Por Siempre, Amor

El infierno en sus ojos

Narra Nick:

Pasaron dos largos días y aun no tenía ninguna respuesta de esa mujer, a pesar de que yo mismo la llame para hacer un trato en contra de lo que había dicho Lestat sobre negociar con ella, claro que, todo era parte de un plan que Sophie había maquilado. Aunque debo admitir que me daba miedo pensar que esa mujer sospechara algo de nosotros y por eso aún no nos daba alguna señal.

Sin embargo, Sophie había considerado los recientes acontecimientos y muy probablemente esta vez sí tendríamos éxito.

Además, después del desafortunado encuentro de Dove con esa mujer, Lestat puso más protección en los alrededores del castillo para que ni ella ni cualquier otro desconocido pudiera entrar sin invitación previa, así que, no podría tendernos una trampa, por lo menos no dentro de los terrenos protegidos.

Mire mi teléfono una vez más en la última media hora con la esperanza de tener alguna respuesta, pero aún no había nada, ¿Cuánto tiempo más nos haría esperar? Suspire con pesadez y me dispuse a ocupar mi mente en algo más, quizá me uniría al entrenamiento de Joe y Steffanie, no estaría demás, considerando todo lo que se avecina.

Salí por una de las puertas traseras en dirección al jardín, justo por donde estaban Damon y Katherine enseñándole algunos "trucos vampíricos" a Dove y por supuesto, no podía faltar Jin, ya que el sabueso se dedicaba a cuidar de la joven escocesa a cada minuto. Él era algo extraño, todo el tiempo parecía despreciarla, pero aun así velaba por su seguridad, por eso no se alejaba de ella y trataba de ayudar en su proceso de cambio.

Seguí mi camino hacia el punto donde Joe y Steffanie entrenaban algo de combate, pero antes de llegar con ellos pude ver a Sophie con JK escondidos entre los arbustos. Me acerqué con curiosidad y fue entonces cuando me di cuenta de que el chico estaba muy quieto mirando a la nada con el cristal rosáceo que yo había robado entre sus dedos, la rubia solo lo miraba con atención, pero cuando se percató de mi presencia, le quito el collar y JK salió de su trance.

― ¿Qué paso? No estuve mucho tiempo ahí. ―dijo él mientras fruncía el ceño.

―Nicholas, ¿Qué haces aquí? ―preguntó Sophie mirándome y guardando el collar en el bolsillo de su chaqueta.

―La pregunta real es, ¿Qué estaban haciendo ustedes? ―mire a JK con preocupación. ― ¿Le sucede algo a Evie? ―

―No, no, ella está bien. ―el chico se rasco la cabeza. ―Solo tratábamos de aliviarla un poco mientras logramos traerla de regreso. ―

―No se lo comentes a nadie por favor. ―pidió Sophie. ―No sabemos a qué grado esto puede ser peligroso, pero según Jungkook el alma de Evie siente descanso cada vez que él tiene contacto con el cristal. ―

―Pero... ―lo mire confundido. ― ¿No se supone que tu sufres con eso? ―

―Mi sufrimiento no es nada comparado al de ella, sería peor si no tratara de hacerlo, además Sophie me cuida para que lo que pase allá, no me afecte físicamente aquí. ―

―Desearía poder ser yo quien le brinde ese alivio a Evie. ―suspire. ―Siento que no hago nada por ayudarla. ―

―Manteniéndote a salvo es la manera en la que puedes ayudar, Nick. ―dijo Sophie. ―Sabes que Evie no nos perdonara si regresa y se da cuenta que a ti te paso algo. ―

Sonreí ante esa posibilidad, no porque quisiera que a mí me pasara algo, sino por imaginarla a ella, a la verdadera Genevieve. Tenía demasiadas ganas de verla, abrazarla y por supuesto, de besarla, después de haberme dado cuenta de que estuve engañado por tanto tiempo el sentimiento de vacío me inundo y me di cuenta de lo mucho que la extrañaba.