No te duermas [Editando]

Capítulo 1.

Estaba estirada en la cama escuchando al gran John Bon Jovi y su Wanted dead or alive, sin que nada ni nadie me molestara, pero sin embargo me sentía observada. Quería abrir los ojos cansados después de toda una semana de exámenes finales, por si había alguien y estaba en lo cierto. Ahí estaba él. Veía a esa persona que estaba de pie, seria y quieta. Me sonaba de haberle visto en alguna ocasión, en algún lugar. Esa ropa, esa cara, ese hombre en particular estaba segura de haberlo visto. Cuando tuve el valor de preguntarle quién era y qué quería, escuché una voz que me llamaba, alguien me impedía descubrir la respuesta a todas aquellas preguntas.

No quería irme de aquella habitación donde ya no era la mía sino que había sido sustituida por una oscura, fría y sin vida. Una habitación donde solo estábamos los dos. Tenía la necesidad de saber quién era el desconocido y qué quería de mí. Él, sin embargo, estaba quieto, en frente de mí mirándome fijamente, sin decir palabra. Solo se dignaba a empezar a sonreír con maldad.

Esa voz consiguió que abriera los ojos y fue entonces cuando comprendí que solo era un sueño. Estaba armada de valor para hablar con aquel hombre que para mí, era siniestro, cuando el pesado de mi hermano me había despertado. Le pregunté qué quería, y él limitándose a contestar me dijo que mamá y papá se habían ido fuera y que él quería cenar, a lo que yo le respondí que fuera a la cocina que dentro de nada bajaba yo. Me levanté despacio, pensando una vez más en ese hombre, ese individuo que había conseguido asustarme, otra vez.

Llegué a la cocina, preparé la cena para Jack y para mí, eran las 22:03 cuando acabamos de cenar. Jack me preguntó con cara de niño que nunca ha roto un plato si podía ver la televisión, con una sonrisa falsa le contesté que sí, pero solo media hora. Subí a mí habitación y cogí el libro que estaba leyendo y retomé el punto donde me había quedado. Cuando me quise dar cuenta ya había pasado una hora desde la última vez que había mirado el reloj. La televisión seguía sonando abajo en el salón, el tiempo estimado ya había pasado y Jack seguía allí. Bajé las escaleras y desde ellas lo pude llegar a ver tumbado en el sofá, dormido. Me dirigí hasta él, le cogí en brazos y cuando me giré sobre mis propios talones, allí estaba él de nuevo. Le pregunté una vez más qué quería de mí, quién era, pero él se limitaba a seguir sonriendo con malicia. Se lo volví a preguntar, esta vez más fuerte que la anterior, casi chillando, pero en un abrir y cerrar de ojos me vi despierta, tumbada en mi cama con el libro entre mis manos, y mi madre delante de mí preguntándome con preocupación si estaba bien, pero yo era incapaz de pronunciar palabra; solo pude preguntar qué hora era, ella me respondió que eran las 3:07 de la madrugada. Seguidamente, casi al instante sin dejarla apenas a acabar la frase, le pregunté por Jack, me dijo que estaba dormido y que papá lo estaba arropando. Ella me volvió a preguntar si me encontraba bien, yo le volví asegurar que sí, que solo estaba algo descolocada que había tenido un sueño extraño y antes de que me preguntara por éste le dije con un tono insistente que estaba bien; pero sabía que mi madre era suficientemente inteligente y me conocía demasiado para intuir que no lo estaba del todo, que algo me pasaba o me preocupaba. No iba a dejarme tranquila hasta descubrir el motivo del por qué estaba de aquella manera. No después de estar los últimos tres meses entrando a mi cuarto casi todas las noches en mitad de ésta, justo después de haber tenido una pesadilla con aquel desconocido.