Historia de dos corazones.

Capítulo 30 - "El mundo a mi favor"

Dedicado a Rochi Martin~

Candela: a ver si sin tu noviecito podés animarte a decirme algo.

Y sí, todos esperaban o que uno; le conteste y se arme una pelea, o que dos; tenga miedo y no diga nada, dejando que me humille frente a todos.

Que tan en lo incorrecto que estaban.

Sólo hice lo que estaba por hacer. Después de mirarla, giré y me dirigí a la multitud.

Yo: ¿pueden callarse? Me harté de tanto bullicio. Gracias -y me volví a sentar-

Candela: guau, si que practicaste.

Yo: ¿perdón? ¿Practicar qué? Solamente quiero hablar con mis amigas en paz -y volví la mirada hacia ellas- Como les decía, sí, nos vieron. Igual no me retaron por eso, más les interesó mis estudios y toda la bola.

Luh: ah, mejor.

Nati: sí.

Candela: ¿no tienen vergüenza de sentarse con esta?

Nati: vergüenza me da tener que verte la cara esa de imbécil que tenés.

Yo: dejala, Nati. Estaría de más bajarse a su nivel.

Nati: no, no, no. Sólo era un opinión. Si la sigo mirando desde arriba -todas reímos-

Yo: con su estatura medio difícil que no te mire desde abajo.

-Si no se dan cuenta, están sentadas y ella parada -se metió Melanie-

Karu: ay, Mel. Pero que comentario más inteligente -toda la sala carcajeó-

Yo: ¿podemos seguir?

Nati: con gusto, amiga.

Candela: gracias por cagarla, Melanie.

Mel: sólo te defendí.

Candela: no lo vuelvas a hacer.

Toda la clase exclamó a unisonio la última vocal mientras rodeaban sus bocas con las manos.

Mel: okay, no te preocupés. A mi apoyo no lo tenés más, gordi -y reventó la bomba de chicle de su boca-

Candela: nunca lo pedí.

Eugenia: ah, sorry. ¡Se nos re revelaron todas eh! ¿No eran amigas ustedes dos?

Candela: ¿yo amiga de esta inútil? Si no sirve para nada, sólo para ayudarme en mis joditas.

Mel: no te preocupés, me quedo con Ángeles. ¿O no, Angie?

Candela: mentira, ella está de mi lado -y la tomó del brazo empujándola hacia su parte-

Y así empezaron otra de sus típicas e interminables peleas.

¿Ya ven? De esto les hablaba, todas son unas falsas. Las creídas no son creídas si no se odian entre ellas y fingen amistad sólo por el simple hecho de dar una imagen de superioridad al resto.

Ángeles: yo...

Todos sabíamos con perfección que Ángeles iba para donde le conveniera. Candela era más atrayente ya que era obvio que tenía más neuronas vivas que Melanie, pero en resumen sabía que si tenían que abalanzarse contra alguien ella iba a ser un punto claro.