 😭😭

Al fin ya son novios, soy felicidad pura, de vdd ya se habían tardado. En fin, gracias Yangyang por tu existencia y por hacer que estos dos por fin sean novios. 🛐🛐

No tengo nada más q decir, so, nos leemos luego!! 💕

Flawless Drama © | TaetenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora